VERDAD O RETO

Tu nuevo juguete

El fin de semana paso sin que ninguna de sus amigas, o incluso Tiffany, la llamaran. Pero para Jessica fue mejor así. De todos modos, tenía bastantes cosas que hacer, y la verdad prefería alejarse de ellas y pensar con tranquilidad las cosas.

Era casi el mediodía del lunes, cuando fue a sentarse en una de las mesas comedor del jardín, para disfrutar su almuerzo. Leche, un emparedado de pollo, una manzana y unos pequeños chocolates rellenos de cereza que vendían en la cafetería y por los que había desarrollado una adicción.

Comenzó a morder su emparedado, cuando Sunny llego a sentarse junto a ella.

— ¿Qué tanto sabes de cálculo? — preguntó Sunny.

— Me defiendo.

— ¿Crees poder ayudarme?

— ¿Con qué?

— Estas operación — le dijo a Jessica enseñándole su cuaderno — No puedo entenderlas y tengo examen mañana.

— Déjame ver.

Dejando un poco de lado su desayuno, Jessica trato de aclarar las dudas que se le presentaban a Sunny. Mientras que poco a poco se iban uniendo a ellas sus otras amigas.

Taeyeon y Hyoyeon, como siempre, llegaron discutiendo sobre música, a pesar que ninguna sabía tocar ningún instrumento. Seohyun, saludando a todas con amabilidad, se mantenía en silencio mientras revisaba algunos de sus correos electrónicos en su tableta, pero se mantenía atenta a todo lo que pasaba y se decía a su alrededor. Yoona, trajo galletas de mantequilla que su madre había orneado la noche anterior, luego de discutir de nuevo con su padre. Ya estaba acostumbrada a las discusiones de siempre, y a que su madre hiciera toda clase de delicias reposteras luego de cada una de ellas. Sooyoung no estaba porque esa semana se había ido con su grupo a un viaje de prácticas, así que las ultimas en llegar fueron Yuri y Tiffany.

Todo había parecido normal, hasta que ellas llegaron.

Fue asombroso darse cuenta de lo importante y hasta ese momento desapercibido que era la actitud de Jessica para el equilibrio de aquella amistad. A pesar de que Jessica siempre había sido la menos expresiva de todas, era como un pilar que las mantenía unidas.

Bastaron solo dos segundos, después de la llegada de Tiffany, para que todo el ambiente cambiara. Para que la felicidad, y la normalidad que habían disfrutado se desvaneciera como las galletas en el plato de Sunny.

El silencio que siguió, fue tan tenso que las espaldas de todas se pusieron rígidas. No podía hacer nada más que intercambiar miradas nerviosas.

Siempre se reunían así en cualquiera de las mesas redondas del jardín, y cada una de ellas, tenía algo así como un lugar asignado para sentarse. El lugar de Tiffany siempre era al lado de Jessica y esta vez, sorprendió a todas que no fuera así.

Tiffany se sentó frente a Jessica, entre Taeyeon y Hyoyeon, dejando un lugar vacío al lado de la rubia.

Jessica dejo de hablar y se dedicó a comer su emparedado.

Y entonces, sucedió algo que nadie esperaba.

— Hola

Una chica, que ninguna de ellas conocía, llego y se sentó junto a Jessica, en el lugar en el que Tiffany debía hacerlo. Y no solo eso, ante la mirada de asombro de todas, la chica tomo uno de los trozos de emparedado del plato de Jessica y comenzó a comer sin decir nada y con una sonrisa en los labios.

°°°

Irene llego corriendo a las mesas del jardín.

Se había quedado de ver con Jessica, pero un profesor había detenido a su grupo más de lo normal y ahora iba tarde. Terriblemente tarde. Pero, la sorprendió el verla en una de las mesas rodeada de otras chicas. Sus amigas.

Eso le daba mucho gusto. Y no pensó que acercarse fuera nada malo o del otro mundo.

