Zayn Malik

Eres todo para mi.

Capítulo 4.

Me encontraba en la enfermería con la muñeca vendada mientras la enfermera me revisaba la presión. Ya llevaba 1 hora en este lugar con el espantoso olor a sufrimiento. La estupida de Sheyla y los clones que tiene por primas me habían abierto una cortada en la clase de fisica mientras jugábamos quemados. Esto no hubiera pasado si el obeso del maestro no nos diera las pelotas de basquet o fut.

-Tengo que ir por unos papeles ¿puedes esperar un momento? -dijo la enfermera guardando ese aparato para checar la presión, yo solo moví mi cabeza en respuesta. Segundos después me encontraba sola en aquel lugar. Baje mi mirada y la posee sobre la mancha de sangre que se veía en la venda. Como la odio pensé. Solté un suspiro y levante mi vista hasta toparme con el escritorio de la enfermera, mire sus carpetas y el dinosaurio que tenia por computadora antes de girar mi vista hacia la ventana donde una mariposa pasaba volando, sin pensarlo comencé a sonreír.

-HIJA ¿ESTAS BIEN? VINE LO MAS RAPIDO QUE PUDE -gritó mi madre llegando a la enfermería.

-Estoy bien -dije en un susurro sin fuerza. Realmente no lo estaba pero ella no se tenia que enterar de eso, nadie lo haría.

-¡No! ya estoy harta de que siempre digas que estas bien cuando claramente no lo estas -dijo poniéndose frente a mi.

-¿Qué te hace pensarlo? si lo dices por esto -levante mi mano -fue un accidente -dije lo mas convincente posible, era una gran mentirosa, no podia creer que tenia que ocultarme hasta de mi propia madre.

-No mientas Lucia ¿crees que no me dijeron?¿sabes lo que se siente que te llamen para decirte que a tu hija le abrieron con un balón una cortada que se había hecho? No, no lo sabes -dijo regañándome.

-Mamá... -alargue queriendo decir que no lo habia hecho, que solo había sido otro pequeño accidente que me había pasado pero eso no era cierto y cuando viera mi muñeca lo sabría. Lo admito, si, yo me cortaba la muñeca izquierda, justo donde tenia la pulsera que Zayn me había regalado hace un año, L&Z tenia tejido.

-¿Desde cuando lo haces? -susurro asustada por la respuesta que diría, la conocía muy bien como para saber que justo ahora se estaba culpando internamente por esto.

-3 semanas -solte fría.

Un balde de agua había caido sobre mi madre haciendo que se apoyara con ambas manos en el escritorio - Perdón -dije más por el hecho de que me había descubierto que por el hecho de que lo hacía.

-¿En que falle? -dijo mirando hacia abajo colocando sus manos a la altura de las orejas -¿Qué hize mal?

-Tu no hiciste nada mal, no tienes la culpa de esto -dije mirando hacia abajo también. Después de todo era cierto, esto no lo hacía por ella, lo hacía porque era una forma de sentirme bien ante todo lo que me hacían mis compañeros.

-Claro que hice algo mal -parpadeó tres veces y se acerco hacia mi tomándome las manos -Lucy por favor dime que fue lo que hize mal, he intentado hacerlo todo bien desde que tu padre nos dejo, eh sido o almenos intentado ser madre y padre para ti.

-Ya dejalo así por favor -dijo al borde del llanto, no podía ni nombrar a mi padre sin ponerme a llorar, ese era uno de mis puntos débiles.

-Prometimos no volver a hablar de eso pero siento que tiene que ver con lo que te haces.

-No, no metas a mi padre en esto.

-Entonces ¿porqué lo haces?

-Fue un accidente.

-¿Un accidente? ¿Desde hace 3 semanas? ¿Enserio Lucy? creí que eras mas lista.

-Bueno es mi vida que...