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—¿Por qué me involucras contándome eso? No me importa en realidad.— Jungkook, fingiendo tranquilidad, cuando la verdad enloquecía internamente.

—Bueno, por más que tú no me agrades y yo a ti, siento que extrañamente tienes una conexión con esto, espero estar equivocándome.—

—Lo estás haciendo, antes yo podía salir a la calle tranquilo sin tus malditas acusaciones sin sentido, todos los días de mi vida y ahora a cada lugar que voy, estás arruinando todo.—

Hania lo miró con los brazos cruzados.
—Sólo espero que nada te salga mal de ahora en adelante.—

—Puedes estar tranquila por eso, yo nunca fallo.—

—¡Turno 55!—

—Vaya, es el mío.— Jungkook yéndose a pagar.

Preocupado subió a su carro, esto es lo último que necesitaba, más riesgos, pero no permitiría que esto sucediese tan fácilmente, no dejaría ir a Taehyung ya que estaba tan cerca de él, golpeó su volante, no lo haría.

Se tranquilizó llegando a su casa.

No podía saber nada Kim acerca de esto, no podía darle una esperanza a irse a que quisiera remontar su vida pasada a la actual, no cabía lugar en los planes de Jungkook para eso.

Bajó y fue a llevarle las cosas a Tae.

Tae lo recibió con un abrazo.
—¿Estás bien?—

Jungkook no respondió, confundido.

—Estás temblando.— Tae riendo, tocando su pecho.

—Ah, sí, estoy algo nervioso es todo.—

Fue hacia la cama, Tae no preguntó más, lo siguió, comieron juntos y sobre las donas no hubo un problema Taehyung adoraba todos los sabores.

Estuvieron más tiempo sobre la cama, conversando dándose besos, pasando tiempo juntos, pero nada especial, nada fuera de lo normal.

Jungkook se levantó, colocándose la chaqueta que hace unos momentos se había quitado. —Tengo que salir.—

—¿A qué?— Tae curioso.

—Tengo un pendiente por hacer.—

—¿No puedes dejarlo para mañana? Digo, es mi cumpleaños.— Tae riendo.

—Nope, es urgente.— Jungkook se acercó, beso sus labios y dijo sobre estos. —Trataré de no tardar mucho. — en fin, se fue sin más, cerrando la puerta.

Tae hizo pucheros, pero en fin, la felicidad que sentía ahora no se podía arruinar.

Condujo exactamente a casa de Min Yoongi, mientras conducía, iba tocando al volante con los dedos, pensando.

Llegó y tocó la puerta.

Min al abrir lo miró serio, pero lo dejó pasar.

—Necesito tu ayuda.— Jeon.

—Si le hiciste algo al chico, olvidate, yo hace mucho no se esconder un cadáver.—
Min serio.

—No lo hice, él está bien, necesito tu ayuda para otra cosa.—

—Bien, pensaste, bueno, dime ¿en qué te ayudo?— Yoongi recargándose en el brazo de su sofá, cruzando los brazos.

—Humm, verás, hoy es su cumpleaños, tú sabes, no soy romántico ... — Jeon tratando de explicar sin sentirse apenado.

—Ya ya, entendí, pero ... yo tampoco soy romántico ¿sabes? Lo más romántico que se hacer es lubricar antes de cogerlos para no lastimarlos en ves de sólo meterlo.—

Jungkook miró hacia abajo abriendo más los ojos.

—Oh dios, ¿ni siquiera haces eso?— Yoongi sorprendido de una extraña forma.

Jungkook negó.

—Bueno, tienes suerte de que aquí éste un romántico de primera, cuando íbamos en secundaria, el hacía las mejores declaraciones de noviazgo y regalos de aniversario, inclusive lo llegaron a contratar los de último año para sorpresas a sus novias.— Yoongi, caminando a su patio.

Jeon lo siguió.

Abrió la puerta y estaba NamJoon sentado con una hoja y un lápiz, los miró enseguida.

Jeon detuvo a Yoongi del brazo antes de pasar al patio. —No puedes decírselo.—

Yoongi se soltó de su fuerte y doloroso agarre a su brazo, mirándolo mal, girándose a Nam.

—NamJoon, necesito tu ayuda.—

—Claro Yoongi, lo que sea.— Nam levantándose, yendo a ellos dos. —¿Sí?—

—Necesito que me digas como hacer una cita romántica, privada, sin pasar a lo ridículo.— Jungkook.

Nam fruncio levemente el ceño.
—¿Acaso es para Jin?— algo de celos se notaban en su voz.

Jungkook se rió amargamente. —Sabes que no.—

—Bien, te ayudo.— Sonrió.

—Gracias.— Jungkook.

—Bueno, vayamos adentro ...—Nam comentó, Jungkook se movió a un lado dejándolo entrar primero, en cuanto este iba pasando entre ambos mayores, le comento. —Por cierto, antier besé a Jin.—

Jungkook se sorprendió, pues Nam lo dijo como si quisiera presumirlo, como si estuviese orgulloso de eso, cuando nada le alegraba más a Jeon.

—Genial.—Jeon entrando tras él.

Yoongi movió el rostro, entrando a la casa.

Juntos prepararon la sorpresa para Taehyung, que por dios, el juraba que no podía encantarle más, tardarían en preparar eso y Jungkook quería pasar el tiempo con Tae, así que dejó a NamJoon y Yoongi a cargo de la sorpresa y él volvió con Kim, diciéndole que fue algo del trabajo.

En fin, llegaba la hora de su sorpresa, Jeon estaba nervioso.


😋

Ahora estoy bien, actualizaciones normales.

Stockholm Syndrome [VK] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora