44

381 39 8
                                    

Como pésima turista que soy, mi primera parada fue la Torre Eiffel. Como apasionada de las historias de amor, avalé mi comportamiento.

Merecía ser mi primer destino en la ciudad del amor y las luces.

Luego de subir por el ascensor y contemplar la vista así como de gastar más dinero del necesario comprando suvenires, me decanté por realizar algo que había descubierto que era realmente tranquilizante.

Simplemente me senté y disfruté de la vista y del aire fresco acariciando mi rostro. Y aún me encuentro efectuando esta acción. Me siento tranquila como nunca antes lo había hecho y feliz de poder encontrarme donde estoy.

ꟷ¿Victoria?

Miro a mi alrededor, buscando a quien haya pronunciado mi nombre. No veo caras conocidas y como no entiendo ni una palabra del francés, vuelvo mi atención al paisaje frente a mí. Probablemente he escuchado mal.

ꟷ¡Oye!

Volteo sobre mi propio eje, utilizando a mi trasero como soporte y encuentro a un sonriente muchacho mirándome.

Mi corazón se llena de alegría de inmediato.



ConectadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora