A través de las nubes

33.- La familia no termina con la sangre

 -¡Morning sunshine!- Dijo Dean apareciendo en la cocina vestido y listo para ir al trabajo, luego besó a Cas, quien seguía en pijama; este a su vez le entregó una taza de humeante café -. ¡Gracias! Lo necesitaba. ¿De qué hora estas despierto?-

- Desde que nos cambiamos del sillón a la cama- Dijo Cas sin darle mucha importancia, al tiempo que alcanzaba el control de la televisión, para subir el volumen -. ¿Dean? Observa el televisor, ¿Reconoces la casa?-

Dean giró sobre sus talones, mientras masticaba un gran trozo de pie, el cual casi escupe al darse cuenta a quién pertenecía la casa que ocupaba toda la pantalla del televisor.

"... Datos recolectados por la policía son escasos, los vecinos han sido testigos de la huida de un individuo no identificado desde la residencia... ¿Podría decirnos si tienen algún dato acerca del estado de salud de las personas violentadas?... Ambos están en situación de gravedad, fueron ingresados en la unidad de cuidados intensivos a las a las 07:00 AM... ¿Qué puede decirnos acerca del atacante? ¿Es un ladrón?... Aún no sabemos la motivación del individuo, pero se presume que su móvil puede haber sido el robo. Como jefe del departamento de policía local les puedo asegurar que estamos haciendo todo lo humanamente posible para dar con el paradero del sujeto, el cual se considera peligroso; apenas tengamos más antecedentes se los haremos saber. ¡Señor! ¡Señor!... Nos informan de último minuto que las dos personas atacadas por el desconocido enmascarado fallecieron hace algunos minutos en la unidad de cuidados intensivos de Birmingham City Hospital, enviamos nuestras condolencias a la familia. Cualquier nueva información realizaremos un despacho, adelante estudios..."

Cas miraba la pantalla con la boca abierta, sobre la que tenía su mano derecha, sintió sus ojos humedecerse, pero al momento que se giró para hablar con Dean, se dió cuenta que éste estaba marcando un número en su celular a toda prisa.

- ¡Vamos, vamos pequeña...contesta!- Dean hablaba entre dientes, su cuerpo temblaba, y sus ojos escocían por culpa de las lágrimas que pugnaban por salir -. ¡Tienes que estar bien! ¡No puedes estar...!- En eso Dean escuchó que contestaron la llamada -. ¡Alooo, Alooo! ¿Deer?-

-¿Dean?- Dijo la pequeña al otro lado de la línea.

- ¡Oh, gracias a Dios!- Exclamó Dean exhalando con fuerza y sentándose al lado de Cas, quién movía las manos desesperado por llamar su atención, por lo que Dean tapó el micrófono del teléfono para escuchar lo que tenía que decir.

- No le digas nada de sus abuelos, Dean; no sabemos si le han informado aún... por favor se prudente- Dijo Cas con ojos preocupados y enrojecidos por las lágrimas. Dean asintió despacio, agradeciendo la lucidez de su novio, volvió a ponerse el teléfono en el oído y escuchó que Doreen lo llamaba al otro lado.

- ¿Dean? ¿estás ahí?-

- Sí pequeña, acá estoy. Sólo llamaba para saber cómo has estado- Dean intentó calmar su voz, esperando que la niña no notara lo nervioso y preocupado que estaba, pero como siempre olvidaba lo especial que ella era.

- Yo... yo estoy bien Dean- La niña hizo una pausa, su voz sonaba dubitativa -. ¿Creo? ¿Hablas de mi salud, verdad?-

- Por supuesto Deer, tú sabes lo del higado y todo eso- Dean miró a Cas solicitando apoyo silenciosamente, éste tomó el teléfono de sus manos para hablar con la pequeña.

- Hola Doreen, soy Castiel. Dean se preguntaba si todo ha ido bien en la escuela.-

- La escuela ha estado bien, todos han sido muy amables conmigo- Doreen volvió a hacer una pausa, lo que Castiel aprovechó para poner el aparato en altavoz -. ¿Cas, está Dean ahí?-