10

547 45 13
                                    

Termino mi larga caminata, dos horas más tarde con los pies adoloridos y congelados debido a la fina tela de mis converse negras, en la Plaza Navona. Debería crear un apartado en mi memoria que se llamara recordatorios pues, evidentemente, no había pensado muy bien muchas cosas como los zapatos.

Tomo asiento y suelto el aire contenido. Jesús, José y María... iba a tener calambres en los pies.

ꟷVaya, vaya... pues mira quién está aquí. La malhumorada.

Tapo mi rostro con mis manos y evito soltar un grito de frustración. ¿Acaso el Universo me estaba haciendo pagar por todas las veces que hice pasar un mal momento a Valentina?

Evidentemente no es un ángel, parece más bien un demonio.

ꟷBien... disculpa.

Observo sus ojos oscuros abrirse cual platos e, inconscientemente, mis labios forman una sonrisa. Toma eso, maleducado.

ꟷVale, esa no me la esperaba.

No puedo evitar reír por su reciente acento y más aún cuando su asombro se convierte en una mueca de desconcierto.

ꟷ¿Te burlas de mí?

ꟷ¿De quién si no?

ꟷVale, te estás vengando.

ꟷClaro que no... -mis labios se elevan en una sonrisa, en un intento de contener la risa.

Sus ojos se vuelven una pequeña rendija en mi dirección y una carcajada escapa de mi interior.

Oh, sí... me mandarían al infierno por burlarme de su acento.

____

Gracias por leer, espero poder actualizar más seguido este mes pero no prometo nada =)


ConectadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora