LA FUERZA DEL DESTINO: Ten Miles Of Peach Blossom.

TODO TERMINA EN ZHU XIAN

NOTA: QUEDAN SOLO 2 CAPÍTULOS PARA EL FINAL.

Si Ming no podía concentrarse. Llevaba horas intentando escribir una historia para el destino de un par de mortales, pero nada se le venía a la mente. En los últimos días solo había escrito destinos trágicos.

Bufo molesto consigo mismo. Dejo el pincel y apoyando la cabeza en una de sus manos comenzó a pensar en toda la situación que envolvía al palacio de Tai Chen.

- ¿Por qué tienes esa cara? ¡Pareces un espectro! – le dijo Cheng Yu cuando entro al taller y lo golpeaba con su abanico en la cabeza.

- Las cosas no están como para que yo anda de buen humor.

- No puedes hacer nada más que obedecer. Y yo ni siquiera podría intervenir... si hablo, Dong Hua es capaz de cortarme la lengua con su espada... siempre he sabido que su crueldad sigue latente en su ser... tantas muertes han pasado por sus manos... ¡Que escalofríos me da pensar en eso!... ¡Mi pobre lengua!

- ¡Deja tus dramatismos! – le regaño él – recuerda de quien estás hablando.

- Como quieras. Pero piensa un poco, quizá el haya tomado la decisión correcta.

- Lo que me preocupa es lo mucho que está sufriendo pequeña princesa... hace lo imposible por llamar la atención de su señoría. Incluso fue y se le metió en los baños mientras él se duchaba... - Cheng Yu abrió la boca sorprendida mientras se ruborizaba.

- ¿Y qué paso?

- No sé los detalles. Pero creo que entro cuando Dong Hua Dijun ya estaba desvestido...

- ¡Por todos los inmortales! – exclamo aún más sorprendida - ¿crees que le haya gustado lo que vio? – Si Ming la miro un momento, le arrebato el abanico que ella llevaba y el golpe en la cabeza.

- ¡¿Puedes dejar de estar fantaseando con el cuerpo desnudo de su señoría?! – Cheng Yu hizo un gesto infantil.

- No te desquites conmigo. En todo caso, si tan mal te sientes de mentirle a Fengjiu, solo tienes que decirle la verdad oculta tras el olvido de Dijun...

- Si hago eso estaríamos oponiéndonos al destino. Ella debe casarse con el príncipe Wen Chang...

- O quizá estés ayudando al destino a encausarse... no sabemos... - Si Mign miro a su amiga y titubeo...

***

Wen Chang estaba harto de esperar. Tenía que hablar con Fengjiu y no estaba dispuesto a perder un momento más. Había sido demasiado paciente con los berrinches de la joven, respeto su espacio en soledad y sus reglas, también sus arrebatos... pero llego al límite. No le había respondido ninguna de las cartas que él le envió y eso podía ser considerado una ofensa.

Estaba molesto consigo mismo y con ella. ¿Por qué no podía entender que su lugar estaba con él y no con Dijun?

Dijun... solo de acordarse de él se le revolvía el estómago. No había querido admitir un sentimiento tan despreciable en su corazón, pero no podía más... odiaba a ese hombre de cabellos plateados.

Se vistió con la túnica más elegante que tenía, el fajín con ribeteados de oro, y la túnica color verde jade que simbolizaba su estatus como príncipe de Qing Niao.