Gritos Silenciosos

XXV

Aún tenía el corazón en mi garganta, quemándome hasta que no pueda respirar ¿Camille Belladona? Por Dios, viví en la infelicidad, la mentira y el maltrato por dieciocho años de mi vida, joder. Seguía hiperventilando con grandes bocanadas de aire hasta que tocaron tres veces la puerta era papá… o más bien Steve.

— ¿Bella?— dijo desde el otro lado de la puerta con un tono alegremente fastidioso. Cerré los ojos conteniendo las lágrimas y rogué a Dios que no se escuchara mi voz temblorosa. Y al parecer mi oración fue escuchada.

— ¿Qué pasa? — pregunté, no iba a abrir la puerta.

—Hija, ahora iremos a cenar en un restaurante— ¿Y todavía me decía hija? Que hipocresía, unas cuantas lágrimas se deslizaban por mis mejillas— Al parecer Noah invitó— 

<<Una mierda voy a ir a ver a ese hijo de gran puta>> pensé, la única persona que me interesaba realmente y mi gran “ídolo” me dijo que era una niña psicópata que buscaba refugio en esta vida. Al carajo Noah Crawford. 

—Uhm… Si claro— dije con bajeza en la voz mientras apretaba mis párpados para detener las lágrimas.

—Pues Bella vístete decentemente ya que es de gran calidad— suspiró desde el otro lado de la puerta mientras yo sabía que él odiaba ese tipo de lugares

—Está bien— dije— Ya en segundos estoy abajo. Los pasos se alejaron y supe que se había ido por lo tanto agarré una toallita de manos y limpie el desastre de sangre en el suelo, ya que me había cortado.

¿Y quién no lo haría en esta situación? Si tú misma sabes que tu vida es una completa mierda, tus padres biológicos te abandonaron en la nada, tu hermanastra te maltrató toda su vida, tus “padres” dicen que eres una decepción en su vida y para finalizar tu ídolo y amor de toda la vida dice que eres una completa psicótica y lunática. 

Me acerqué al armario y elegí un short color negro, una blusa blanca con un tridente negro en ella, converse negros, y un sueter negro, me maquillé simple ya que delinee mis ojos, puse sombras negras, y puse un gloss brillante transparente que hacía que mis labios parecieran más carnosos, dejé mi pelo suelto con ondas en las puntas castañas claras y me puse perfume en mi cuello, cabellos y detrás de las orejas. Me miré al espejo y rodee los ojos, me importaba una mierda si estuviera linda o no… Aunque estaba algo guapa. Agarré mi bolso de mano de lentejuelas doradas y puse allí el sobre rojo más mi IPhone y estaba lista. Una vez abajo, Noah, Halston y los mentirosos de mis padres estaban sentados en el sillón mientras las noticias pasaban.

Mi IPhone sonó llamando la atención de todos y mientras me ruborizaba buscaba patéticamente nerviosa la maldita chatarra, ya que de tono de llamada tenía la versión de “Go whit Gravity” en piano. 

<<Carajo>> pensé, era Marta y atendí rápidamente mientras papá ya se había levantado y pude ver que Halston tenía un vestido rosa con brillos pegado al cuerpo y le llegaba justo bajo el muslo, con tacones del mismo color que el vestido, de peinado se dejo su rubio cabello suelto y se maquillo como profesional. Muy distinta a mi.

—Hable— dije algo aturdida al sentir la mirada de Noah en mi

—Cariño habla Marta— dijo mi maestra desde el otro lado del teléfono— Sólo te quería avisar que los ensayos comienzan mañana por la mañana.

—Está bien, no veo la hora de bailar y olvidarme de todo— dije pensando en voz alta, carajo. Al parecer Noah había escuchado y se tensó

—Es comprensible— ambas reímos— Estarás espectacular eso te lo aseguro— su voz era un susurro, como si estuviera pensando— Bien… pues ven mañana a las ocho, haremos el pre-calentamiento y empezaremos con la coreografía del cisne negro ¿Si?

