Al besar una princesa

#22: Besa una princesa casada

Si ven alguna falta ortográfica son libres de apuntarlo

Es... extraño.

Apenas abre los ojos y quiere ya volver a cerrarlos, sabe que poniendo un pie fuera de la cama no volverá a tener un momento así de silencioso.

Y está por dar un gran paso.

Lo que hace primero es revisar su celular, tiene un mensaje de Adam dándoles los buenos días, uno de Susie diciéndole que puede que se retrase, una foto de Victoria y ningún mensaje de Rachel.

El desayuno es de lo más normal, huevos y jugo de naranja, la única diferencia notable es que esta vez sus padres no cierran la boca.

Su madre no deja de decir que todo saldrá perfecto y que una vez casada y con hijos se sentirá realizada. Charlotte no lo cree de esa manera.

Su padre por su parte no deja de quejarse de que su bebita está creciendo y tampoco deja de recordarles a ambas lo traviesa que era Charlotte cuando niña.

Ella lo considera entrañable, no había tenido un desayuno tan animado con ellos en años.

Su celular recibe llamadas y llamadas luego de un rato, ninguna es de Rachel.

Se mantiene ocupada dando gracias y recibiendo halagos y luego se pasa un rato viendo su vestido.

Es tan blanco que tiene miedo de ensuciarlo, cuida sus manos inquietas y ni siquiera las posa sobre la tela. El velo cae como manantial de agua dulce, sus pestañas nunca se habían visto más largas sobre sus ojos verdes y sus labios fueron pintados de un rosa suave.

Se mira y se vuelve a mirar, las flores que han colocado en su cabello solo la hacen sentir más hermosa y es como si no pudiera tener suficiente de si misma y su reflejo.

Se toma tantas fotos como puede y es eso, se siente hermosa, de verdad que sí, pero está eso que sigue picando en su garganta y que no la deja relajarse por completo.

También, tiene que estar preparada para la pasarela que tendrá en el cuarto.

Las primeras son sus amigas, por supuesto.

—Te ves como una princesa, Charlie—chilla Victoria mientras la toquetea.

—El profesor Woods te manda una felicitación—le dice Michelle mostrándole el celular con el mensaje.

—¿Porque tienes el teléfono del profesor Woods?—pregunta Victoria achicando los ojos, bueno, eso sí que es interesante.

Michelle es atrapada con la guardia baja.

—Tutorías—ni siquiera suena creíble.

—Tu nos vas a explicar eso después-la señala Victoria y luego devuelve su atención a Charlotte—te ves tan linda que ahora quiero casarme también.

—Para eso primero necesitas un novio—señala Michelle.

—Que inteligente observación, ¿Me dices otra cosa que no sea ridículamente obvia?

—Tu pezón se deslizó.

Victoria mira su escote, solo para terminar de caer en la mentira de la otra chica que ríe como loca, Charlotte ríe también, Susie se mantiene en silencio, observándolas sin verlas realmente como ha estado haciendo todo el rato.

Luego de otra pelea sin sentido el celular de Victoria suena.

—¡Ya llegaron!—exclama alegre.

—¿Quienes?—pregunta Charlotte mientras ve como Victoria toma a Michelle del brazo para seguramente arrastrarla.

—Nuestras citas—dice con obviedad.