Imagina muchos momentos de Bill contigo, muchas historias donde podrás soñar despierta y ¿porque no? Distraerte y poder relajarte un momento con éstas pequeñas fantasías.
Le doy las gracias a @marionnoir 💙 por crear la hermosa portada y la imagen d...
Antes de que termine la clase le digo a mis alumnos que pasen un buen fin de semana. Tomo mi portafolio y salgo rumbo a mi auto.
― ¡Profesor Skarsgård! ― grita una voz aguda.
Me detengo antes de entrar a mi auto.
― Hola ¿Qué pasa Taylor?
― Quería preguntarle si podría ayudarme a estudiar para un examen.
― Por supuesto, solo que ahora no puedo...
Noto como mira mis labios mientras hablo.
― Mmm ― duda un momento ― De acuerdo, esta bien.
― Bueno... que tengas un buen día Taylor. ― subo a mi auto sin volverla a mirar.
Rumbo a mi casa me imaginó todo lo que podría pasar hoy en la noche, quisiera no hacerlo pero no puedo darles la espalda a mis amigos. Entrar a la vida de casado me emociona pero será algo completamente drástico para mi.
Al fin el sol se mete y la bella luz de la luna comienza aparecer, estoy terminando de acomodar mi cabello para dar lugar a esa despedida de soltero. Mis amigos dicen que no iremos a ningún table-dance, solo algo relajado como un bar. Tomaremos un par de tragos mientras recordamos viejos momentos de soltero. Tomo las llaves de mi auto pero me llega un mensaje a mi móvil, diciendo que pase a recoger a uno de los chicos. Tomo mi chaqueta del sofá y salgo.
Estaciono mi auto en frente de la casa de Landon, apago la radio y bajo del coche. Doy un par de pasos llegando a la puerta de entrada, a continuación toco el timbre. No se escucha ningún ruido, supongo que tendré que marcharme si no sale. Vuelvo a tocar el timbre y al abrirse la puerta veo a Landon, sus ojos están bañados en sangre, y tiene ina sonrisa estúpida.
― Te apresúraste mucho a beber, ahora larguemónos. ― expreso arrogante.
Él se balancea a mi y lo atrapo para que no pueda caer.
― Amigo... hermano... ― su aliento provoca que me quemen los ojos. ― Tu despedida... ― hipea ― Es aquí... aquí están
todosss esperándote ― arrastra las palabras.
― ¿Qué? ― digo confundido.
De repente otro de los chicos, Daniel, sale por sorpresa detrás de la puerta con una cerveza en la mano obsequeandomela.
― ¡Feliz ultimo día de soltero! ― exclama alegre.
― Al parecer ya lo tenían planeado todo, y también empezaron la fiesta sin el anfitrión.
― Pero no te quedes allí afuera, adelante estás en tu despedida.
Camino abrazando a Landon para después pasarlo a dejar al sofá, y me alejo de inmediato cuando comienza a vomitar.
― ¡Ven! Te tenemos otra sorpresa, cónsideralo como tu pastel.
Yo entre sonrío rogando que no sea una estupidez.
Y literalmente hay un pastel enorme en frente de mi, yo me mantengo sentado en una de las sillas inmóvil, esperando, hasta que las luces se apagan y solo alumbra un reflector hacia el pastel. Comienza a sonar una música erótica, nunca me lo hubiera imaginado, tal vez si esperaba salir de ese pastel a una chica hermosa con unas curvas despampanantes. Y así fue, solo que no esperaba que esa chica fuera mi alumna. La amiga de Taylor, esa chica con la que establecí una conversación en la biblioteca. Me doy cuenta que no solo es hermosa con su intelecto, su físico me ha dejado sin aliento.
Al fin ella se da cuenta de quién soy, y era de esperarse, está atónita, ruborizada y por sus ojos cristalinos me doy cuenta que está a punto de comenzarle a caer lágrimas en sus ojos.
Yo me pongo de pie y por instinto me quito mi chamarra para correr a cubrirla y así no exponga su cuerpo desnudo. La abrazo y salimos de la casa para entrar a mi auto. Siento como si solo estuviéramos ella y yo, ignorando a todo nuestro alrededor. Escucho algunas voces de mis amigos ebrios pero estoy tan concentrado en protegerla a ella.
Al ver que ella entra al auto cierro la puerta del copiloto, apresurandome a subir al lugar del volante. Arranco el carro sin saber exactamente a dónde ir.
― Yo no sabía que...
― No tienes por qué explicar nada. ― la interrumpo. ― Tranquila, respeto la vida de las personas.
― Es que no quiero que piense mal de mi...
― Oye ― la miro al frenar en un semáforo. ― No te juzgo, y no se lo diré a nadie. ― la miro compásivamente.
― Gracias.
Ella abraza sus hombros percatándome que tiene frío. Enciendo el aire acondicionado y mira por la ventanilla.
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Narras tú.
Necesito aclarar mis ideas y calmar el incomodo recuerdo de ese momento en la despedida de soltero de mi profesor. <<Que barbaridad>>
La radio se escucha y no quiero mirar los ojos del profesor Istvan, no sé que estará pensando de mi. Puede que me consideré la más puta del salón, o talvez no.
Así es, aun éste no es el final. Aún hay una cuarta parte, y disculpen si me he tardado demasiado en escribir pero tuve algunos imprevistos, ¿Cómo están? ☺ Espero que bien. No se olviden votar 🤗 y dejarme un comentario. 💚
