Under the Sleeves #1

XXII

"En ese preciso momento
comprendí que los ojos
siempre le pertenecen
a la persona que
los hace brillar"

Floyd Harrison

Cerré la puerta y caminé hacia la moto.
Cogí la pequeña mochila que solía llevar atada a ésta y saqué la remera y los jeans que había dentro.

Me saqué a tirones el esmoquin y luego la camisa.
M

e puse la remera y gruñí al no tener una campera.
La remera estaba rota, lo cuál hacía visibles mis brazos y parte de mis hombros.
Odiaba mostrar mis brazos...Por obvias razones.

Me coloqué los jeans,cogí el celular y los auriculares del pantalón y guardé el traje, echo un bollo, dentro de la mochila.

Me senté en el césped, me coloqué los auriculares y observé la casa.

Unos minutos mas tarde, encendí la moto y vacile con irme o no.

Audrey estaba allí adentro, sola, entre esa gente asquerosa.
La había traído, no podia dejarla.
¿O sí?

"Eres hostil, nunca piensas en los demás...¡Nunca dejas que te ayuden!,eres tú solo y la basura que te rodea"

Apagué la moto y me quedé inmóvil por dos horas en la misma posición y con el mismo artista sonando.
La fiestas parecía estar tan llena de gente como antes de que me fuera de ella.

La puerta se abrió y salió una muchacha.
Caminaba con una botella de cerveza en la mano y estaba borracha.
Llevaba un vestido verde.

Audrey.

-¿Audrey?,¿Que mierda te ha pasado?

Corrí hasta ella y le quité la botella de la mano.La cogí de la cintura y de apartó.

-Quiero ir a mí casa y morir...Dormir.

-Yo muero y tú duermes,¿Trato?-Reí.

-Quiero...

Se agarró de mí y vomitó sobre el camino de la casa.

-¿Como te llevaré a tu casa así?-Susurré.

-Mi mamá tiene un perro grande-Gritó Audrey.

-Vale, háblame de tu perro.

La agarré de la mano y la ayudé a subirse a la moto.

-Tengo sed-Gruñó-Devuelveme la botella Froyd

-Floyd-Reí.-Y no, ahora te agarraras fuerte de mí y no te soltarás.

-¿Y si quiero hacer mis necesidades?.

-El perro te come...Si tienes ganas de vomitar avisa...

Tarde.

-Avisame-Acabé.

Se acomodó y apoyó su cabeza sobre mi espalda.

Aceleré y emprendimos camino hacia su casa.

Cuando llegamos, Audrey seguía dormida.
La intenté despertar pero no hubo caso, así que la alcé y subí las escaleras de la entrada a la casa.

-Audrey,  ¿Donde tienes las llaves?

-Shhh.

-Audrey, préstame atención...¿Donde tienes las llaves?

-No lo sé Froyd.

-Mierda...Espera.

La senté en la escalera y revisé los bolsillos de mis pantalones.
Una caja de cigarros se cayó y logré encontrar las llaves de mi casa.

-Aquí están...No,no deja eso.

Audrey cogió la caja de cigarrillos y agarró uno.

-Audrey, dámelo.-Reí.

-Quiero dormir-Sollozó tirandoms el paquete en la cara.

-Ey, ¿Cuánto has tomado?

-Te odio, quiero dormir.Llévame a dormir-Lloró.

-Estas demasiado ebria.

La alzé y cruzé la calle hasta mi casa.
Abrí la puerta principal con la llave y entramos.

-Suéltame.

-Shhhh.

Subí las escaleras silenciosamente y abrí la puerta de mi habitación.

Dejé a Audrey en la cama y la tapé con las sábanas color negro que había sobre ésta.

-Mi habitación es un asco pero no puedo dejarte en la calle.

Agarró la almohada y la abrazó.

-Buenas noches, estaré aquí en el sillón-Susurré señalando el pequeño sillón que habia frente a la cama.

Me saqué la remera y me puse unos pantalones a rayas.
Agarré una manta y me acurruqué en el sillon.

-¿Floyd?.

-¿Si?.

-Ven.

Me levanté y me acerqué a la cama.

-¿Que quieres, Audrey?

-Tengo miedo.

Me senté a un lado de la cama y la miré.

-¿A qué?.

-A tu padrastro.

Me mordí el labio y chasqué los dedos.

-No déjate que te pase nada,A.

Me agarró de la mano y tiró de mí.

-No te vayas.

-No me iré...No te preocupes,no soy tan malo.

Golpeó la almohada y sonrió.

-Ven.

-Audrey, no, puedo domir en el...

-Por favor.

Me metí dentro de la cama y tapé a Audrey con mi manta.

-Buenas noches rubio.

-Buenas noches alcohólica.

Apoyó su cabeza en mi pecho y cerró los ojos.

-Quiero...Quiero ir a la playa-Susurró.

-¿Cuándo?.

-Mañana.

-Vale, te llevaré a la playa...Pero primero duerme.

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