Los árboles delineaban el camino con sus hojas secas que caían con el mecer del viento, el otoño había llegado y la temperatura comenzaba a bajar haciendo tiritar al bosque. El trote del caballo perturbada la paz del ambiente alzando polvo a cada paso, pero no era el único sonido ahí, los gritos de Tetsuya hacían eco a lo lejos.
– ya bajame! - decía molesto - hemos cabalgado por mucho, cuanto más piensas avanzar –
La velocidad del caballo fue disminuyendo y solo el gran "Oh!" que exclamó Kagami lo detuvo por completo.
– a donde me has traído –
Kagami sonrio y bajo del animal, se estiró un poco y ofreció ayuda a su soberano para descender.
– yo puedo sólo! no soy una princesa en apuros – dijo indignado por aquel acto.
Pero el animal era muy grande y sus piernas no alcanzaban el suelo, su transporte siempre implicó una carreta arrastrada por caballos pero nunca se subió a uno, así que le era bastante difícil. El contrario sólo miraba mientras detenía al animal para que evitar que se moviera mientras Tetsuya intentaba bajar.
– permítame ayudarlo –
– dije no! –
Ignoro la orden e ignoro el berrinche, , se acerco depacio y con cuidado tomo la cintura del más bajo dejándolo de pie sobre el suelo.
– espero no haberlo ofendido, pero el caballo comenzaba a inquietarse – mintió.
Mientras a tetsuya lo invadia la rabia, él ato al caballo en un tronco grueso para que no escapara. - su alteza perdonara el atrevimeinto, no volvera a pasar -
Tetsuya estaba molesto y no pretendía ocultarlo, el peor castigo que detenía el pulso de Kagami era aquella mirada fría como el hielo que le congelaba el pecho.
- Que pretendias al traerme a este sitio - hablo molesto - quieres que nos corten la cabeza? Ó acaso piensas secuestrarme -
Pero no respondió, no podía, la tristeza en su corazón se hacía presente y así no podía hablar.
- habla ya, es una orden - insistió, pero nada - si vas a desobedecer es mejor que me devuelvas al Palacio, debo ocuparme de mis obligaciones y así sólo me causas problemas -
Se dispuso a caminar de vuelta al Palacio, aún si debía hacerlo a pie, pues no podía tardar más por los ojos que estaban pendientes de sus actos a cada paso, pero la mano envuelta el su muñeca le impidió avanzar más.
- Que es lo que quieres! Deja ese comportamiento ahora o...-
No pudo seguir hablando, sus labios estaban ocupados por los de Kagami pero de inmediato fue forzado a corresponder aquel acto impuro, su mente decía no pero su corazón inundaba sus sentidos. Las manos de Kagami aprisionaron su delicada cintura acariciandola insaciablemente.
- mmhhg...ah...-
Los besos fueron bajando hacia el espacio en su cuello hasta la parte, que con mucho esfuerzo, ahora descubierta del hombro. Su piel de perfecta porcelana exitaba a Kagami, ninguna mujer podría igual tal belleza.
- no...dentente... - repetía pero Kagami no dejaba en paz su ropa, dejando besos por cada parte que lograba descubrir.
- basta...ya basta -
La excitación cego su razón tirando con brusquedad la ropa que cubría tan exquisita piel, algunos broches saltaron y parte se la tela quedó desgarrada.
- dije que basta!!! -
El golpe en su mejilla lo ayudo a despertar, los ojos que tanto amaba se encontraban cristalizados y las manos le temblaban. No sabía lo que estaba haciendo, el deseo de poseer a la persona amada era inevitable pero esta vez se habia sobrepasado y le había hecho daño en el proceso de demostrar esos sentimientos que día a día mo mataban desde que se conocieron.
ESTÁS LEYENDO
MI MALDICIÓN
FanfictionLa diosa Luna le concedió el poder espiritual más grande de este mundo y para mantener vivo su linaje deberá de ceder ante su único hermano para traer al mundo un un heredero, que además será de sangre pura, también dirigirá el reino de Kert. Pero s...