—Claro, no lo dudes estaré allí— dije emocionada por que sea mañana— Nos vemos mañana Marta— se despidió y colgó la línea. Puse el celular en la mesa ratonera. Mientras me acomodaba el cabello 

— ¡Bella!— fui corriendo hasta las puertas para irme y cuando abrieron las puertas era todo un mar de reporteros y Graviters gritando a todo pulmón. Al instante Hlaston se pegó como carne a la uña a Noah y sonreía demasiado a las cámaras. Y fulminaba con la mirada a las niñas que se acercaban a Noah para sacarse una foto, una vez afuera recordé que había dejado el celular y pedí de mala gana a mi madre las llaves. Ella me las dio mientras arreglaba el vestido de Halston (que parecía ramera de todas formas) y fui apurada a la casa a buscar mi celular. Lo puse de nuevo en mi bolso y salí, ahora era yo la presa de los paparazzi. 

— ¡Estas hermosa hoy Bella!— dijo el reportero de E! news

—Muchas gracias…— dije tratando de recordar su nombre— Alex ¿Cierto? — él asintió con cara de enamorado y me acerqué a saludarlo con un beso en la mejilla. Iba caminando a paso lento ya que no me permitían ir tan rápido con todos los flashes que me cegaban la vista. Hacían preguntas a toda hora y me mareaba poco

—Despacio— reí— No los comprendo a todos juntos, hagan una pregunta a la vez y responderé a todas— sugerí, y me paré mientras ellos sacaban desesperadamente las fotos— A ver… Alex— lo miré— ¿Alguna pregunta? —

—Claro que si— reímos todos— ¿Qué se siente ahora que eres famosa? Ya que cantaste en los premios y de haber dejado a todos con la boca abierta

—Pues— dije pensando— Yo no me creo famosa— todos negaron con la cabeza mientras reían— Es cierto, solo canté una canción para cubrir un puesto vacío y bueno… solo surgió. 

Alex asintió con la cabeza y miré al reportero de TMZ, cerré los ojos mientras lo señalaba

—Mike Donnel— dijo el hombre bajito, recordé su nombre y asentí esperando su pregunta— Aquí no hay solo Graviters si no Bellalovers ¿Qué se siente tener fans de un momento para otro?

—No lo creo— dije dudosa ¿Fans? ¿Yo? No lo creo, ni soñando— pero por si acaso es verdad, pues… gracias nunca me imaginé llegar a tener fans o mejor dicho Bellalovers. Las quiero y los quiero un montón chicos. ¡Última pregunta! — dije ya que había llegado a la acera donde estaban todos esperándome dentro del auto mientras miraban atentamente la escena

—Corran sus traseros estúpidos— dijo al parecer una mujer rubia con una sonrisa bella, la reconocí al instante era Chelsea una señora de E! que tenía un programa que adoraba ver “Chelsea Lately” — ¡Yo! — Dijo ella saltando en su lugar y le sonreí mientras le saludaba dulcemente— ¡Vendrías a mi programa mañana a las seis en punto! —

— ¡Claro que sí! — dije mientras reía, me dio su número de celular y yo le di el mío, se despidió satisfecha y les agradecí a todos por su atención— Gracias chicos, pero ahora tengo que ir a cenar— Alex me abrió la puerta y Mike sostuvo mi mano para que entrara al auto como una princesa, todos reíamos y cuando cerró la puerta el auto era un profundo silencio sepulcral. 

Nadie dijo nada durante el camino, lo que me puso mucho más nerviosa. Una vez en el restaurante, no había reporteros pero había muchas fans de Noah, eran todas muy simpáticas y lindas. Bajamos todos y cuando estábamos entrando al restaurante los insultos y opiniones nada lindos comenzaron

<<Halston es una puta>> dijo una chica, coincido contigo hermana. Coincido contigo

<< ¿Perdiste la cabeza o el buen gusto Crawford?>> dijo otra chica gritando a todo pulmón

<<La hermana está más buena y te aseguro que es más mujer>> eso fue una voz masculina y al instante abrí los ojos y el rubor abundó mis mejillas. Halston sonrió fríamente y pude ver que en su cara había vergüenza, y odio. Agarró mi muñeca con su mano libre y la apretó fuertemente, y de pronto sentí que estaba abriendo las heridas, quería hacerme quedar en ridículo. Agité mi brazo fuera de su alcance y entré corriendo al restaurante para poder limpiarlas y se con certeza que nadie había visto.

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