Cuando abrí los ojos observe todo a mi alrededor, pero ninguna de las cosas que se encontraban ahí me daban pistas de donde estaba.
Mis ojos pararon en una pila enorme de cuadernos y libros tanto de preparatoria como de universidad. Eso me hizo sentir una sensación de familiaridad.
- ¿ya estas mejor? - el chico alto entro por la puerta
- Namjoon, ¿qué hago aquí? - intente levantarme pero me dolía todo el cuerpo - auch
- recuéstate - dejo una bandeja con dos tasas de té y dos trozos de pastel - ¿no recuerdas lo que sucedió?
- mmm - entonces comencé a recordar - me desmaye al verte
- ¿qué te paso Ginebra? Estas toda llena de morados por la cara, gracias al cielo salí a correr, sino te hubiese encontrado no quiero imaginar que pasaría
- intentaron secuestrarme - menti un poco, la verdad es que querían matarme, estúpido Maik
- debes de poner una denuncia - tomo una tasa y me la paso
- no, solo.. Tratare de no salir estos días, seguro que todo ira bien después, en todo caso, ¿por qué no fuiste a la escuela?
- algunas veces me doy un descanso, soy muy avanzado para mi clase, no esta mal que yo me de un respiro
- ya veo - él siempre se toma las cosas en calma - iré a casa
- primero acaba con ese pastel - sonrió - y después te llevo
- si - ni siquiera recuerdo de donde lo conocí, pero se que es de confiar - oye Namjoon, ¿de donde nos conocemos?
- pues.. Del preescolar, no tenias buenas calificaciones entonces tu madre te obligo a venir a que te enseñara algunas cosas, tu mamá era una mujer muy bella, oh, perdón
- no pasa nada, ahora recuerdo algunas cosas, el día que mamá y papá murieron yo estaba justo aquí, pero todo era diferente a ahora
- después de eso no volviste a venir aquí por siete años, bueno, si no hubiese pasado lo de hoy seguro se abrían cumplido más años
- seguro que si - sonreí al fin - me alegra que me hayas rescatado, vendré más seguido
- eso ayudaría bastante, mamá se fue de aquí y mi padre también, no me sentiría tan sólo con tu presencia, sabes, siempre me a alegrado volver de la escuela contigo
- eh - mis mejillas se volvieron rojas y como estaba hinchada parecía un tomate - ¿qué tipo de secreto fue ese?
- uno que guarde por años en mi corazón, pero no te asustes, algunas veces la literatura me afecta y digo este tipo de cosas
- ya veo...
Seguimos conversando por un buen momento y después me llevo a casa cargando, me confeso que había llamado a un doctor el cual dijo que no debía moverme mucho.

ESTÁS LEYENDO
ᶜᵒʳᵃᶻᵒ́ᶰ ᵈᵘʳᵒ ⁻ ᴹᶤᶰ ᵞᵒᵒᶰᵍᶤ
FanfictionEl nunca podría amarme, me lo recalco tantas veces que termine por acostumbrarme. •HISTORIA 100% MIA •NO PERMITIDO SU COPIA NI ADAPTACIÓN SIN PREVIÓ AVISO •Si no te gusto has el favor de no dejar ningún comentario ofensivo •Capitulos cortos como...