una kirishima // bakugo x lectora

Cap:11

Despertó y lo primero que le llamó la atención fué que ninguno de los idiotas con los que debía compartir habitación estaba allí. Tampoco es que le importara demasiado la razón por la cual aquellos toca pelotas habían decidido no dormir allí, con lo que solamente atinó a vestirse y salir de la habitación con las manos en los bolsillos. Recorrió el pasillo y bajó por las escaleras y en el momento que puso un pie sobre el último escalón de poco parte la madera del suelo de la fuerza que hizo. Todos estaban allí, el pikachu, el idiota de pelo picudo, la cara de mapache, el estupido de las cintas, deku y... El bastardo mitad-mitad con la enana literalmente encima suyo abrazada a él. En ese momento poco le faltó por hecharse encima a matar a aquel hijo de perra que osaba a estar tan putamente cerca de su maldita enana, SU enana, pero se relajó cuando recordó que no lo era, que era la enana del pikachu... El dolor en ese momento sobrepasaba las agujetas que aún sentía y mezclado con la rabia y la impotencia se hacía horrible. Tan horrible que pasó por delante, agarró al inútil de deku de la capucha de la sudadera y lo arrastró hacia fuera.

—¿aah que pasó?— preguntó el peli verde despertando.

Bakugo no contestó y siguió arrastrando al pecoso hasta la puerta, la abrió lo empujó fuera y cerró de un portazo que despertó al peliverde y a todos los de dentro y seguramente a cualquiera de los terrenos.

—¿¡por qué cojones mi pequeña basura está con el bastardo mitad-mitad!?— le preguntó cabreado, a lo que el otro parpadeó repetidas veces.

—¿tu pequeña basura? ¿Kacchan a que te refieres?— preguntó otra vez sin comprender nada.

—ella y él están abrazados, es más, esa maldita idiota está encima suyo ¿¡por que mierda está encima suyo!?— midoriya respiró profundamente ante aquellas palabras y se talló los ojos.

—kacchan estas celoso.

—¡yo no estoy celoso! ¡Maldita sea!

—si que lo estás, y lo estás mucho— le refutó girandose para abrir la puerta y volver a entrar para seguir durmiendo, pero bakugo lo alejó del pomo apartandolo por el cuello de la capucha y acorralandolo contra la misma puerta usando un brazo al lado de su cabeza.

—¿por que mierda están así?— volvió a preguntar con tono aspero haciendo recorrer un escalofrío por el cuerpo del pequeño izuku.

—n-no tienen nada, kirishima-san está dolida y busca el cariño de todoroki para compensar lo que nunca llegó a tener de tu parte— le explicó con voz temblorosa.

—¿y que le pasa con el pikachu?— preguntó nuevamente con aquel tono tan asesino.

—¡por all might! ¡Kaminari-kun solo es su amigo! No seas tan celoso y déjame dormir...— midoriya apartó el brazo de katsuki y volvió a girar hacia la puerta, abriendola y entrando— buenos días a todos— saludó con una sonrisa.

—buenos días...— le saludó de vuelta todoroki.

—¿ya es de mañana?— preguntó sero frotandose los ojos.

— ¿________ estas bien? Te ves muy pálida— te dijo izuku acercandose a ti.

—oye ¿que te pasa?— te preguntó también tu hermano con preocupación. Shoto se incorporó mirándote. No te encontrabas bien, algo te revolvia el estómago y te sentías muy fatigada.

—n-no lo se... Me duele el estomago, estoy mareada— les dijiste poniéndote en pie.

—seguro que es por que ayer no comiste nada— dijo kaminari levantándose— venga, vamonos a desayunar.

—no... No quiero comer, m-me...— dejaste la frase al aire al sentir una arcada y saliste corriendo hacia el baño lo más rápido posible dejando a todo el mundo extrañado. Llegaste al baño del segundo piso, te encerraste dentro, abriste la tapa del baño y empezaste a vomitar.