Subo mi mirada para contemplar las estrellas, es tan emocionante ver como una a una adornan el cielo oscuro haciéndolo lucir mucho más interesante, más agradable.
Hace días he estado escribiendo poemas a mi idóneo dispuesta a encontrarlo en cualquier momento y decirle lo mucho que he anhelado verlo desde mis once años, sí, sé que no es normal que una chica de esa edad comience a pensar en quién será esa persona con la que compartirá el resto de su vida, pero realmente no soy como todas las adolescente que anda por ahí, yo soy un poco más inquieta por decirlo así, desde que conozco el uso de la razón no puedo parar de soñar, de ir por la vida pensando en que todo lo que Dios nos ha regalo es hermoso, no puedo dejar de pensar que completaré mi felicidad con la persona perfecta para mí, y digo la palabra perfecta porque aunque no exista nada perfecto, él sí lo será, será alguien que me soporte en mis buenos y malos momentos, en mis alegrías y tristezas, en mis desbordes de emociones positivas, y en mis caos temporales de malos sentimientos.
Y miré tu rostro, piel canela o piel blanca, ojos negros o azules, no sé cómo serás, pero el amor nos envolverá en una sensación refrescante y ligera. Te diré que te estuve esperando, entonces tú solo sonreirás, lo harás con aquella sonrisa genuina y apacible, de esa que solo salen cuando es un chico lleno de la gracia de Dios.
Dejo el lápiz a un lado del cuaderno, esta fue una especie de idea desordenada que se me vino a la cabeza, estar con la suave brisa de las ocho de la noche sobre mi ventana con mis piernas enrolladas en la segunda planta donde quedaba mi cuarto, me había hecho efecto.Era hora de despegarme un poco de mis fantasías y volver a la realidad, esa que tampoco es tan mala, porque a pesar que todavía no tengo a mi persona soñada al lado, mi vida era buena en muchas ocasiones. Solo tener a Dios en mi corazón, era llevar una carga mucho más ligera.
Dejo caer mi cuaderno sobre mi cama y me inclino para hablar con mi padre.
—Gracias señor por este día, por tus bendiciones, hoy te quería pedir por mí en especial, sé que he sido un poco egoísta muchas veces, pero tú sabes que no me puedo controlar cuando se trata del chico que quiero que me presentes, ya sabes, mi futuro esposo, entiendo, —me digo reprochándome a mí misma por mi insistencia tan descarada — que yo no puedo estarte pidiendo a cada momento por mi idóneo, sé que soy una adolescente de 15 años apenas, pero mi tía Perla se casó a los 18 años y es feliz, yo ya voy a cumplir 16 años, no me hagas esperar mucho por favor —suspiro un poco y cierro mis ojos con fuerzas intentado que todo lo que le pedí, sea muy pronto realidad.
Estoy emocionada de volver a iniciar con esta historia, sé que los dejé a medias, pero espero que todo valga la pena 😁 seguiré editando hasta donde pueda hoy, les prometí que está historia la iba a terminar, y así será, verán su final muy pronto 😌 mientras tanto sigan disfrutando los cambios que se han hecho 🥰
Dios me los cuide y proteja siempre.💞
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Querido Idóneo [Borrador] (Completa)
SpiritualAbigail era una chica muy cristiana, a pesar de sus 15 años, era muy madura en los caminos del señor, todas las noches al momento de acostarse le pedía a Dios que mandara a su idóneo, ese hombre que con solo verlo reflejará el amor que provenía de l...