Después de Ella | TERMINADA

Capítulo 6 - Confidencialidad (NURIA y HUGO).

Capítulo 6 – Confidencialidad.

Hablaba con ella casi a diario, de cosas sin importancia, como el tiempo, lo que habíamos hecho ese día, nuestros planes, y cosas sin importancia. Aunque, estaba claro que ella no tenía ni idea sobre mi parte de don Juan, no le contaba nada sobre las mujeres que me llevaba a la cama. No quería asustarla y que pensase que era demasiado materialista.

Me la pasaba hablando con ella, ya fuese en el trabajo, cuando quedaba con mis amigos y en casa, y eso comenzaba a ser algo sospechoso en mí. Yo nunca me tomaba tantas confianzas con ninguna mujer, no como con ella.

Como aquella tarde, en la que estaba con mis amigos tomando un café en el Starbucks del centro, y por supuesto estaba hablando con ella por WhatsApp sobre las vacaciones de navidad.

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Hugo.

¿Qué vas a hacer estas navidades?

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- ¿por qué estás tan distraído últimamente? – preguntaba Julio, cogiéndome el móvil en el momento justo en que ella respondía, pasándoselo a Rodrigo.

- ¿Quién es Nuria? – inquirió este, al observar la pantalla, mientras yo intentaba llegar a él para coger el móvil, pero Julio me flanqueaba el paso – "creo que las pasaremos juntos. Es nuestra primera navidad. ¿qué debería regalarte?" – leía, en voz fingida, como imitando la de una mujer.

- ¿Nuria? – preguntó Julio, dejando de molestarme en ese justo instante – es su nueva hermana. – explicó, para luego quitarle el móvil a Rodrigo y volver a pasármelo – sólo era una broma.

Puse cara de malas pulgas, volviendo a sentarme en mi taburete, antes de guardarme el móvil en el bolsillo del pantalón, cabreado.

Narrado por Nuria.

Discutía con Jessy sobre la fiesta que organizaban en la cena Ego el día 24 de diciembre, pues ella se moría de ganas por estar allí, pero yo no quería ir. Era de esas personas que solía opinar que ese día era para pasarlo en familia y no por ahí con un grupo de desconocidos.

- ¿con quién hablas ahora? – preguntó, asqueada, cuando le envié otro mensaje a Hugo – te estoy hablando y ni siquiera me prestas atención.

- Ya te he dicho que no me apetece – espeté, cansada de tener que repetir lo mismo una y otra vez.

- Vamos – me animaba, cogiéndome de la mano, obligándome a mirarla – tienes que pasar página de una vez, dejar atrás a Mario y esa relación tóxica que teníais.

Me molesté tan pronto como la escuché nombrar a mi ex novio. No quería hablar de ello, no después de todo lo que estar con aquel drogadicto me había causado.

- Podemos, simplemente ¿no hablar de él?

- ¿y con el señor polvos cómo te va? – preguntó, haciendo que estallase en carcajadas. Me encantaba el mote tan divertido que le había puesto a Hugo, al saber que era mi hermano. Según ella, opinaba que sólo estaba actuando así de simpático y atento conmigo, porque tenía intenciones sexuales conmigo - ¿ha puesto ya sus cartas sobre la mesa, o sigue dándole vueltas a la perdiz?

- Sigue siendo un encanto – respondí, haciendo que ella soltase un suspiro más que prolongado – no creo que sea tan malo como lo pintas.

- Me lo tiré el año pasado, Nur – se quejó – y no ha devuelto ni uno de mis mensajes posteriores. Estaba claro que sólo fue amable conmigo porque quería follar, y una vez que lo consigue te manda a hacer puñetas.

Puse los ojos en blanco, cansada de aquella conversación, de que mi amiga intentase a cada momento de ponerme en contra de mi hermanastro y proseguí doblando la ropa que acababa de coger del tendedero portátil, ignorando las palabras de Jess.