El ángel de las plumas doradas (Cazadores de Sombras)

Capitulo 11

Magnus

Subimos a la habitación de Martina para hacer la pijamada.

—Yo digo que deberíamos hacer algo— dijo Izzy
—Algo como qué?— le dije
—Podríamos salir a divertirnos, podríamos irrumpir en las demás habitaciones, no se solo digo
—Me parece buena idea, ya que me perdí de la diversión del verdad o reto, me merezco diversión—Le dije
—Salgamos al pandemónium—Dijo Martina
—Me parece bien— dijo Clary— pero no les digamos nada, querrán ir
—Mintiéndole a mi padre? Wow que cosas me enseñas— dijo Martina divertida
—Yo las maquillaré— les dije
—Nos iremos a cambiar y volveremos aquí— dijo Lara

Salimos de la habitación y entramos a las nuestras con mucho cuidado para no despertar a nadie, me puse unos pantalones azules brillantes, una remera verde con lentejuelas y una campera con brillo
Al salir me cruzo con Izzy y con Clary. Izzy llevaba un vestido rojo con un escote en V, unas botas altas color negro y una chaqueta negra. Clary llevaba un vestido verde esmeralda que resaltaba sus ojos, unos zapatos no tan altos blancos y una chaqueta negra
—Me gustan sos vestidos niñas— les dije
—Gracias— me dijeron las dos

Entramos a la habitación y vimos a Lara con un vestido negro corto y unos zapatos negros altos también, luego la vimos a Martina tenía puesto un vestido azul con abertura en la pierna, unos zapatos azules muy altos y su hermoso collar con la letra M
—Nada menos de 15 cm?— le dije señalando sus zapatos, ella me miro y sonrió
—No jamás— dijo sin borrar su sonrisa
—Bueno a quién maquilló primero?— pregunté
—A mi— dijo Izzy
Las maquillé a todas y salimos sin hacer ruido, Clary tenía razón si ellos se despertaban querrían ir con nosotras y eso le quitaría toda la diversión. Cuando salimos del instituto Izzy dijo
—Una noche libre de novios— le dijimos que bajara la vos y nos fuimos

Simon

Vi salir a Izzy de nuestra habitación bien vestida así que salí y la vi a ella, a Clary y a Magnus, estaban vestidos muy bien, supuse que saldrían y sin nosotros. Cuando entraron a la habitación de Martina, salí y entré a la habitación de Jace, el estaba despierto
—Supongo que vienes porque viste lo mismo que yo, verdad?— dijo él
—Si, ellas van a salir sin nosotros— dije
—Vamos a despertar a los demás
Salimos y fuimos a despertar a Alec, a Bruno y a Nícolas. Todos nos cambiamos y las seguimos, al salir oímos a Izzy hablar
—Una noche libre de novios

Las seguimos hasta el Pandemónium, entramos y luego las perdimos. Sentí unas manos en mis hombros y luego escuché una voz
—Con que nos están siguiendo

Martina

Salimos del instituto y mientras caminábamos sentí que nos espiaban.
—Me parecen que nos están siguiendo, pero no se alarmen— les dije
—Qué? Acaso sabes quiénes son?— dijo Izzy
—Oh claro que lo sé— les dije— nos están siguiendo desde que salimos del instituto
—Malditos– dijo Clary— no nos dejan una noche en paz
—Sigamos caminando, a ver hasta donde llegan– les dije riendo y seguimos caminando hasta al pandemónium, entramos y ellos también lo hicieron, nos perdimos en la multitud y luego nos pusimos detrás de ellos
—Con que nos están siguiendo— dijo Izzy
Ellos se dieron vuelta y nos miraron
—Con que ustedes salen sin avisarnos, acaso no querían que viniéramos con ustedes?— dijo Jace
—Esa era la idea— le dije— venir solas
—Auch, eso dolió— dijo Bruno
—Ay cállate Carstairs— le dije, estaba furiosa, un día que podíamos salir solas ellos tenían que entrometerse
—Veo que estás enojada— dijo Simón
—Si muchísimo, si no les dijimos nada fue porque queríamos salir solas, eso quiere decir sin ustedes— les dije
—Bueno, lo siento, no sabíamos que les molestaría—Dijo Alec
—Tranquilo garbancito, a mi no me molesta— dijo Magnus— ven vamos a tomar algo— y se llevó a Alec al bar
—Magnus perdono a Alec— dijo Nícolas
—Lara que no se te ocurra— le dije, pero ella ya se había ido con Nick
—Lo siento Mart— me dijo
—Iz, tú no...— empezó Clary, pero ella ya se había ido con Simon
—Solo faltan ustedes dos— dijeron Jace y Bruno
—Ah no eso ni lo piensen— les dijimos
—Clary vamos— le dijo Jace
—No, ya la escuchaste— le dijo, en eso los rodeamos y nos fuimos a la pista
Bailamos bastante tiempo hasta que escuché un grito.
—Mamá algo está pasando— le dije
—A qué te refieres?— me dijo preocupada
—Hay que avisarles— le dije y corrimos hacia dónde estaban los demás
—Veo que no podían resistirse más— dijo Jace
—Cállate idiota y escucha— les expliqué lo que escuché y salimos, por suerte las convencí de traer armas.
Estaba preparada para sacar mis espadas, en eso vi a alguien que reconocí, no lo dudé y corrí a sus brazos, él me sujeto y me hizo girar, al darme vuelta vi a Clary, ella estaba a punto de romper en llanto, pero sacó su cuchillo y habló
—Aléjate de ella ahora— le dijo— cómo estás aquí?
—Mamá tranquila, el es bueno— le dije, ella como todos los demás me miro confundida
—Él no es bueno Martina— dijo Jace— intentó matarnos
—El cambio, cambió por mi— les dije— el ya no es como era antes, lo juro por el ángel
—No puedes jurar por el ángel, a menos que sea cierto— dijo Izzy
—Y lo es, es cierto— les dije
—Se que no fui el mejor, pero por Martina haría lo que fuera y lo hice, cambié para poder estar cerca de ella, después de todo es mi sangre también, verdad?— dijo John
***
—No me vas a ofrecer nada? Que descortés de tu parte— dijo Amanda
—Viniste a mi reino, ahora dime por qué— dijo la reina
—Solamente quería que me confirmaras algo— dijo Amanda
—Qué? Qué quiere saber la señorita Amanda Christensen?— dijo la reina
—El ángel de las plumas doradas es quién yo creo?— le pregunto
—El ángel está entre ellos— le respondió
—Esa no fue mi pregunta— le dijo Amanda
—Pero esa fue mi respuesta, si quieres saber más deberás darme algo a cambio— dijo la reina
—Qué es lo que quieres?— le dijo Amanda
—Quiero que me traigas a la niña— dijo la reina
—Qué niña?— le dijo Amanda
—La última nacida del linaje Fairchild— le dijo la reina
—Martina, ese es su nombre— le dijo Amanda—con gusto te la traeré, esa niña ya me está causando muchos problemas, así que será mejor que te encargues de ella
—Intenta traérmela sana, es valiosa—le dijo la reina
—Por qué? Si se puede saber— dijo Amanda
—Cosas de hadas, no debería de interesarte— dijo la reina
—Está bien, la traeré— dijo Amanda— nos vemos mi reina
Y salió de la corte.
—Esa niña es muy valiosa por nosotros— dijo la reina— y pronto sera mía