Anti Tú

Capítulo XXIX: Dolor

Finalmente, tras muchas idas y venidas, aquí está el último capítulo de Anti Tú. Espero que os guste. No voy a decir mucho más puesto que aún queda el Prólogo y ahí ya me pondré nostálgica. De momento sí que diré que es posible que suba alguna historia corta sobre esta pareja (aunque independiente a este fic) puesto que tengo en mente ideas sueltas.

Ojalá todxs estéis bien y para lxs que estéis pasando un mal momento, espero que todo mejore. Un abrazo enorme. 

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Una semana había transcurrido desde el entierro de Regulus. La vuelta a las clases había sido cuanto menos agotadora para Sirius. No podía concentrarse en las materias, todo el rato aparecía la imagen de Regulus en su mente. Le había dicho que le contaría todo lo que sabía respecto a Peter siendo un mortífago. Jamás podría saber qué sucedió realmente puesto que Peter no había vuelto a Hogwarts desde la trágica noche.

Todo se había vuelto un completo caos en el colegio. La muerte de Regulus fue un gran impacto para todos. El primer alumno fallecido a manos de un mortífago, y nada más y nada menos que un Black. La noticia había corrido como la pólvora y todos los diarios del mundo mágico estaban repletos del suceso, así como de información de los mortífagos más representativos.

Ya no parecían esconderse. Todo se había vuelto más peligroso en el mundo mágico, comenzaba a hablarse de otras muertes relacionadas con los mortífagos. Algunos locos afirmaban que aquel conflicto llegaría a ser demasiado grande y terminaría en una gran guerra. La mayoría veía aquello como algo imposible. Sirius quería pensar que solo eran exageraciones aunque tenía mala pinta.

La seguridad en Hogwarts levantaba inquietudes entre los padres de gran parte de los alumnos. Dementores protegiendo el colegio constantemente. Ningún alumno se pronunció abiertamente como mortífago, pero todos sabían que era cuestión de tiempo que se supieran los nombres. Peter era uno de ellos y Regulus también lo fue. Se escuchaban nombres de posibles afines, la inmensa mayoría de Slytherin.

Y volver a clases siendo observado por todos no lo hacía especialmente agradable. La gente parecía susurrar a su paso. Tal vez en otro momento se hubiera exaltado y los hubiera hecho callar a todos, pero ese no era el caso. El agotamiento mental que llevaba acumulado no le dejaba más que recorrer los pasillos en silencio, sentarse en su pupitre junto a James, el cual ya estaba allí, y escuchar la clase como si fuera lo más interesante que jamás había escuchado.

Sentía la mirada de su mejor amigo como una constante, tal vez demasiado preocupado por su estabilidad emocional. Por otro lado estaba Remus, que desde que sucedió lo de Peter se había recluido un poco en sí mismo. Jamás había tenido más amigos que los otros tres, y descubrir que uno de ellos los había traicionado, que formaba parte del enemigo a la misma vez que era un simple alumno más lo había dejado intranquilo.

Tal vez Peter era el más callado de los cuatro, pero era uno de ellos. Un merodeador. Y no habían ni tenido la oportunidad de saber el cómo o por qué se había unido al otro mando. Peter, un chico tímido y reservado. Su amigo. Y ahora formaba parte de los otros. De lo que tanto habían repudiado en numerosas conversaciones. 

Todo era doloroso y extraño a la vez. Demasiados sucesos juntos amenazando la estabilidad del grupo. O lo que quedaba del mismo.

Aunque James y Remus sí se habían visto afectados por la pérdida de Peter en su grupo, Sirius no pudo sentir más que rabia y rencor. Lo odiaba. Regulus había intentado que Peter renunciara a los mortífagos pero este se había negado cegado por el miedo. 

Sirius solo podía pensar que el miedo no justificaba cada maldito acto cometido. Se puede luchar aterrado por la incertidumbre, pero no perder todo lo construido, todas las personas que te acompañan en el camino por puro miedo.