Capitulo 2.11

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El sonido de los disparos inundaban el lugar, mi pierna  derecha  dolía y un hombre con un brazo de metal habia salvado mi vida.

-no te muevas de aquí- dijo alejándose del muro donde estaba sentada y saliendo con una metralladora.

Las balas salían una tras otra junto con el sonido que hacían al tener impacto con los cuerpos que me habían atacado y herido.

El hombre de cuyo brazo de metal, cabello largo hasta los hombros y ojos verde regreso a donde yo estaba dispuesto a ayudarme, me aleje de él.

Me intente levantar pero caí, el hombre me ayudó sujetando mi cintura.

-no me tenemos tiempo para que preguntes algo y yo responda,  te tengo que sacar de aquí - me dijo mientras me guiaba a un pasillo lejos de las personas que había lastimado con la metralladora que aún sostenía en la mano derecha de metal y me sostenía a mi con la izquierda.

-no, tengo una misión- le respondí.

-¿vas a completarla herida?- Bufo- no puedes sostener te.

En parte tenía razón pero yo necesitaba llegar a mi punto de reunión con los demás para derrotar a la mano .

-necesito hacerlo- le dije y este negó ligeramente con la cabeza.

-¿hacia donde?-preguntó.

-iré sola, eres un asesino y no quiero que le hagas daño a nadie más.

-yo no le hice daño a nadie, no al menos voluntariamente, aquellas balas que tengo, me las dio una persona que tampoco quiere heridos- me mostró una de las balas- son somníferos con simuladores de dolor que los deja inconscientes 90 minutos.

- el pasillo de la derecha- le dije y me ayudo a dirigirme con rapidez.

FLASH BACK.

Tenía puesto una falda larga que me llegaba hasta los talones de color rojo, debajo de ella tenía un pantalón negro cómodo, botas negras, una camisa negra de manga larga, lentes oscuros y una mochila negra donde tenía un reloj láser.

A mi lado estaba Scott con un pans holgado lo suficientemente para cubrir el traje de Ant-Man que tenía puesto y una mochila con una herramientas y su casco encogido.

-esto es incómodo- comentó

-estoy de acuerdo contigo.

Llegamos al edificio donde conseguiríamos las respuestas. En la recepción estaba una mujer pelirroja de ojos marrones y lentes.

-hola, mi esposa y yo queremos ver los paquetes para vacacionar en nuestra luna miel- hablo Scott.

La mujer se nos quedó viendo por un momento y después hizo unos movimientos en la computadora.

-¿por cuanto tiempo? -pregunto la recepcionista.

- 8 meses- le contesté.

Nos dio varios paquetes.

-¿me puede decir donde esta el baño?- lo dudo un poco pero me respondió.

Me dirigí al "baño", me subí a elevador al elevador y un hombre de traje negro de casi dos metros entró conmigo, era enorme y muy voluminoso, pesaba más de 100 kg.

-Buenos dias- dijo con una voz gruesa.

Tenía pinta de Mafioso, yo solo me límite a no verlo.

-Buenos dias - le contesté con una voz casi inaudible.

- ¿a que piso va?- preguntó.

- Al... penúltimo - le respondí

El hombre apretó el botón y el ascensor comenzó a moverse, podía sentir su incómoda mirada que tenía hacia mi de pies a cabeza.

En cuanto se paró el elevador y abrió las puertas salí pero el hombre me tomo del brazo sosteniendolo  ligeramente.

-espero volverla a ver Victoria- me sonrió de forma burlona y cerró el elevador.

-Scott, aborta el plan, hemos sido descubiertos- estaba hablando por el comunicador que traía escondido en la blusa.

Esperaba a que me contestara mientras yo bajaba con rapidez las escaleras y unos hombre de trajes blancos me seguían.

-nos topamos de nuevo- el hombre gordo me impidió el paso y los hombres que venían detrás de me tomaron. Intente golpearlos o hacerles algo pero me era inútil en este momento- tranquila preciosa, si te portas bien, papi te dará un dulce.

Sentía repugnancia de la voz y la asquerosa  mirada que dirigía a mi.

FIN DEL FLASH BACK.

-gira a la izquierda- le dije al ojiverde que me iba sosteniendo.

En el pasillo se encontraban varias puertas, entramos a una con los números 3A. En seguida nos dejamos caer por el cansancio. Sharon Carter y Sam ya habían llegado pero faltaba Clint.  Scott, Nick y Maria iban a la parte de máquinas, Sharon y Sam habían ido al centro de control para desactivar algunos protocolos pero para eso también se tenía que ir a la sala de operaciones, a donde yo fui y después a la sala de máquina para cuando dieran la señal.

-¿Qué haces aquí?- pregunto Sam.

-tu... no se suponía que vinieras- esta vez fue Sharon.

-¿de que hablan? ¿lo conocen?- pregunté.

- es el soldado del invierno- me respondió Sam.

TORY BLACK: la hija de tony starkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora