Este es otro poema de desamor,
aquí su servidora tiró la toalla...
Neruda se quedó demasiado corto con sus poesías de dolor.
Que despidan a Cupido de su trabajo,
Me quejo de él.
Me cansé de ser la única flechada
en este mundo donde San Valentín es un día de mercadotecnia
Y tener pareja es para evitar la soledad.
Las flechas marcan desgracias,
Tengo una colección de ellas
Atoradas en el pecho.
Voy a decirle a las flores que se revelen contra la humanidad,
Ellas estan para florecer,
No para ser obsequidas en nombre del amor.
Comprobé que marchita más rápido un amor jurado eterno que una sencilla flor.
Ya no creo en las palabras dulces de mortales,
Te dejas amar con dosis
de besos que contienen veneno adictivo y te va matando de la manera más bella.
Podré morir,
Incluso resucitar
Y las promesas que me susurraron
Jamás se cumplirán.
Es más fácil llegar a la luna
Y regresar
Que enamorarse
y luego tener que superar.
Entregar mucho y recibir tan poco.
Dejé de escuchar canciones románticas en la ducha,
Porque sus metáforas de significado carecen para un alma que sufre por desamor.
Ahora bebo para olvidar,
Cerrar mis sentidos a la realidad
Y de mis pensamientos poderte borrar.
Tengo reclutados mis sentimientos
Con amenaza de muerte,
Para evitar momentos de decepción.
Cada vez limpio mis ojos,
Dejo salir mares a gotas,
Es necesario para no morir por
Culpa de almas rotas.
Sigo creyendo en el amor, pero encontrarlo ya no es mi prioridad.
¡Aquí tiro la toalla!
-K
