Capítulo Dieciséis.

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-Esta hamburguesa está muy rica -se relamió Grady.

-Sí, la señora Leonard hace las mejores hamburguesas del mundo -contestó Niall tomándose la suya.

-¿Ahora vamos a tu casa?

-Sí, pero primero tengo que parar en la tienda de mi hermano para recoger unas cosas.

-¿Tienes un hermano?

-Para ser exactos, tengo cuatro.

-Vaya -exclamó Grady-. Tienes un montón de hermanos.

-Sí -rió Niall.

El niño dio un buen trago al batido de chocolate.

-Yo no tengo hermanos ni hermanas. Una vez, le pregunté a mamá si podríamos tener uno y me dijo que no estaba escrito en las estrellas -le dijo a Niall mirándolo con curiosidad-. ¿Qué tienen que ver las estrellas con tener un hermanito?

-Supongo que lo que tu madre te quiso decir es que no estaba previsto que tuvieras hermanos.

-¿Algo así como que Dios no quiere que los tenga?

-Algo así -contestó Niall pagando-. ¿Has terminado?

-Sí -contestó el niño.

Una vez en la calle, Grady volvió a agarrar a Niall de la mano y Niall volvió a tener una extraña sensación en el pecho.

-¿Cómo se llaman tus hermanos? -quiso saber Grady mientras iban andando hacia la tienda de Harry.

-El mayor se llama Louis -contestó Niall -. Luego va Zayn, el tercero se llama Liam y el pequeño es Harry, que es el dueño de la tienda a la que vamos ahora.

-¿Es más pequeño que tú?

-No, la verdad es que tiene casi un año más que yo.

-Entonces, ¿por qué has dicho que es el pequeño?

-Porque es el más pequeño de ellos cuatro -le explicó Niall -. La verdad es que no son mis hermanos sino mis hermanastros.

-¿Y eso qué es?

-Verás, mi madre se casó con su padre y su padre me adoptó. Por eso, yo también me apellido Horan.

-Y antes de eso ¿cómo te apellidabas?

-Gallagher.

-Ah -contestó el niño quedándose pensativo-. ¿Tienes hijos? -le preguntó de repente.

-No -contestó Niall riéndose.

-Qué pena.

-¿Por qué?

-Porque, si los tuvieras, te podrías casar con mi madre y, así, yo también tendría hermanastros.

-Sí, una pena -dijo Niall abriendo la puerta de la tienda.

-Vaya, vaya, vaya -dijo Harry al verlos entrar-. Mira quién ha llegado. Pero si es mi hermano Niall. ¿Y quién es el pequeño que te acompaña?

-No soy tan pequeño -contestó Grady.

-Ten cuidado -le advirtió Niall a su hermano-. No le gusta nada que hablen de su estatura.

-No lo he dicho con mala intención -le dijo Harry al niño-. ¿Cómo te llamas?

-Grady Jacobs -contestó Grady.

-¿Eres el hijo de Melissa? -se sorprendió Harry.

Niall asintió.

-¿Sabes que mi padre y el padre de tu madre eran amigos? -le dijo Harry al niño.

-El padre de mi madre no me cae bien. El abuelo Mike es malo -contestó Grady. Aquello hizo que Harry se riera.

-Qué niño más listo -comentó-. ¿Qué querías? -le preguntó a su hermano.

-He venido para ver si había llegado la brida que encargué -contestó Niall sin quitarle el ojo de encima a Grady, que estaba mirando las botas.

-No, todavía no ha llegado, pero mañana llega otro cargamento, así que, en cuanto llegue, te aviso.

-Muy bien -contestó Niall.

Entonces, recordó que Melissa  le había contado que no tenía dinero para comprarle ropa a Grady.

-¿Tienes botas de su talla? -le preguntó a su hermano.

-Tengo botas, pantalones vaqueros, camisetas y todo lo que quieras.

-¿Y sombreros? -quiso saber Niall -. También quiero un cinturón y que le grabes su nombre en la hebilla.

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