Cap XXV: ¡¡Hijo de Howard!!

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Todo listo; peinado, vestido, zapatos, maquillaje. Un plan.

Sí, todo listo para ejecutar la parte dos del plan que hice con Steve- la cual sólo Nat conocía- y sí mis matemáticas no fallaba, ellos llegaron hace diez minutos.

El casino está arrebentar de personas. Todos estaban enbobados jugando. Uno que otro viejo rabo verde no quitaba su mirada de mí, de mis pechos para ser exacta.

Tome una copa. Hay una sección VIP, supongo que allí sólo entran las personas con las que Ricardo hace sus tratos y posibles clientes. Hay un hombre detrás de una cinta color morada. Parece ser duro de convencer, una roca, la versión masculina de Tronchatoro.

Adentro esta Stark, como dije, le fue fácil llamar su atención. Eso quiere decir que Steve, Clint y Nat están cerca o posible alguno haya podido entrar con Tony.

Hay un piano en ese zona, necesito un pianista y ¡Bingo! Todo irá perfecto.

-caballeros,- me acerco a un grupo de hombres- ¿Alguno de ustedes sabe tocar el piano?

Como es de esperarse, me miran de pies a cabeza con perversión disimulada. Hombres.

Un hombre de no más de cuarenta se aclara la garganta.

-no es por presumir, pero soy el mejor pianista que hay en New York- sonríe arrogante.

No parece ser la primera vez que éste hombre dice eso, ya que los otros ruedan los ojos, al parecer cansados de la misma historia.

-excelente. Venga conmigo- le entregó mi copa al sujeto que tengo a mi lado.

Sin titubeos me sigue. Me ofrece su brazo. Lo guió hasta la entrada de la zona VIP, el orangután se hace a un lado y abre la cadena para abrirnos paso. Saluda a mi acompañante con un asentimiento de cabeza.

Hice una buena elección.

-¿Alguna vez escucho la canción Back To Black?

Lo piensa por unos segundos. Acabo de ver a Clint subiendo a la segunda planta y a Nat caminando cerca de la baranda. Van por la información. Tony intenta hacer que Ricardo y los otros se queden sentados, están en la planta de arriba, sentados en un sofá en forma de semicirculo con vista hacia el piano.

¿Alguien llamó a Wonder Woman?

Se solicitan mis servicios.

-creo sabermela- responde-. ¿Por qué la pregunta?

-me dio por cantar, ¿Podrías tocar esa canción para mi?- juego con su corbata. Lo siguiente que digo trato de sonar lo más coqueta que puedo-. Prometo recompensar después.

《¡ASCO!》grita mi mente.

Sonríe travieso. Me voy arrepentir de esto, aún no hago nada y ya me siento sucia. Ay, Dianne, en lo que te metes.

El hombre de nombre que aún no sé, se pone cómodo en el banco del piano. Rezo porque el micrófono este encendido, sino voy a parecer idiota aquí parada cantando sin que nadie me oiga.

Comenzó a tocar la melodía, cuando es el momento empiezo a cantar. Todos miran confundidos hacia la mujer que está cantando. Jamás había cantado en público, sólo en el baño o en el auto.

Ricardo se inclina para adelante. Sonríe un poco al ver que Tony se quedó con la copa a medio camino y miraba asombrado hacia mi, con cara de ¿Será o no será?

Los otros hombres con los que está Ricardo igual miran hacia acá. Le dice algo a un orangután el cual mira en mi dirección y asiente.

Éxito.

Tal Para Cual || Legends #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora