No pude hacer otra cosa más que mirar cómo Jacob salía por la puerta de entrada sacudiéndola casi a punto de hacerla estallar. Pude sentir su dolor, su ira hacia mí y hacia Bella, por eso lo único que atiné hacer fue lanzarle el juego de llaves de mi Aston Marin, no me importara lo que hiciera con él... lo más preciado que tenía ahora para mí era mi familia.
Sentí los sollozos de Bella a mis espaldas y enseguida me arrodille frente a ella, un atisbo de dolor surcaba su rostro cuando la vi a los ojos, un dolor indescriptible que iba más allá de lo físico, un dolor en el corazón.
_Lo siento... debí haberme dado cuenta que él nos observaba_ murmuré en un hilo de voz, mi esposa levantó la mirada con sus ojos aún destilando lagrimas de su profunda tristeza, el dorso de su mano acarició mi mejilla y sus dedos delinearon suavemente mis labios que miraba con gesto ausente,
_Solo... espero que algún día él pueda sentir la felicidad que llevo dentro ahora mismo, una felicidad que sin embargo, sin él está incompleta_ dijo mientras sus ojos derramaban silenciosas lágrimas. Tomé con mi mano la suya que acariciaba mis labios y con toda la devoción que sentía por ella besé cada uno de sus dedos como aquella vez en mi habitación, aquella vez en que accedió a ser mi esposa.
_Cariño, debes descansar_ murmuré con toda la fortaleza con la que era capaz, parecía como si el reflejo de su dolor se proyectara en mí y aún sin proponérmelo, sentía la pena que ella estaba sintiendo, sentí su dolor como si fuera el mío propio, como si Jacob estuviera aún parado tras nosotros con su corazón destrozado. Ella asintió reprimiendo un bostezo y acariciando suavemente el lugar donde el bebé retozaba, nuestro bebé...
_¿Qué piensa?_ susurró mi esposa, las imágenes desde su vientre venían hacia mí a raudales e inundaban mi cabeza de algo que no había sentido antes, algo nuevo,
_Esto es nuevo_ murmuré acariciando con las yemas de mis dedos cerca del ombligo de mi Bella, una impresión de cierta preocupación fluían desde esa pequeña mente hacia mí... un estremecimiento entremezclado con inquietud, una voz indefinida que más que decir, parecía sentir el dolor de su mamá.
_ ¿Que es?_ preguntó con curiosidad mi esposa,
_La be... el bebé parece sentir lo que tu sientes, es perceptiva_ los ojos de mi Bella brillaron por la emoción, si nuestro hijo "sentía" de alguna manera lo que mi esposa sentía... la pena, la congoja y la tristeza, se me ocurrió que tal vez fuera capaz de poder sentir también su dolor.
_ ¿Quieres decir que... que ella siente lo que yo siento en este momento? _ murmuró suavemente con cierta preocupación,
_Lo percibe, sabe que algo no está del todo bien y... se preocupa_ ella me miraba impaciente, yo hasta podía escuchar los engranajes en su cabeza haciendo las conexiones correspondientes,
_Oh..._ jadeó _él es capaz de saber todo lo que a mí me sucede_ asentí ante su confirmación _Que inteligente y que impresionante, tan pequeño..._ murmuró acariciando su vientre.
_Perceptivo igual que su madre_ dije acariciando el mismo área que ella acariciaba _tal ves este nuevo descubrimiento nos pueda llegar a servir para algo_ murmuré más para mí mismo, una nueva idea comenzaba a gestarse en mi cabeza y quería desarrollarla. Bella me miró con una media sonrisa en su rostro, sus mejillas ligeramente arreboladas me decían que, por donde se la mirara, ella estaba mucho mejor, su botella de sangre descansaba sobre su regazo y borboteaba cuando ella tomaba un poco... la garganta volvió a quemar pero tragando saliva hice el intento de reprimir la sed, aunque sin muchos resultados... la sed seguía allí al igual que mi autocontrol, gracias a Dios.

ESTÁS LEYENDO
Amanecer (por Edward Cullen)
FanfictionCuarta y ultima entrega de la saga Crepusculo narradas por Edward Cullen. !Esta historia no es mía! Solo comparto debido a que es muy hermosa. Todos los derechos a AlexaCullen, visita su blog "Letras de Lullaby"