One Shot KrisHan

Dibujo.

LuHan era el sueño de todo gay, activo, dominante. Sus facciones delicadas encantaban a cualquiera, su voz era tan melódica y bella... bueno, realmente era el sueño de YiFan.

En los recesos lo miraba con atención, cada detalle de su rostro lo memorizaba, amaba lo abultado que eran sus labios, ¿Sería tan maravilloso besarlo? ¿Cómo sería abrazarlo?, Esas eran cosas que nunca iba a poder hacer.

No, de un momento a otro no iba a pasar que LuHan mágicamente se enamorara de él. Era estúpido hasta pensar en ello.

Suspiró cuando escuchó la campana que indicaba el regreso a sus clases, ¿qué tocaba ahora?, ¿literatura? ¿matemáticas? ¿historia?, No recordaba bien.

Estaba tan ocupado mirando a su amor imposible que había olvidado por un momento que le tocaba taller de artes. Le gustaba eso, le gustaba porque era la única clase que le tocaba con LuHan.

Eran de diferentes años, pero esa clase se daba juntandolos porque el profesor no tenía tiempo para ambos años el mismo día, a veces era complicado, unos dibujaban y otros cantaban. Bastante inteligente.

Al llegar al salón de artes de inmediato vió a BaekHyun, era imposible no notar su presencia, una porque era muy lindo y la otra porque le gustaba llamar la atención de todos, a veces no de buenas formas.

Fue directamente a su asiento y sacó su cuaderno para continuar con lo de la clase pasada. Su dibujo era bueno, pero no estaba bien según él, algo faltaba.

—¿Por qué siempre dibujas a LuHan?— Escuchó la voz de BaekHyun tras él, se encogió de hombros restándole importancia, Luhan es bonito, dijo poniendo los últimos detalles a su obra.— Yo también soy bonito, ¿Por qué no me dibujas a mi? Podría hacer poses para ti.

—Lo tendré en cuenta, pero mientras quiero dibujar a LuHan.

—¿Quién me dibuja? ¿Y por qué nunca me lo dijo?— Su melodiosa voz llenó el lugar, oh, mierda. YiFan estaba jodido.

—YiFan te dibuja siempre, mira. — BaekHyun le arrebató el cuaderno a YiFan y corrió donde LuHan para enséñaselo.— Mira.

YiFan se levantó de inmediato para buscar su cuaderno, aunque ya era demasiado tarde, LuHan ya estaba viendo sus dibujos.
Se maldijo un par de veces cuando vió la carita del pequeño sonrojarse de forma casi violenta, sabía qué dibujos estaba viendo.

¿Qué culpa tenía él de dejar volar su imaginación y dibujar a LuHan semi desnudo en su cama... O en cualquier otra posición comprometedora?

Se acercó para quitarles el cuaderno, no lo hizo rápido, no tenía sentido, ya habían visto todo lo que había ahí.

—Entiendo si quieres golpearme.

—Dibujas realmente bien.

—Oh, gracias.

LuHan se acercó a YiFan, quería susurrarle, pero no alcanzaba. Mierda.
Así que lo tomó de los hombros e hizo que se agachara.

—Puedo posar para ti cuando me lo pidas... Puedo hacerlo después de clases. Claro, obviamente si quieres.

—Claro que quiero.

—Perfecto. Entonces... ¿Nos vamos a tu casa o a la mía?

—¿Te parece mi casa?

—Genial, me buscas en mi salón a penas toquen para irnos.

Luego de esa conversación, el más pequeño dejó un beso en la mejilla del más alto y se fue a su lugar.

Bueno, tal vez no mágicamente iba a enamorarse de él, pero por algo se empieza.