Saludo, se sentó junto a Jessica y como tenía un poco de hambre, tomo uno de los trozos de emparedados como de costumbre. Ya se había acostumbrado a que le ofreciera comida, así que eso era normal.

No entendió la cara de todas, cuando la miraron.

Algunas parecían muy confundidas, otras parecían asustadas, pero había una de ellas que parecía mirarla con desprecio.

— ¿Qué sucede? — pregunto Irene con un bocado de emparedado a medio masticar.

°°°

— ¿Quién es ella? — exigió saber Tiffany.

— Oh, lo lamento. No me he presentado — aceptó la joven — Soy Irene...

— No te pregunte a ti — la callo de inmediato Tiffany — ¿Jessica?

Jessica se acercó a la joven y le susurro algo al oído.

— ¿Es tu nuevo juguete?

— ¡Tiffany! — Yuri no podía creer lo que Tiffany acaba de decir.

— Vámonos — Jessica se puso de pie, tomo su mochila y tomo a Irene, que estaba bastante sorprendida por la actitud hostil de una de las amigas de su tutora, de la mano para ayudar a ponerse en pie.

La mirada furiosa colérica de Tiffany, no se pudo apartar de las manos entrelazadas de aquellas dos. La sangre le hervía, y sin un motivo que fuera capaz de entender. Quizá era el hecho de que estaban peleadas, o tal vez, que se estuvieran alejando tanto cuando hasta hace poco eran inseparables. Lo que fuera, la hacía sentir un odio inmediato e irracional por aquella joven.

— Las veo luego — le dijo Jessica a las demás y se marchó, junto con la joven, sin soltarse de las manos.

— ¡¿Quién demonios es esa estúpida?! — pregunto Tiffany sentándose de nuevo enfurecida.

— Parece una linda chica — añadió Taeyeon.

— Lo sorprendente aquí, es que se comió el sándwich de Jessica y no le paso nada — comento Hyoyeon.

— Es verdad — acepto Sunny — Ni siquiera con Yuri tiene este tipo de reacción. Nadie puede tocar la comida de Jessica. Cuando tú lo haces, siempre pelea un poco. Pero con esta chica...

— ¿Creen que sea su nueva novia? — pregunto Yoona.

— ¡Se los dije! — gritó Sunny saltando de su asiento — Jessica, no necesitaba de nuestra ayuda para conseguirse a alguien.

— Además es comprensible — hablo por fin Seohyun — Después de lo que le dijo Tiffany el viernes pasado.

— ¡¿Qué?! ¡¿Ahora se supone que es mi culpa?!

— No estamos diciendo eso — Yoona trato de tranquilizarla.

— ¡Ni siquiera sabemos quién es esa tipa! ¡Ustedes están dando por hecho que es su novia!

— Bueno, no lo sabemos, pero...

— ¡Estoy harta! ¿Oyeron? ¡HARTA!

Tomo sus cosas y se fue hecha una furia, dejando a todas las demás desconcertadas. Yoona, fue tras ella.

°°°

— Lamento eso — se disculpó Jessica después de alejarse de sus amigas.

— Sí...— hizo una pausa — No entiendo muy bien lo que acaba de pasar — declaro Irene algo avergonzada.

— Es..., complicado. Mis amigas... no, bueno, Tiffany...

— No te preocupes. No es necesario que lo expliques. De verdad.

Jessica noto que Irene estaba incomoda, así que no quiso presionarla o hacer que se sintiera peor. No quería que pensara cosas que no eran. En verdad que le agradaba, así que no quería que se alejara por lo que había pasado.

— Sabes — dijo de pronto la menor — Tengo que irme. Lisa, me invito a comer. Nos vemos luego, ¿está bien?

— Sí, supongo. Te llamo después.

Irene se despidió con una sonrisa, y se alejó sin mirar atrás, dejando a Jessica con un mal sabor de boca.