Quién diría que Loki Laufeyson tendría una hija? Pues este es el caso de esta historia, donde esta chica corrió con la mala suerte de conocer a su tío Thor en una cena que su mejor amiga Jane la obligó a ir....
estas en graves problemas jovencita- murmuró Loki con él enfado en las nubes, tomo a su hija por el cuello sin ahorcarla y se fue del castillo dedicándole una mirada fulminante al rey Frey que solo veía con pena a Anniken, esperaba y rogaba que no sufriera mucho.
Llegaron a Asgard y Anniken se revolvía para no entrar en el castillo, Loki le lanzó una golpe en el estomago que la dejo sin aire y entro en el castillo con ella y su martillo en manos (pero Anniken llevaba su martillo ya que Loki no podía levantarlo, pero le puso un hechizo para que no lanzase ataques con el), Thor, Odin y Frigga sé alegraron de ver a Loki de vuelta pero su expresión cambio cuando vieron a Anniken colgada en su mano que agarraba su cuello.
-donde estabas Anniken Laufeyson!?- gritó Odin con enfadó.
-estaba en el reino de Alftheim, justo como lo dije- murmuró Loki con enfado pero en voz alta- estaba siendo guardiana del rey Frey y cumpliendo con las ordenes que le daban- tiró a Anniken al suelo con mucha rudeza haciendo que esta se quejara a travez del bozal de metal que Loki le puso.
Thor se acercó a ella con una mirada de indiferencia pero a la vez de seriedad y tomo su martillo para levantarse de alejarse.
-a los calabozos de alta seguridad, ahora- demandó Thor escuchando los pasos de los guardias acercarse, tomaron a Anniken que transformo su armadura de antes a la verde de siempre y se dejo llevar por los guardias hasta los calabozos de luz donde estaría ahí por mucho tiempo.
-hicimos lo mejor- dijo Odin, Frigga estaba un poco en desacuerdo, la metieron en los calabozos por traición pero no lo hizo a propósito, estaba cegada por la ira y ellos lo sabían, además que no hizo nada malo.
Frigga se levantó de su asiento sin darles explicaciones a sus hijos y esposo y fue a los calabozos donde encontró a Anniken mirando la pared, levantada y manteniéndose en sus piernas un poco heridas por los guardias que tal vez le dieron algunos golpes por estar resistiéndose a ser metida ahí.
-Anniken- llamó Frigga a su sobrina que volteó por encima del hombro a ver a su abuela justo enfrente del enorme cristal mágico que evitaba que Anniken saliera de la celda- sobrina, estas bien.
-si Frigga, estoy bien- se acercó lentamente a ella con un rostro un poco serio enfadado- bien mal de estar aquí, mal de saber que mi padre dejo que me encerrasen, mal de saber que Thor se llevo el martillo y no tengo nada, mal de saber que pasara muchos años de mi vida aquí!- se le quedo mirando con una cara sin expresión, Frigga se sentía terrible por ella ya que tenía razón, ¿que mas podía perder?
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-Anniken, cálmate hija si? Se que esto es difícil y no solo para ti, si no para mi también, intento sacarte pero ellos no obedecen, pero té prometo que haré lo posible por sacarte de aquí- después de que termino de hablar se fue, dejando a Anniken sola otra vez.
Horas después
Anniken estaba caminando de un lado al otro por la celda, con la armadura esparcida por toda la celda, quedando solo en un pequeño outfit negro de tirantes que solo le cubría los senos.
Sus brazos empezaron a cambiar, nunca pensó que eso volvería a pasar después de que Loki le quitase ese poder maligno y oscuro, el negro otra vez empezó a dominar sus brazos hasta llegar a los hombros otra vez, pero ella había aprendido a controlarlo así que el color negro no llego a mas.
-oye princesa- llamó Sif con mucho desprecio en su voz, esta le miro con una seriedad enorme que hizo que los bellos de Sif se erizaran al igual como los de Volstagg y Hogun que andaban con el- que tal en tu nueva celda?
Anniken no respondió, solo estrelló su mano en él vidrio tiñéndolo de un negro azabache que el vidrio no soportaba tener, poco a poco este se convertía en un vidrio negro, Sif, Volstagg y Hogun retrocedieran preparándose para cualquier cosa, pero en vez de ser atacados o que el vidrio se rompiera por Anniken, este solo volvió a la normalidad poco a poco, estremeciéndose con cada desaparición de la parte negra que se iba de ahí.
-como hiciste eso?- preguntó Hogun al ver que Anniken seguía en la celda, al parecer Loki no iba a ser tan tonto como ellos creían.
-pasa cuando me enfadó, mis brazos de tiñen de negro y todo lo que toco se tiñe de negro, una magia oscura que mata todo lo que toca, todo menos este cristal- sonrió con malicia, Volstagg solo le miraba sin saber que decir, solo pensaba en comida ya que esta hambriento como nunca antes lo a estado.
-eres un monstruo- dijo Sif sin piedad, odiaba a Anniken desde que llegó.
-gracias por el cumplido, guerrera inútil, mi padre me enseño a serlo cuando me conoció- amplió mas su sonrisa y se hundió en el medio de la celda otra vez, mirando la blanca pared que tenía detrás, ignorando las miradas de los amigos de Thor.
-que fue lo que le paso al prisionero de la celda de al frente?- preguntó Hogun a Anniken, esta solo soltó una risa que fue de menor a mayor intensidad, pareciendo una risa de psicopatía.
-se volvió loco, es una manera de entretenerme entre esas cuatro paredes, toda persona que este dentro de esa celda se volverá loca, y todo por culpa mía- golpeó él vidrio y se sentó enfrente de este, quedando a solo unos centímetros de ellos que estaban siendo separados por el vidrio.
Los amigos de Thor se fueron de una vez por todas del cristal, mientras Anniken solo veía la celda vacía que tenía enfrente, hasta que unos guardia se entraron otra vez a los calabozos, llevando a otro prisionero a la celda de al frente, Anniken solo sonrió con satisfacción pensando que sería divertido ver como ese hombre estrella su cabeza contra el vidrio con desesperación, hasta que muera debido a los golpes que se a dado sucesivamente.
