una kirishima // bakugo x lectora

Cap:17

—¡venga todos arriba!— dijo eijirou con su típica felicidad mañanera.

—no quiero— respondiste escondiendote dentro de tu propia camiseta.

—buenos días a todos— insistió quitando aquella frazada casera de encima vuestro— ¿que tal amanecieron?

—con ganas de explotarte la cara— bakugo se levantó y sacudió su ropa sin olvidarse de antes crear unas explosiones para asegurarse de que todos os levantarais.

Se escuchó a alguien toser. Pero toser como si fuera a hechar los pulmones por la boca. Ese alguien era kaminari, a quien te acercaste enseguida preocupada.

—kami ¿estas bien?— le preguntaste ayudandolo a levantarse.

—no...— susurró volviendo a toser— me duele todo... Y tengo mucho frio.

—volvamos rápido abajo, a ver si hay alguien que pueda ayudarnos— sugirió izuku con preocupación.

Un resfriado, uno de los chungos para especificar. Eso era lo que pilló kaminari en la noche, y ahora básicamente se arrastraba por la cabaña de las chicas como si fuera un zombie.

Nadie quería acercarse a él, solo tú estabas a su lado en la entrada de los dormitorios sentada en el sofá. Por que eras la responsable de cuidar de kaminari, ya que eras su mejor amiga.

Allí también se encontraba tu grupo con el que hiciste la actividad de supervivencia, y en el piso de arriba estaban yaoyorozu, uraraka, hagakure y jirou. Ellas no sabias lo que hacían, pero los que estaban contigo jugaban a hacerse preguntas muy estupidas.

—¡quita rata eléctrica!— kaminari fue empujado por bakugo para que se alejara de él y tu lo sujetaste al vuelo.

—¡bakugo!— le reprimiste abrazando a tu mejor amigo de forma sobreprotectora.

—_________...— dijo mientras tosia— creo que me estoy muriendo...

—kami...— murmuraste acariciando su cabeza.

—mis zapas de lucecitas para ti... Mis colonias y camisetas también... Mis revistas porno... No, mejor eso no— sirvió con la nariz mientras te miraba dramáticamente— _________... Recuerda que siempre te he querido...

—¡NO MONTEN DRAMAS MALDITOS!— os gritó katsuki separandoos solamente con el grito—¡solamente está enfermo, mierda!

—¡baku no trates así a mi bebé!— lo regañaste recostando a denki en el sofá—  denki cogió un resfriado por nuestra culpa, y ahora yo lo cuidaré.

De todo aquello solo una palabra quedó guardada en la mente de bakugo.

—¿tu bebé...?— un tic se hizo presente en su ojo y kaminari soltó un agudo chillido en el momento en que bakugo lo miró desafiante.

—¡hey! ¿Que te dije de amenazar?— te cruzaste de brazos y te interpusiste entre katsuki y su seguramente víctima llamada kaminari— no se hace bakugo.

—¿¡y a ti quien mierda te da el permiso para mandarme!?— te gritó con enojo.

—no te estoy mandando, solo te digo que no amenazes a mi bebé— lo corregiste cambiando la sonrisa de tus labios por una mueca seria.

—¡no llames a esa rata bebé! ¡Y mucho menos tuyo!— te ordenó gritandote casi encima.

Lo miraste directamente a los ojos y lo separaste unos centímetros de ti— ¿y por que se supone que te he de hacer caso?

—por que soy tu novio y ni a mi me llamas así.

—Denki llegó mucho antes que tu.

La tensión se sentía en el ambiente y todos los de allí se habían callado y prestaban atención a lo que estaba pasando. Le mantuviste la mirada sin ningún tipo de miedo. Bakugo empezó a temblar de la ira y terminó soltando una pequeñas explosiones con las manos.