Fake Love | Fanfic Simbar (Completa)

Capítulo 39: Equivocada

Ámbar

Gastón siguió encarándome mientras Matteo no llegaba. Yo estaba incomoda por la manera que él me estaba mirando. Desvié la mirada y di un paso hacia atrás.

- ¿Matteo está en casa? – Cuestioné y seguí mirando a otro lado.

- Ámbar. – Escuché la voz de Matteo y le sonreí. - ¿Qué haces aquí?

- Quería hablar con vos. – Contesté. – Pero creo que llegué en malo momento, así que, me voy.

- No. – Matteo me impidió. – Gastón ya estaba por irse. Chao, amigo. – Él encaró a su mejor amigo y Gastón rodeó sus ojos.

- Sí, ya estaba por irme. – Gastón fue irónico y entró en la mansión de Matteo. Él tomó sus cosas y se fue.

- ¿Pasó algo? – Matteo preguntó y yo lo miré. – Tu carita no está nada bien.

- La verdad es que sí. – Admití. – Quería hablar con vos porque me siento perdida.

- Vamos. – Matteo apuntó en dirección al interior de su casa. - ¿Quieres entrar o quedarse ahí?

- Sí, claro. – Di una sonrisa y acepté su propuesta.

Matteo cerró la puerta y yo me senté en el sofá. Puse mis manos encima de mis rodillas y suspiré. Mi cabeza aun estaba confundida, no sabía que pensar sobre Simón y Delfina. Todo parecía muy raro para mí. Creí que estaba en negación porque jamás aceptaría algo así.

- ¿Quieres algo? – Matteo me preguntó. – ¿Algo para tomar, para comer...?

- ¿Aún tenés tu whisky escocés? – Cuestioné y él sonrió, asintiendo. - ¿Te importaría darme un poco para tomar?

- No. – Él negó y fue en dirección a su bar. - Pero ¿qué pasó? No te veía hace un tiempo.

- Hace poco que terminé de grabar mi participación en la segunda temporada de la serie. – Conté. – Y seguí sin tener tiempo para nada.

- Aquí está. – Matteo me extendió una taza, agarró otra y puso la botella encima de la mesa de centro. – Aquí estoy.

- Eso va a parecer un poco raro, pero necesito que me seas sincero. – Pedí y tomé la bebida en un solo trago. - ¿Por qué Delfina y Gastón se separaron?

- ¿Por qué me estás preguntando eso? – Matteo cambió la expresión y yo le extendí la taza.

- Otro. – Pedí y él llenó mi taza. – Es que me parece que Delfina está escondiendo algo de mí.

- Yo no sé. – Mi ex respondió pareciendo estar incomodo con mi pregunta.

- ¿Sabés si Gastón la vio con otro? – Insistí.

- Gastón no me dijo nada sobre porque cortó con Delfi. – Matteo también terminó de tomar el whisky en un trago. – Pero ¿Por qué me estás preguntando algo sobre eso después de tanto tiempo?

- Yo no debía contarte. – Admití y respiré profundamente. – Pero necesito de un amigo y solo vos podés estar a mí lado ahora.

- No entiendo. – Matteo fue sincero. - ¿Te peleaste con Delfina?

- Ella me está escondiendo algo. – Desvié la mirada y sentí las lágrimas cayendo de mis ojos. Matteo se acercó y puso mi cabeza en su hombro.

- Estoy aquí. – Él acarició mi rostro y yo le sonreí. – Si no quieres hablar de eso...

- No. – Negué. – Yo quiero hablar de eso, Matteo, pero me duele mucho solo en pensar.

- Voy a esperar a que consigas decirme, mientras tanto, ¿Quieres un chocolate?