Dos almas encontradas ( SasuHina)

Capítulo 20

Sasuke había estado toda la noche despierto cuidando de su esposa. Se levantó para poder ir a preparar el desayuno, quería al menos despejar su mente porque realmente se sentía mal. Hinata no le había dicho nada, pero y si realmente le había pasado algo malo. Puso la cafetera y el té favorito de Hinata en la tetera, preparó la mesa con todo lo que había para el desayuno y fue a despertar a la azabache.

Cuando estuvo en la habitación sentando en el filo de la cama, acarició con suavidad el rostro de Hinata, quitándole primero el pelo que se le había pegado a la cara al dormir.

-Vamos mi Hime – dijo cuando ella empezó a removerse un poco molesta en la cama-. Es hora de levantarse, ya ha amanecido un nuevo día – ella se dio la vuelta para que él dejase de acariciarla, así que se levantó caminando hacía la puerta-. Por favor Hinata, te pido al menos que salgas a desayunar.

Él no dijo nada más ya que le parecía inútil intentar animarla. Sasuke caminó de nuevo a la cocina y se encontró con Sakura sentada a la mesa y con Naruto sirviendo el té y el café en tazas. Se sentaron a esperar a Hinata. La pareja se dio cuenta de que algo le sucedía al azabache, porque sus ojos reflejaban aquello que quería gritar.

Se sorprendió cuando vio a su esposa traspasar la puerta de la cocina y sentarse a su lado frente a sus amigos, dedicándole a los tres una falsa sonrisa. Sasuke cogió su mano bajo la mesa y la apretó para poder captar su atención, ella posó sus ojos en los de su esposo mientras le dedicaba la misma sonrisa triste de antes.

-Hinata, ¿qué te paso ayer? – Preguntó Sakura realmente preocupada, ya que aquello también afectaba a su Sasuke-kun.- Desde que salimos del médico estuviste rara.

Hinata refugió la mirada en su esposo y le devolvió el apretón de mano que le había dado anteriormente.

-Me dijo que no estoy embarazada, al menos de verdad. La doctora dijo que como tenía muchos deseos de ser madre, mi cerebro me dio lo que quería – las lágrimas de la Uchiha volvían a caer por sus mejillas-.

Sasuke se había quedado en shock, no tenía palabras para responder a lo que estaba diciendo su esposa. Le dolía aquello, se había hecho tantas ilusiones de que iba a tener un pequeño bebe.

-Lo siento, Sasuke-kun – dijo Hinata con los ojos inundados en lágrimas-. Lo siento mucho.

Hinata se levantó para marcharse, pero antes de llegar a la puerta fue abrazada por el azabache. Los Uzumaki veían la escena, la cual era muy triste. Sakura veía que realmente Sasuke quería a Hinata, se preguntaba que le veía a Hinata que ella no tuviese, pero lo más importante era que su amigo, el cual consideraba una familia, estuviese bien.

-¿Puedo revisarte? – Preguntó Sakura tranquila haciendo que la pareja se separase.

-Pero, Sakura, no hay nada que revisar – dijo Hinata intentando aguantar sus lágrimas-.

-Hinata, no me lo creo. Hasta yo puedo sentir la concentración de chakra en tu vientre, eso no pasa en los embarazos psicológicos. Ven.

La Uchiha se acercó teniendo a su esposo detrás de ella. Al estar enfrente, de las manos de Sakura salió un chakra de color verde mientras la revisaba. Podía ver como Sasuke agarraba fuerte las manos de Hinata y podía sentir las manos de Naruto posadas en sus hombros mientras le pasaba un poco de chakra. Separó sus manos del abdomen de Hinata.

-La doctora se equivocó o la maquina estaba rota. Estás de dos meses aproximadamente y están muy sanos, tu decisión de tomar las píldoras prenatales en cuanto te enteraste fue la mejor decisión – dijo Sakura sonriéndoles y vio como a ambos se les ponía una sonrisa en el rostro-.