Alive. z.m.

Crazy.

Crazy.

Nicole. 

Miré a Niall intentando buscar el aire a través de la máscara de oxígeno, él palideció casi tanto como yo en esos momentos. Ambos habíamos sufrido las secuelas que existían una vez que Icaboth Ryan ha pasado por tu vida, las cuales no eran para nada agradables. Por un lado, quería encontrar a Icaboth para enfrentarme a él y sacarlo de mi vida de una vez por todas, pero, por otro lado, no quería tener que verlo enfrente de mí porque él era tóxico para mí. En realidad, era tóxico para cualquiera que estuviera cerca de él. La cabeza me daba vueltas debido a tanto pensar en esa mierda y eso me hacía sentir agotada. Sentía que a cada bocanada de aire que tomaba de la mascarilla todo era mucho más pesado, pero no se debía al aire, se debía a la pesadez de su mirada, porque la sentía. La sentía en algún punto y no podía decir con exactitud de dónde venía.

Traté de buscarlo con la mirada pero todo eran rostros y personas mirándome, yo estaba buscándolo a través de la gente pero parecía no querer aparecer. Busqué por todos lados con la mirada y podía imaginarme la expresión que Icaboth podía tener en esos momentos. Esa mirada fría y verde acompañada de esa mueca burlesca que siempre encontrabas en el rostro de Icaboth. Entonces, una mirada chocolate se posó delante de mí, unas manos cogieron mi cara con sus dos manos y me miraron con esos ojos tan grandes y hermosos como hipnotizantes y atrayentes. No había palabras entre Zayn y yo, sólo había una mirada de complicidad. Besó la punta de mi nariz antes de darme el abrazo que tanto necesitaba y yo no me había dado cuenta de que lo necesitase. Cerré los ojos sintiendo la extraña sensación de que todo estaba bien por una vez en mucho tiempo.

Niall me abrazó después de Zayn, su cuerpo estaba tenso y él estaba menos débil que yo pero sé que estaba buscando con la mirada cualquier tipo de indicio sobre Icaboth. ¿Por qué tenía que aparecer a joderme la vida? ¿Por qué tenía que aparecer para jodérsela a Niall otra vez? Niall se quedó conmigo porque Amber comenzó a llamar a Zayn a la desesperada al móvil. Estaba con ganas de meterme en casa y no salir jamás pero Niall tenía la teoría de que eso es lo que quería, que me aislase como la otra vez y volver a ser su blanco fácil. Muchas de mis amigas de Irlanda tenían esa loca idea de que Icaboth era mi debilidad pero no. Niall y yo sabíamos que yo tenía otra debilidad y que Icaboth sólo era una enfermedad que extirparme.

Nos mandaron a todos a casa así que llamé a Dan para que pasara a recogerme a casa que ya le explicaría lo que había sucedido. Él me dijo que le parecía bien, que hubiera ido en ese mismo momento pero estaba ocupado cuidando de su hermana pequeña Maddison que estaba con gripe. Por su voz supuse que se le estaba contagiando, así que decidí pedirle a mi padre que me llevase a casa de Dan para ayudarlo a cuidar a Maddison y cuidarle a él. Sí, era mi manera de distraerme de todo lo que había pasado en el día. Además, los sanitarios, bomberos, profesores y algunos alumnos - esos que son el tipo de persona que no saben una puñetera mierda pero van haciendo por la vida como que saben - que me distraiga ya que mi respiración se había normalizado.

Cuando entré en casa, mi padre estaba hablando por teléfono, nada más verme terminó esa llamada y me obligó a contarle porque él se había enterado por el canal de noticias. Mi padre sabe de sobra lo que yo había pasado por Icaboth, así que no vi el problema en contarle que había sido él, a mi padre le conté absolutamente todo lo que había sucedido en menos de dos horas. Me miraba con esa expresión de comprensión paternal.

—    ¿Quieres que me encargue de él? — Lo miré aterrorizada. Quería a Icaboth encarcelado no muerto. Entonces me di cuenta de lo estúpida que fui al no decir nada a las autoridades más cercanas pero... Es que Icaboth me infundada muchísimo más miedo del que quería reconocer. — Lo siento, cariño, era... E-era una broma, lo siento, pequeña. — No sabía por qué no me tranquilizaba nada que mi padre hubiera barajado esa posibilidad, aunque fuera en broma, porque entre broma y broma la verdad asoma.