Anniken Lokison

Anniken Lokison Cap 17

Los días pasaban y Loki estaba cada vez mas deprimido, ya no salía de su habitación no siquiera para comer, Thor y Frigga an hecho de todo para sacarlo pero nada funciona, sabían bien que lo único que lo haría salir de su cuarto sería encontrar a Anniken.

-cariño sal por favor, llevas 4 semanas encerrado y ni siquiera as tocado tu comida- dijo Frigga detrás de la puerta, Thor estaba sosteniendo en sus manos una bandeja con comida para su hermano deprimido.

-no tengo hambre madre- dijo un Loki muy callado y frío, Thor se estremeció ante eso pero no aceptaría un no como respuesta.

-hermano abre la puerta y deja de preocupar a nuestra madre por favor!- rogó su hermano, Loki abrió la puerta ligeramente minutos después de pensarlo, dejando que su hermano y su madre vieran la peor de las escenas en su hija.

Ojeras casi en sus mejillas de un color morado sucio, su cabello antes arreglado y brillante ahora estaba sucio y despeinado, sus ropajes estaban rotos y malgastados y su estado físico se deterioraba cada vez más.

-Loki...-fue lo único que logro decir su madre al verle, Thor estaba pálido, sorprendido, triste por su hermano.

-hermano debes comer, estas horrible- Loki no respondió, tampoco le miro mal ya que lo entendía y el mismo se veía como una basura mal tratada- ten- le extendió la bandeja que Loki agarro con dificultad, no solo estaba mal si no que había perdido fuerzas, muchas fuerzas.

-hijo debes dejar de tratarte así, estas muy mal- Frigga se llevó la palma de su mano a su boca, intentando no llorar por lo que Loki estaba haciéndose así mismo, pero, ¿que mas podía hacer? No pudo ni siquiera proteger a su hija de los soldados de Jotunheim.

-perdí a mi hija madre, comprende como me siento, es normal que esté así de horrible- su voz sonaba apagada, sin vida, sin felicidad.

-hermano todos estamos como tu, pero nos cuidamos, mantenemos las esperanzas de que ella esta por ahí en alguna parte haciendo a saber que!- dijo Thor en modo de defensa, comprendía a su hermano pero no podían llegar a esos extremos y mucho menos ahora que estaban mas vulnerables que cualquier otro reino de los nueve mundos.

-lo se Thor, lo se muy bien, y es eso lo que exactamente me esta perturbando en estos momentos, saber que me hija esta por ahí en los nueve mundos haciendo a saber que es lo que mas me preocupa, ¿no recuerdas lo que nos dijo?, se vengaría por los daños que le hicimos pero no atacaría más a nuestro castillo.

-lo recuerdo como si fuera ayer Loki.

-fue hace 4 semanas Thor...

-es una expresión, pero...de igual modo! Debes dejar de tratarte de esa manera y nosotros de volveremos a restaurarte, ¿cierto madre?

-completamente, quieras o no deberas dejarnos ayudarte- dijo Frigga en manera de defensa a su propio ser, Loki se les quedo viendo para echar un suspiro profundo al cielo y volver a posar su mirada en sus familiares.

-esta bien, dejare que vuelvan a restablecer mi estado de salud- musitó Loki con una media sonrisa fingida, Thor lo conocía bien, no le agradaba la idea en lo absoluto pero era lo mejor.

-comenzamos mañana en la mañana, ahora come, que lo necesitas- Thor y Frigga se retiraron del aposento de Loki, escuchando la puerta cerrarse rápidamente en sus espaldas para volver al silencio de hace 4 semanas- espero y se cuide.

-yo también espero eso hijo- Frigga se fue por caminos diferentes a los de Thor que se fue a entrenar con sus amigos, o al menos los que quedan de ellos ya que Fandral lo desapareció Loki después de que intentase abusar de su sobrina mientras ellos no estaban en el castillo.

Las horas pasaron, ninguno de los familiares de Odin habían recibido alguna noticia de si Anniken se encontraba en alguna parte, o eso creían ellos.

-señor!- llamó un guardia a la familia Odinson que enseguida lo vio con atención- encontramos anomalías de la princesa Anniken en el mundo Alftheim, en el pueblo del rey Frey.

-enserio?- preguntó Loki sin creerlo, 4 semanas buscándola con magia o sin esto sin dar con un resultado lógico.

-y que estamos esperando!? A buscarla!- gritó Thor corriendo junto con Loki y sus padres al portal de uno de los guardias que entro con ellos para contemplar el reino verde y marrón de los duendes de luz.

-majestad por aquí!- exclamó un joven guardia señalando el suelo mientras la familia Odinson corría a ver de que se trataba.

-son sus huellas, y van hacía el pueblo- dijo Loki que no dudo en correr hacía el pueblo con su familia y guardias atrás de el, llegaron a la entrada donde muchos guardias los detuvieron, incluyendo una joven de unas 16 años con un aspecto demasiado especial.

-los Asgardianos tiene prohibido la entrada al pueblo del rey Frey- dijo la chica de unos 16 años de edad, piel blanca, cabello largo y castaño oscuro con ojos color ámbar claro y una armadura de oro puro con una espada de mango de oro en su cintura.

-señorita necesitamos entrar y hablar con el rey en estos momentos- dijo Odin con la mayor educación posible.

-majestad esta en una reunión con el rey de Nivadellir, Eitir, en estos momentos esta indispensable ahora vuelvan por donde vinieron!

-mi hija esta por ahí en su pueblo y no me iré hasta que su rey salga!- demandó Loki, la chica dejo a unos guardias reteniéndolos en la entrada y junto con su caballo salió a buscar al rey en su castillo.

-señor- llamó Anniken en su forma de camuflaje que fue el que le dio el rey Frey, este le miro extrañado por su entrada- siento interrumpir su reunión con el rey Eitir, pero unos Asgardianos exigen verlo y no se van a ir hasta que los deje pasar para hablar con usted.

-...esta bien, déjenlos pasar, me disculpa señor Eitir, pero tendremos que seguir hablando en otro día que yo cuadrare, ¿esta bien?- está asintió diciéndole que no tenía ningún problema- otra vez, siento esto- el rey se levantó aceptando sus disculpas, abriendo un portal para irse a su mundo.

-enseguida señor- Anniken salió del castillo con su caballo y fue a buscar a los Asgardianos que conocía muy bien- el rey aceptó que entrasen, guíenlos al salón principal que el rey los esperara ahí.

los guardias los guiaron por el pueblo hasta el castillo donde el rey Frey los esperaba con un rostro serio.