Suspirando por los Pines

Capitulo 38

En los siguientes días muchas cosas de todas las categorías. Comenzando por el hecho de que toda la familia estaba anonada cuando vio a Ford volver en un estado tan deplorable. Lo mas raro era que este tenia una radiante sonrisa y Stan lucia una sonrisa tranquila. Todos pidieron explicaciones, pero ambos solo respondían la misma respuesta "Cosa de hermanos". Pero luego de un rato todos cedieron haciendo pregunta alegando que ellos se entendían, a su extraña y poco ortodoxa forma. El resto del día paso sin incidentes, quedaron todos durmiendo en la sala viendo una película, algunos mas juntitos que otros. En los siguientes días hicieron los preparativos de la fiesta de cumpleaños de los gemelos menores. Una vez el día llego, se dio una fiesta increíble. Mcgukect no reparo en gastos, aunque no fue la gran cosa en realidad. Hubo comida y entretenimiento por todos lados. Los gemelos mayores lograron su objetivo, que la primera fiesta de cumpleaños de los chicos viviendo con ellos, fuera memorable. Eso sin mencionar que hubo regalos en demasía. De cada ciudadano del pueblo hubo un buen regalo. Cada uno recibió una laptop nueva, junto con reloj igual al de Ford. Bastante ropa nueva como para renovar sus closets completos y varios juegos de zapatos nuevos. Mabel recibió un set de palos de golf nuevos y un enorme juego de lanas especiales. Dipper recibió un ser especial de CCYC y un par de guantes de boxeo con su nombre grabado. Finalmente los regalos mas especiales fueron de sus tíos. Ford les regalo un par de diarios a ambos, el de Dipper tenia de cuero azul y tenia un pino dorado en el centro y el de Mabel era de cuero rosa, tenia una estrella fugaz dorada decorada con rayos de brillo. Por su parte Stan le dio a Dipper unos nudillos de latón color dorados que quedaban algo grandes a su mano y a Mabel le dio un bate de aluminio negro con detalles rosados.

Ford estaba en desacuerdo en cuanto a los regalos de Stan, pero simplemente se resigno, sabiendo que así era su hermano. Pero fuera de ese minúsculo detalle, aquel día solo se podía definir con una palabra, perfecto. Las clases a la vuelta de la esquina, por suerte la transferencia escolar no fue complicada. Ya en el ultimo día de vacaciones los chicos ya tenían todo preparado para su nuevo año. Pero decidieron pasar en aventuras su ultimo día libre, lo cual incluía a Wendy, Soos y Melody. Ford se quedo en el bunker haciendo unas pruebas, cuando de la nada la pequeña hada se acerco a el.

-Hola pequeña...... ¿Necesitas algo? – Dijo Ford viendo como ella le dio una sonrisa triste. Ella solo voló hacia la habitación de prueba de Ford.

Este preocupado la siguió. Una vez en la habitación, ella le mostro la pequeña cabina donde ella depositaba el polvo que producían sus alas. Ford quedo sorprendido, había mas polvo de lo que calculo, suficiente para varias dosis de su suero. Este la vio asombrado de que ella pudiera producir tanto polvo en tan poco tiempo. Ella le dio otra mirada se acerco a su frente y puso su mano. Ford sintió como ella se conectaba por completo. De repente oyó una voz en su mente, suave, pero clara.

-Gracias por todo lo que ha hecho por mi, pero yo ya estaba destinada a morir, antes de usted encontrarme una enfermedad bastante rara en mi especie me ataco...... Por esa razón fue expulsada, pero usted me ha tratado y cuidado cuando estuve a punto de morir, pero esta enfermedad solo se alentó, finalmente alcanzo mi centro....... Produje todo el polvo que pudo a toda velocidad en el ultimo mes en manera de agradecimiento........ Solo le pido que cuide de mi hija...... Una vez que yo muera, ella nacerá del polvo que de mi cuerpo quede, y fue lo único que mi magia me permitió proteger de tal enfermedad...... No se preocupe por el polvo, también esta inmaculado.....- Dijo el hada atreves de la mente de Ford. Este no pudo evitar sentir gran tristeza, pues le había tomado cariño al hada.

-Yo me comprometo a cuidarla con mi vida.....- Dijo Ford de forma solemne. El hada finalmente soltó la frente de Ford.

El hada comenzó a alerta mas y mas despacio cada vez, descendiendo poco a poco hasta la mano de Ford. Este la miro con tristeza como ella comenzaba a perder brillo y a secarse poco a poco. La pequeña murió con una sonrisa, dejando de respirar justo antes de que cuerpo se volviera polvo. Ford cerro los ojos haciendo silencio por la muerte del hada. Pero de repente, una luz brillo dentro del polvo. Ford sentía una extraña calidez y paz recorrer su cuerpo. Entonces el polvo se disipo, dejando ver a una hada bebe casi igual a su madre, exceptuando sus alas, que eran muy pequeñas. La bebé se retorcí haciendo pequeños ruido, Ford supo lo que tenia que hacer. Tomo una bufanda que tenia en una repisa, la doblo y coloco a la bebé ahí. Busco entre sus cosas y encontró un néctar de flor concentrado que tenia para la madre. Entonces lo puso en un gotero y se lo dio a la bebé. Solo un par de gotas basto para llenar a la recién nacida.