Lo mejor de mí || Lumbar ||

18.-Arcoiris

Resumen: (La canción en multimedia) Les dije que Emilia se los iba a garchar a todos :v además, si en la serie utilizan sus nombres de pareja, ¿por qué yo no puedo incluir eso aquí? >:v

Luna se cayó al piso con todo y silla provocando un estrepitoso ruido.

A nadie pareció importarle, estaban mirando en shock la pantalla que mostraba a Emilia corriendo lejos de las cámaras, sonriendo como una niña chiquita que acaba de hacer una payasada. Ámbar se fue tras ella, viéndose molesta, abochornada y un poco confundida.

Todos tenían su atención en la cámara, incluso Luna quien aún seguía en el suelo miraba con ojos y boca abiertos como la cámara seguía a las dos rubias hasta que ambas desaparecieron de la pista y de la vista de todos.

Fue solo en ese momento que Ramiro se compuso del shock y dispersó el silencio con su voz.

—Madre mía...—Exclamó el joven con sus dos manos en la cabeza y con una amplia sonrisa formándosele en la cara.—Madre de Dios.—Decía mientras caminaba hacia Luna y la ayudaba a levantarse.

Después de él, los chicos comenzaron a reaccionar uno por uno.

—¿Pero qué fue eso?—Preguntó Simón sin creer lo que había visto. ¿Realmente había visto bien lo que había ocurrido o su paranoia por fin había podido más que él?

—P-pero...¿Cuándo y cómo ocurrió-?...¿Cuándo fue que ellas dos se acercaron tanto que...? Dios mío...—Decía Delfina sin terminar sus oraciones debido a la impresión.

—Chicos, en serio, no puedo creer lo que acabo de ver...—Decía Jazmín con dramatismo.

—Sí...yo tampoco...—Murmuró Luna, sentándose de nuevo en su lugar.

—Bueno, Luna...Al menos llegaste a tiempo para ver el gran final, ¿verdad?—Decía Ramiro con diversión.

Luna sonrió.

—Ja ja, sí. Fue un gran final.—Se limitó a decir.—...Esto me trae muchos recuerdos...¿a ti no, Matteo?—Preguntó al chico que parecía estar teniendo un colapso mental.

El italiano la volteo a ver extrañado. Desde su ruptura, los dos ex-novios habían evitado esa clase de comentarios por respeto y para no incomodar al otro. Esta vez parecía que a Luna no le importaba para nada. Su tono de voz incluso parecía mordaz.

—No puedo creer lo que vieron mis ojitos, chicos, no puedo creerlo.—Continuaba Jazmín.

Delfina estuvo de acuerdo con su amiga.

—Lo entiendo, Jazmín, nadie se esperaba que- —

—¡¿Cómo pude ser tan ciega?!—Exclamó Jazmín de repente.

—....¿Qué? ¿A qué te refieres?—Le preguntó Matteo volteando a mirarla con confusión.

—Sí, era OBVIO que ocurría algo rarito entre las dos. ¿Cómo fue que no lo vi venir?—Se decía a sí misma la ex-amiga de Ámbar.—¡¡Pude haber sido la primera en dar la noticia de que ellas dos estaban saliendo!!—