Torpe||Wigetta||Adaptación

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2024

Guillermo bostezo y miro con somnolencia el reloj junto a la cama.

Seis cuarenta, Samuel no tardaba en llegar.

Volvió a cerrar los ojos y soltó un suspiro, acomodándose y estirando la mano para tentar el espacio a su lado, cuando no sintió el cuerpo de su bebé, abrió los ojos asustado y escaneo la cama. Al no verlo se sentó de inmediato, el corazón latiéndole a mil y una frialdad recorriendo su cuerpo.

Se levanto y comenzó a buscar alrededor de la cama, debajo de la cama, pero su bebé no estaba.

¿Donde estaba su bebé? ¿y si Alfred lo había agarrado pensando que era un peluche?

-¡Alfred!- se levanto del suelo junto a la cama y bajo corriendo hasta la sala, sus ojos como loco, buscando al perro y estaba apunto de volver a gritar a Alfred, cuando escucho una voz venir de la cocina, corrió hasta ahí, encontrándose con Samuel sentado en una silla y a su bebé sentado en la mesa frente a él.

Guillermo sintió que podía volver a respirar, pero eso no evito que cuando Samuel volteara a verlo él ya estuviera llorando.

-Hey, hey, Guillermo, bebé ¿que pasa?- Samuel cargó a Zeus en un brazo y fue hasta donde Guillermo.

-¿Porque estas aquí? Se supone que llegarías a las siete- dijo entre lágrimas.

Samuel le limpio las lágrimas confundido.

-Salí antes y te vi tan dormido que no quise despertarte, pero Zeus ya estaba despierto así que le di de comer y lo traje acá. ¿Que tienes, Guillermo? ¿porque lloras, bebé?

-Yo me desperté, y, y Zeus no estaba y no lo encontraba, y estaba tan asustado- agarro a Zeus de los brazos de Samuel y lo abrazo contra él-. No me vuelvan a asustar así, tenia tanto miedo.

-Lo siento mucho, Guillermo, no creí que eso fuera a pasar- Samuel los abrazo, limpiando las lágrimas que aun caían por las mejillas de Guillermo y besando repetidas veces su frente-. Lo siento, no quería asustarte.

Guillermo solo asintió, hundiendo la nariz entre la mata de cabello de su bebé.

Todo estaba bien, tenia a su bebé y a su esposo con él.

Todo estaba bien.