My Cute Chubby ♡Yoonmin♡

05🐱

Jimin esperaba ansioso en la sala, ya había llamado a su madre avisando que estaría en la biblioteca, aún no estaba preparado para decirle que saldría con personas de su edad, para ella su pequeño hijo era un tierno y tímido niño que prefería la comodidad de su hogar antes de salir de revoltoso.

Eran las dos cincuenta cuando el timbre de la puerta sonó, Jimin nervioso se levantó y caminó a la salida, le dio un último vistazo a su atuendo y con inseguridad abrió la puerta.

Min Yoongi era un chico de diecinueve años casi veinte que irradiaba belleza y sencillez, Jimin estaba consciente del efecto que tenía este en él, siempre lo observó de lejos, su blanca piel y cabello azabache eran tan llamativos como su renuente e insolente personalidad, era honesto y directo, hablaba sólo cuando era necesario y al hacerlo dejaba marca, uno de los chicos más inteligentes de último año, capaz de conseguir una beca en donde sea, ese mismo chico que ahora vestía un conjunto de pantalón negro con chaqueta de cuero, ese que lo miraba expectante con sus singulares ojos gatunos.

—Hola —susurró nervioso.

—Hola Jimin —sonrió—. ¿Estás listo?

Asintió y salió por completo de la casa, cerró con llave y se volvió hacia Yoongi quien lo observaba fijamente como si quisiera memorizar cada uno de sus movimientos.

—Bien, vamos —lo condujo al auto azul oscuro que descansaba frente a su jardín—. Tenemos que pasar antes a la biblioteca, necesito unos libros para mi trabajo final.

—Esta bien hyung.

Ambos subieron al cómodo auto el cual desprendía un delicioso olor a cuero y a colonia, el estómago de Jimin revoloteó.

—¿Qué música te gusta?

—Ammm ¿A mi?

Yoongi sonrió ladino. —Si, a ti, aunque me gustaría ver fantasmas no creo que tengan buen gusto musical.

—Pues me gusta todo—sonrió tímidamente—No soy afín a un género en específico, me gusta una canción por su ritmo o su letra, no etiqueto en género.

Yoongi lo observó fijamente por un momento para después mirar al camino y asentir.

Lo acabas de arruinar fenómeno

No Jimin, todo esta bien sólo estas siendo tú

—La música es la expresión del alma, en ella encontramos más que simples palabras o acordes, es un arte, pienso igual que tú, me enamoro de una canción que me pueda hacer sentir sin importar el género.

Jimin asintió y suspiró con tranquilidad, por un momento creyó que lo había arruinado todo

—Tiene razón hyung ¿Le gusta mucho la música? ¿Toca algún instrumento?

Yoongi se mordió el labio inferior evitando soltar una sonrisa, le agradaba la curiosidad del menor. —Amo la música, tocó el piano, violín y he compuesto algunas canciones, por eso soy el director del club de música.

—Oh es verdad, no lo recordaba, usted es genial hyung yo aunque deseara no podría tocar algo, soy muy torpe.

—La práctica hace al maestro Jimin, nadie nace sabiendo hacer las cosas, se trata de una lucha constante por aprender y mejorar, estoy seguro que si te lo propones serías un buen músico.

Jimin se perdió en la sonrisa amable y tranquila que le dio su mayor, en ese momento una creciente admiración se instauró en él, aunque no podía imaginarse siendo un músico por unos instantes las palabras de Yoongi cobraron en él una especie de motivación ¿De verdad podría hacerlo si se lo proponía?

No seas estúpido, claro que no podrías, resultarías siendo un fracaso como siempre

—Llegamos Jimin, vamos no tardaré mucho.

Ambos bajaron del auto, caminaron una cuadra hasta la biblioteca pública, era enorme y en ella podrías encontrar un sin fin de títulos, ese era el lugar favorito de ambos chicos aunque ellos no lo supieran

—¿Qué libro busca hyung?

Dijo Jimin después de ver como Yoongi estaba entretenido leyendo algunas contraportadas, para él era magnífico poder verlo en plena acción, era curioso, Min Yoongi era más fascinante de lo que se imaginó, cada que leía su ceño se fruncia ligeramente, en ocasiones lamía o mordía su labio inferior concentrado, sus dedos largos y delgados dignos de un pianista se paseaban por las hojas en una caricia delicada y tranquila.

—Estoy haciendo un proyecto final, me ayudará a entrar a una de las mejores universidades de Seúl pero me falta un marco teórico más extenso y variado

—¿Sobre que es su tema?

Suspiró. —Es algo difícil de explicar, pero si quieres ayudarme busca algún libro que hable sobre la construcción social contemporánea.

—Enseguida hyung—dijo animado poniéndose manos a la obra.

Yoongi lo observaba de lejos, su rostro apacible era similar al de los ángeles que eran pintados en los famosos cuadros que estarían fijos en un museo; su piel suave y brillante además de sus labios carnosos y sus ojos expresivos conformaban una obra de arte, era perfecto, como un diamante en bruto, listo para ser trabajado, Jimin poseía una belleza particular que ni él mismo sabía que tenía, su cuerpo era pequeño, de complexión media, regordete pero con movimientos dóciles y ligeros que lo hacían ver como si estuviera danzando. Suspiro "Si tan sólo supieras el gran tesoro que posees" se arrepintió después de pronunciar esas palabras en su mente, volviendo en sí tomó algunos de los libros que estuvo revisando y se dirigió a donde se encontraba Jimin

—¿Es bueno?—lo dijo refiriéndose al libro que el menor llevaba en las manos y el cual leía con interés

Jimin se sobresalto y casi tira el libro de no ser por las pálidas manos que se lo impidieron, se miraron directamente mientras sus manos se tocaban ligeramente ambas tratando de sostener el libro de 350 hojas.

—Lamento asustarte, no era mi intención

—No se preocupe hyung, yo estaba muy centrado

—¿Es un libro interesante? —pregunto aún sin moverse de su posición, estaban cerca, muy cerca a simples escasos centímetros

—Sí, ammm, habla sobre la educación general en el siglo XIX

—Suena interesante—dijo mientras se alejaba del pequeño ojos de cordero

Jimin bajo la mirada avergonzado. —¿Encontró lo que buscaba?

Yoongi lo observó fijamente mientras asentía. —Sí, vamos a la caja

Pero no se movieron, siguieron ahí observándose por un minuto que parecía una hora, Jimin no entendía por qué su hyung lo miraba como si estuviera esperando que algo pasará y Yoongi estaba confundido, totalmente perdido en la inocencia del chico

¿De verdad hacia lo correcto? ¿Valía la pena? ¿Saldrían heridos? Aquellas preguntas rondaban en su cabeza cuál roedor en busca de alimento, la angustia y el miedo se instauraron en él, Jimin era un buen chico no entendía como alguien pudiera hacerle daño ¿Él sería capaz de hacerlo? ¿Sería igual que los demás? No tenía las respuestas a sus dudas, lo único que sabía era que Park Jimin era sin dudar alguna un ser humano extraordinario, era realmente fuerte, lo suficiente como para aguantar la crueldad ajena sin perder ese brillo de inocencia en sus ojos, aquel singular brillo que podría llevarlo a la perdición sólo por confiar en las personas equivocadas.

Cuando Jimin sonrió haciendo desaparecer sus pequeños ojos marrones él suspiro con pesadez y un pequeño cosquilleo en su estómago.

—Vamos Jimin —sonrió

—Oh vamos hyung.

🌼