Le rodeó la cintura con su mano mientras lo miraba provocar ruidos en la mesa con sus delgados dedos.
- ¿Estas nervioso?
- No... Sólo... aburrido.
Wonho le sonrió y le apartó el cabello de la frente con caricias.
- ¿Que te apetece hacer por mientras llega?
Hyungwon se quedó pensativo un momento y luego sonrió.
- ¿Qué te parece hablar de la boda? Bueno, de ciertos detalles...
Wonho se acomodó mejor en su asiento para prestar más atención a su prometido.
- ¿Qué detalles?
Hyungwon le sonrió pervertido.
- Sobre la luna de miel... Es decir, me gustaría que fuera algo espectacular, deberíamos planearla también...
Wonho se rió.
- Pensé que hablarías del color de los manteles o de las opciones de comida, pero la luna de miel es un gran punto también...
- ¿Y bien? Dime que te gustaría para ese momento y luego yo te digo lo que me gustaría...
Wonho se quedó pensativo mirando hacia algún punto de la cafetería en la que se encontraban.
- Pues me gustaría qu-
- ¡Hoseok!
Hyungwon volteó rápidamente hacia el lugar de donde provenía la voz femenina que mencionaba el nombre de su prometido y Wonho imitó su acción.
Una delgada pero bien dotada mujer con cabello castaño se acercó a ellos sonriente.
Ambos se pusieron de pie y la sangre de Hyungwon parecía congelarse mililitro a mililitro.
Sentía su cara arder de celos y en su pecho se formó algo mayor a una molestia al ver como la mujer llegaba tranquilamente a abrazar a Wonho con tal naturalidad.
Y la peor parte es que a Wonho parecía no importarle en lo absoluto que su presencia no fuera notada.
Carraspeó su garganta y rápidamente se dirigió a los baños, pues deseaba evitar a toda costa la mínima interacción que tendría con la hermosa pero odiosa mujer.
Cerró la puerta con molestia y se dispuso a lavarse la cara, pues quería relajar un poco su semblante y el ardor que le consumía el rostro.
Apoyó sus manos en la encimera y se quedó viendo el espejo fijamente por varios segundos.
¿Por qué estaba actuando de esa manera?
Ruby le había dicho que Wonho confiaba en él, quería poder confiar en Wonho también, pero sus celos hacían todo más difícil.
Suspiró cansado de la situación y se dedicó a secar su cara con una toalla de papel.
En ese momento su celular comenzó a vibrar y al ver la pantalla resopló con molestia y contestó.
- Que malditamente oportuno eres...
- Oye... calma, no es necesario el sarcasmo y tienes que saber que sea lo que sea que te está pasando no es mi culpa...
Suspiró sabiendo que Otto tenía razón, pero eso no quitaba que era molesto.
- Ya habla de una vez...
- Pues mira, primero que nada disculpa por llamar un sábado en la noche, sé que el fin de semana es tu único tiempo de relajación... Pero estaba en casa revisando un par de cosas de mi carpeta y me di cuenta que en nuestra rúbrica tenemos el proyecto #4 para presentar el lunes... Y ya que tu haces la primera parte, quería saber si ya estaba preparada para hacer lo que me toca...
Hyungwon se quedó helado, no tenía ni idea de ese trabajo.
- Dios... lo siento, no he revisado la carpeta en unos días y justo ahora no estoy en casa, pero si gustas puedo completar mi parte ésta noche... así tu tengas tiempo para trabajar mañana... yo, lo siento de verdad...
- Hey... calma... Si estás ocupado no te preocupes, ya hago el trabajo completo yo y lo pongo a nombre de los dos ¿Te parece? Espero que así puedas perdonarme por tocarte el trasero el otro día...
Hyungwon se quedó en silencio pensativo, pero luego decidió que no era lo correcto.
- No... No te preocupes, yo me quedaré despierto hasta que termin-
- No Hyungwonnie... No voy a permitirlo, lp haré yo y eso es todo... disfruta tu fin de semana hermoso y vigila al imbécil de tu novio.
- Prometido...
- Como sea, él no me cae bien...
Hyungwon iba a responder pero el hombre cortó la llamada antes que pudiera hacerlo.
¿Le había dicho Hyungwonnie?
De cualquier forma no se sentía molesto, al menos Otto si lo comprendía.
Suspiró nuevamente y se arregló el cabello para finalmente salir del cuarto de baño hacia la mesa de la cafetería donde Wonho y la joven mujer parecían hablar animadamente.
Llegó en silencio y se sentó sin decir nada, por un momento se sintió que estaba pintado, pero Wonho rápidamente lo rodeó por la cintura como estaba antes que la mujer llegara.
- ¿Todo bien cariño?
Él asintió intentando no mostrar la molestia que le causaba tener a la mujer enfrente viéndolo tan alegre.
- Si... Sólo que recibí una llamada, era sobre un proyecto que tengo que hacer para la Universidad pero ya está resuelto...
- Esta bien... Ahora los voy a presentar oficialmente...
Wonho le señaló a la mujer con una sonrisa.
- Ella es Naty... bueno, Natalia para ser más exactos... Y Naty, él es Hyungwon.
La mujer le tendió la mano y él la tomó con amargura.
¿De verdad? ¿Así de sencillo?
A ella le llamaba "Naty" en vez de Natalia y a él un simple "Hyungwon" ni siquiera le había dicho si eran amigos, vecinos, compadres o que.
Sus manos se estrecharon y la alegre mujer le interrumpió los pensamientos.
- Hoseok ¿Por qué tu esposo es tan tierno? Parece un bebé, es tan lindo...
Hyungwon la miró confuso y luego miró a Wonho intentando obtener una explicación.
¿Esposo? ¿Lindo? ¿De qué iba eso?
Wonho lo miró y le acarició la barbilla.
- ¿A que si? Mira que tierno es... quiero comermelo a besos todo el tiempo... bueno, aún no es mi esposo pero yo ya siento que lo es...
- Es que es tan bonito...
La mujer se acercó y le tocó una mejilla con ternura y él no supo como reaccionar.
Pasó del enojo a la vergüenza en fracción de segundos.
¿Por qué hablaban de él como si fuera un bebé?
¿Cómo sabía eso la tipa?
¿Wonho ya había hablado sobre él con ella?
¿Lo había presentado como su esposo?
Agachó la cabeza sonriendo tímido y embobado, se sentía un idiota por dudar de Wonho, pero amaba que se enorgulleciera de él sin importar su pasado, Wonho siempre recalcaba las cosas buenas que él tenía.
Miró de nuevo hacia donde ellos y encontró que su charla se había centrado en el tema por el que estaban allí.
Tocaron varios puntos claves y él se limitó a permanecer en silencio la mayoría del tiempo, hablando únicamente cuando era necesario.
Pero de vez en cuando aparecía esa espinita de celos en su pecho al notar que Wonho parecía estar muy sonriente con ella.
¿Podría acostumbrarse algún dia a compartir la atención de su casi esposo?
