Ahogados en distancia (Rubius y tú)

Capítulo 19: ¡Jodéme!

—¿Te sientes bien?.

La colorada me mira con el ceño fruncido, y todavía tiene la mano apoyada en mi hombro, se la ve preocupada; y yo no sé si las palabras van a salir de mi boca, porque tengo la mente en blanco.

—Sí, estoy... cansada. Nada más— y le dedico la sonrisa más natural que puedo. 

Los ojos de Jannies se ablandan y retira la mano de mi hombro, esboza una ligera sonrisa.

—Vale. Te veía allí  hace rato, y creí que algo andaba mal— me dice simpática. 

Tengo que actuar como si no la conociera, no puede saber, que sé quien es.

—No pasa nada... Gracias por preocuparte— seguramente sueno tranquila, pero no lo estoy, me siento algo mareada y eso me debe dar un aspecto relajado—. Así que acento español... ¿de vacaciones?

No sé si es bueno sacarle un tema de conversación, pero las palabras salieron de mi boca sin permiso.

—Mmm... algo así— me contesta en un mohín, un brillo cruza sus ojos— ¿Tu sabes cómo llegar a Puerto Madero? Si me puedes ayudar te lo agradeceré mucho. No quiero perderme a estas horas.

Mierda. Mierda, mierda y más mierda. Si le digo cómo llegar, y después nos ve ahí, van a saber que los seguimos... y toda la odisea de hoy, sería al pedo. Pensá en algo, rápido (Tn)____.

—¡Ay! Mis amigas y yo justo vamos a Puerto Madero. Si querés... podés venir con nosotras— le dedico una sonrisa cómplice. 

Me doy palmadas en la espalda por mi buena idea, si acepta, cuando la veamos con Ruben y Mangel, podemos fingir que no teníamos idea de quien era ella, y mucho menos; teníamos idea de que los conocía. Suena algo coherente. No tendríamos porque conocerla, ella no tiene un canal de Youtube, sólo sabemos quien es por somos stalkers de mierda. 

—¡Oh, te lo agradezco! En verdad, pero no os quiero molestar a tí y a tus amigas. Además, yo ya me marcho. Si me indicas cómo llegar me las arreglaré solita, pierde cuidado— Sonríe una vez más. Ojalá dejara de sonreírme, acaba de arruinar mi plan. 

Me gustaría convencerla para que diga que sí, pero seguramente suene sospechoso. Meto mis manos en los bolsillos del pantalón, para que no se note que estoy temblando. Asiento, le sonrío y me dispongo a explicarle como llegar. Cuando termino mi discurso de guía turística, Jannies me sonríe y agradece, de nuevo... creo que empiezo a odiar esa sonrisa. Nos despedimos y sale con gracia meneando su colorada melena por la puerta.

Mierda, acabo de hablar con Jannies, mierda. Vuelvo a mojarme la nuca y me observo en el espejo. Me tomo cinco minutos para calmarme, voy a esperar a que mis mejillas recuperen el color. Y pensar que yo vine al baño para relajarme... plan totalmente frustrado. Me tiemblan las piernas  y veo dar vueltas la habitación. Tomo unas bocanadas de aire, cuando siento que el suelo se estabiliza bajo mis pies, abro la puerta del baño.

Vuelvo a mi asiento, y las chicas me miran expectantes. Obviamente vieron entrar a Jannies al baño, y saben que me la crucé. Me siento inestable. Me tomo unos segundo para mí, respiro hondo y empiezo.

—Hablé con la colorada— suelto la frase acompañada de un suspiro.

—¿Qué? ¿Hablaron?— dice Juli.

—¡Jodéme!— exclama Flor casi al mismo tiempo.

—Nooo— deja salir Mar en voz baja, y después se tapa la boca abierta de asombro.

—Sí, yo me sentía mal... me apoyé en la pared con los ojos cerrados y ella se acercó a ver como estaba— Mientras hablo me tiemblan las manos, creo que estoy en estado de shock, o algo así. Las chicas escuchan atentas y me devoran con los ojos— Me hice la boluda, la que no sabía quién era. La traté como a cualquier persona. Después me preguntó como llegar a Puerto Madero y se lo expliqué. Así que... tenemos la data.

Y sonrío, porque después de todo, hablar con ella no fue tan malo. Sabemos su próximo destino.

—No lo puedo creer boluda, hablaste con la colorada come chinos— dice Flor agarrándose la cabeza, y sonríe incrédula. 

—¿Y ahora qué hacemos? Osea, te vío. Si la seguimos, se va a dar cuenta boluda— me pregunta Juli.

—La colorada nos cagó el chori— se queja Marianita.

—Bueno, no... cuando me preguntó como llegar, una luz me iluminó desde el más allá y le dije que yo también iba a Puerto Madero, le propuse venir con nosotras, pero me dijo que no. Así que cuando nos vea, no le va a parecer raro que estemos ahí. Después podemos fingir quedarnos perplejas de que ella halla venido con Rubius y Mangel, tipo... qué casualidad todo.

—No lo puedo creer... no lo puede creer— dice Flor mientras niega con la cabeza. Yo tampoco lo puedo creer.

—¡Aaaaaay!— Mar deja salir un gritito de emoción. Me gustaría que los nervios me abandonaran y sentirme solo felíz.

—¡Ay sos una genia! hoy te estoy amando mucho— me alaga Juli, y se inclina desde su asiento para besarme la frente.

—Bueno, bueno, basta de babas. Se iban ahora, así que hay que meterle— digo mientras aparto a Julieta.

Dejamos lo que queda de comida sin pensarlo, y nos tomamos el palo. Fangirl que comió, voló.

Comenten y Fap para moar <3

Picadura de la cobra gay, si te pica te vuelves gay, *chas chas*

Pd: Chicas no voy a poder subir capítulo por una semana :( perdonen T.T

Aaah... ¿Se asutaron eh? Ahre. Es mentira, sigo subiendo todos los días  porque soy su esclava (? Las loveo <3