La decisión de Annabeth

Esto es Esparta.

Nunca quise algo más en mi vida que triunfar. Recibir un premio por el arduo esfuerzo que sudo. Dar gracias a la multitud por los aplausos acompañados de gritos animados. Celebrar junto a mi familia que todo ese sacrificio dio un resultado importante en mi vida.

Así lo sentía yo.

Ganar la presidencia estudiantil era un pequeño paso para ello. Estaba a unos momentos de saber quién tendría aquel deseado puesto.

Me encontraba nerviosa (algo inusual), sentada en la mesa principal junto a Percy jugando con sus manos como si estuviera en clase de aritmética con la señorita Dodds. Detrás estaba Hazel como STAFF, repartiendo botellas de agua y canapés para toda la audiencia que esperaba en la oficina principal de la escuela Yancey.
Mi campaña entera estaba en silencio. Viendo las paredes de forma aburrida y sosa mientras que la plantilla de Percy estaba por todos lados. Tracis y Connor viendo chicas tras el ventanal, Nico y Frank murmurando sobre algo. Tal vez sobre Hazel ya que cada vez que ella se acercaba a ellos callaban sus bocas y sonreían inocentes. Al final estaba Leo, sentado entre Percy y el señor D tamboreando sus dedos contra la mesa sin perder el ritmo animado. Por otro lado estaba el señor D.

Él estaba deseoso de ahorcar a Valdez.

La sala entera se encontraba en silencio, todo apacible. Pero era todo lo contrario. Los chicos del comité de eventos estaban en los últimos momentos del conteo de votos. Todo lo que pude hacer se había acabado. Era momento de ver lo lejos que había llegué.

Cuando Jason llegó a la sala casi solté un grito bajo del susto. Estaba jadeando por haber corrido. Mis ojos fueron directamente a su mano con un sobre blanco.

El sobre blanco de los votos tomados en cuenta. Con mi respuesta final.

Caminó con prisa a donde estaba Dionisio y le entregó el sobre. Contuve la respiración acercándome sigilosa a él cuando leyó su interior, tenía que pensar en mi respiración para no caer en un colapso de nervios. La desesperación me corroía lento, necesitaba saber. Deseaba ganar.

Dionisio levantó la mirada y como escaner nos miró a todos a los ojos antes de dejar el papel sobre la mesa como si hubiera traspasado toda la información a su mente. Se paró en medio suspiro aflojando su corbata, raro en él. Aparte de que nunca vestía formal, ahora estaba incluso usando corbata.

—Damas y caballeros, les informo que el presidente estudiantil es...

Su voz se apagó al momento de decir el nombre del presidente.
Todos esperamos varios minutos a que él reaccionara por sí mismo, que dijera la respuesta. Pero su mirada perdida confirmaba que su mente estaba en un bucle en el tiempo, como si pudiera ver el futuro.

—Dionisio —llamé su atención. El señor D parpadeó recobrando la cordura.

Tragó saliva para afinar su voz e hizo un segundo intento.

—El siguiente presidente estudiantil es... —suspiró tratando de respirar. Su mirada me veía buscando auxilio, pero no podía hacer mucho. No sabía a lo que se enfrentaba. Aflojó por completo su corbata cuando bajó su mirada a un punto. Seguí el vector hasta el cuerpo de Percy jugando con sus dedos como si saber de los resultados no fuera de importancia primordial en ese instante. No. En realidad, estaba muy entretenido jugando con sus pulgares como si fuera el juego que se inventó en milenios. De un segundo a otro lo capté. La mirada de Dionisio en Percy, su inusual comportamiento. No quería pensarlo. No podía sucederme a mí. Volví mi atención a Dionisio, viéndolos devastados. Varios chicos intentaron sacarlo del trance para saber del resultado. Cuando el señor D quiso, se sentó con dificultad en su silla de cuero, tenía la cara totalmente roja—. Esto es humillante.