¿Qué serías capaz de hacer para librarte de ir a un reformatorio para menores o a un orfanato después de robar en una tienda de ropa? Diana Hernández decide librarse siendo la cómplice de uno de los policías que la detienen, y ayudarle con un tema q...
- ¿Por qué llegas tan tarde? ¡Son las casi las 9 de la noche! - dijo mi abuela
Genial, primero me echa de casa y ahora me riñe porque no he vuelto antes.
- ¿Qué hay de cenar? - pregunté yo esquivando su pregunta.
- Esto.
Me señaló un plato con una salchicha de esas malas del super con un cacho de pan al lado.
- Muy bien, gracias. Si no te importa, me voy a cenar a mi cuarto.
- Sabes que no me importa un carajo.
Ay mi yaya, siempre tan amable.
Subí las escaleras con el plato en la mano. Lo dejé encima de mi escritorio y me tiré en la cama.
- ¡Aaaaaaaaaaaah! ¡Odio mi vida!
Después de gritar, me sentí mejor, así que cogí la salchicha con pan y comí.
Cuando terminé y fui a bajar el plato a la cocina, mi abuela ya estaba durmiendo.
Miré si hacían algo interesante en la tele. Había una serie de esas del FBI, de crímenes y tal. Me quedé mirándola, y me quedé dormida allí, en el sofá. Suerte que el televisor estaba programado para que se apagara en media hora, si no, mi abuela me hubiera matado al día siguiente.
***
Me despertaron unos gritos:
- ¡Niña! ¡Espabila si no quieres llegar tarde!
Ya no me cambié de ropa, simplemente me peiné y todo el royo. Cogí una galleta y me fui al instituto con la mochila en la espalda.
***
En la primera materia, la profesora nos presentó a una alumna nueva.
- Chicos, esta es Liliana Thorne, espero que la respeteis y la ayudeis a sentirse incluida. Liliana, por favor, siéntate... al lado de la chica que está al final.
- De acuerdo, gracias.
Vino hacia mí con una sonrisa.
- Hola. Soy Lili. ¿Y tú? - me empecé a poner nerviosa. La gente normalmente no me hablaba si no era para insultarme o amenazarme.
- M-me llamo Diana...
- ¡Encantada!
Ella era una chica peliroja con el cabello ondulado y una linda sonrisa. Era guapa, seguramente en seguida se iría con los populares.
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Se veía alegre, me pareció maja, pero aun era muy temprano para decirlo.
