Capitulo XII: Confesiones.

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Habian pasado dos semanas del beso entre ambos.
Junior de a poco empezaba a aceptarse y a aceptar que era lo que le pasaba con Blas.
Cada vez se veian mas frecuentemente ya que Dante habia contratado al mayor como bartender.
No podian disimular más;se sonreian o se miraban en todos los lugares donde ambos se encontraban. En el bar,en la casa familiar,en todos lados.Cuando podian se besaban y pasar tiempo juntos prácticamente ya era un hobbie que amaban.Y no,no podian evitarlo,era mas fuerte que ellos.Estaban felices.
Junior aún no estaba preparado para hablarlo con sus hermanos,con su tío o amistades,pero solo era cuestión de tiempo ya que el apoyo absoluto del pelinegro lo tenia asegurado.

-La pelicula ésta me esta pareciendo un embole barbaro,Blas-comentaba el menor acostado en la cama del mayor con un pote de helado en su mano.
-Junior,esta pelicula la querias ver vos hace semanas.La busqué por todos lados y ahora no te gusta?-reía el mayor-Que bipolar que sos.
-Bipolar o no,te gustó igual asique...-añadía Junior colocándole helado en la punta de la nariz cargoseandolo.
Blas sonrió.-No,no me gustas.Me encantas.Pero te tendria que matar porque te estas comiendo todo el helado solo,pibe-reía observando fijamente al menor.
-Y bueno...¿Qué queres que haga?La pelicula es aburridisima-rió-Y el helado en estos casos,como en muchos otros,sirve y bastante-dijo Junior.
-No está taan mala,Ju-retrucó Blas-Bah,no sé,depende del gusto de cada uno,a mi no me parece tan aburrida-exclamó haciendose el reflexivo.
Junior se lo quedó mirando extrañado y sonrío.
-¿Qué pasa? ¿Por qué me miras así?-interrogó el mayor con una sonrisa.
-No sé,fue raro que opines de películas-exclamó el menor mirandolo a los ojos-Me acuerdo que cuando eramos pibes mirabas pelis de terror conmigo solamente porque sabias que me daban miedo.Eras el único que se quedaba al lado mío haciendome compañía aún sabiendo que no te gustaban nada...-sonrió acordándose de esos momentos provocándole una repentina nostalgia.
-Si,es verdad. No son mi fuerte las peliculas...Pero si de pibito estaba ahí,con vos,acompañandote para que no sientas miedo ¿Qué te haría pensar que no esté hoy,acá,compartiendo un lindo momento juntos?-Le sonrió el mayor.
Junior imitó el gesto del rizado.
-Veni,me encantas,dame un beso-agregó el menor mientras el mayor se acercaba para poder probar esos labios tan suaves y dulces.
Se separaron por falta de aire y se miraron unos segundos fijamente.
-Me volves loco,Junior-admitía el mayor agarrandole las manos.
-Y si,soy un pibe irresistible,ya te lo dije-bromeaba Junior-Vos también me volves loco,Blas-respondía Junior dejando un cálido beso en los labios del mayor y mordiendo lentamente el labio inferior de este.
Blas hizo un leve sonido proveniente de la mordida. Pero no podia engañar absolutamente a nadie,le encantaba.Le encantaba que Junior lo besase,lo mordiera.Le encantaba verlo reír,verlo sonreír.

(...)

-Junior... ¿Y qué le dijiste a tu tío?-interrogaba Blas después de unos cuantos besos y caricias.
-Le dije que me quedaba a dormir en lo de un amigo...¿no te molesta,no?-respondía el menor con el semblante tenso.
-No,Ju.Tranquilo,te entiendo.Sé que es dificil aclararle a todos lo que te pasa y lo que sentis. Pero quiero que sepas que cuando tomes la decisión de contarlo yo voy a estar ahi,apoyandote-dijo el pelinegro con un tono dulce mientras le daba un corto beso.
-Si,lo sé Blas.Te prometo que ya voy a hablarlo...Y ahí si que vamos a poder ser felices,vamos a poder ser libres sin importar lo que digan los demás-dijo Junior agarrandole la mano e exhalando un fuerte suspiro.
Blas lo besó.
-¿Quién lo diria,no?-exclamaba éste.-¿Quién diria que el hermano de mi mejor amigo sería la persona que me enamorase y que esté pausando una pelicula para besarnos?-reía y le acariciaba la mejilla.
-Es que me aburrió,Blas.Y aparte porque quiero seguir probando esos labios tan lindos que tenes ¿Puedo?-interrogaba el menor con total seguridad acercándose.
-Por supuesto que puede-afirmó Blas.

Los besos para ambos ya no alcanzaban.
Blas empezó a depositar dulces besos en el cuello de Junior y haciendo que todo el cuerpo del menor se erize por completo.

-Blas...-interrumpió Junior en voz baja.

-¿Si,Junior? ¿Queres que pare?-exclamaba el pelinegro mientras paraba de besarlo y lo miraba fijamente esperando la respuesta de menor.
Junior amaba que Blas lo respete tanto,pero en este caso,queria que se deje llevar más.
-No,no quiero que pares.Me encanta,me encantas vos Blas-dijo el menor agarrandolo levemente del rostro para volverlo a besar. No queria alejarse de esos hermosos labios nunca más.

Junior empezó a sentir cosas con Blas que nunca habia experimentado antes.El hecho de que el mayor lo bese en el cuello,lo acaricie o lo susurre al oido era motivo suficiente para pedirle que siguiese y no parase.
De un momento a otro,todo se fue descontrolando. Junior le sacó la remera al pelinegro haciendo que el menor no pudiese aguantar tocarle el abdomen. Blas se deleitaba con las caricias que éste le depositaba,pero sabia que todavia no era el momento,aún no. Quería que Junior esté suficientemente seguro antes de tomar ese paso.
Ambos se volvieron a besar,con las mismas ganas de siempre,solo que con mas deseo,con mas pasión.Hasta que Blas exclamó:
-Ju,es mejor que paremos ahora antes de que no podamos evitar las ganas-el mayor exclamó agitado debido a la situación.
-¿Y quién quiere evitar las ganas?-exclamó el menor con la lengua rosada entre los dientes y una mirada picara.Para...¿qué?¿No te gustó?¿Hice algo mal?-dijo Junior agachando la cabeza.
-¿Cómo no me va a gustar?Me encanta,Junior. Haces todo perfecto solo que quiero que vos estés seguro.Te prometí cuidarte y apoyarte siempre.Y lo voy a cumplir-exclamaba el mayor.
-No podes ser taaaan lindo,Blas Martín Quevedo Linares ¿sos real?-decía con una enorme sonrisa.
-Dejá de hinchar-dijo el pelinegro ruborizado-,vos sos lindo. Sos lo más lindo que tengo,Junior-respondió éste.
-Te amo,Blas-el mayor quedó sorprendido ante dicha confesión-Wow,al fin lo dije.Que lindo se siente no guardarlo más,bueno...al menos a vos-rió aliviado el menor.
-Que lindo es escuchar esas palabras salir de tu boca,Junior-dijo un Blas sorprendido.
Yo me dí cuenta hace mucho que te amaba-añadió con una sonrisa-Desde que Dante te me presentó como el caprichoso de la casa y desde que ví esa sonrisa triunfadora cuando ganabas los partidos de la secundaria.Te amo y que lindo es poder mirarte a los ojos y decirtelo-admitia Blas mientras besaba al menor dulcemente.
La satisfacción que le daba poderle admitir a Junior que lo queria despues de tanto tiempo le generaba una tranquilidad increible.
-Mmmm...igual no sé,eh...porque te lo tuve que decir yo primero,bastante chanta resultó ser usted-bromeó Junior haciendo que el mayor se riera.
-Bueno,queria escuchar a mi novio decirlo primero ¿que tiene de malo?-interrogó el mayor.
-¿Qué dijiste?-dijo asombrado el menor.¿Asique soy tu novio?-dijo Junior con una amplia sonrisa.
-No,sos mi primo.Obvio que sos mi novio-sonrió.
-Me copa,me copa y mucho-exclamó Junior dandole un beso.
-Bueno,me voy a pegar un baño y vuelvo-dijo el mayor intentando levantarse de la cama pero Junior lo agarró y lo detuvo.
-No,no te vayas.Quedate conmigo.-dijo haciendole puchero. Blas no pudo evitar morderse los labios después de ver a su novio pidiéndole que no se vaya como un nene caprichoso.Le encantaba.
-Pero Junior...
El menor hizo un mohin con los labios.-Daale,Blas.Ya tenemos sueño,es tarde,no nos vamos a morir por no bañarnos.Mañana sin falta-exclamó Junior ya consumido por el sueño.
El rizado movió la cabeza de un lado a otro,venciendose ante el menor y le contestó:
-Mañana a la mañana sin falta nos bañamos ¿está bien?-sonrío para a continuación ponerse la remera.
-Obvio-dijo Junior mientras veía como se volvía a acostar al lado de él,el hombre de sus sueños.

-Te amo-expresó Blas.
-Te amo-respondió Junior.

Ambos se besaron y se durmieron abrazados.

Por verte otra vez(Blasnior)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora