Capítulo XX

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HOLA A TODOS!!

AQUÍ TENÉIS EL NUEVO CAPÍTULO.

ESPERO QUE LO DISFRUTÉIS !!!!

MUCHOS BESOS A TODOS Y BUEN VERANO!!

***

Supo exactamente como se sintió Gabriel aquella vez que encontró a un hombre en la habitación con Marion.

Durante el primer segundo fue incapaz de despegar los dedos del pomo de la puerta y quedó allí parado intentando asimilar lo que sus ojos veían. Al instante dio un paso mientras sentía que su cuerpo reaccionaba por fin ante lo que su mente había captado.

¿Qúe demonios hacía aquel hombre en la habitación de Liseth?.

Estaba inclinado sobre ella y le cubría hasta casi ahogarla. Quiso hablar pero más bien un gruñido salío de su boca, lo que hizo que el desconocido mirara en su dirección.

Le llevó dos segundos descubrir que conocía ese rostro, pero en ese tiempo había llegado a situarse tan cerca del doctor Grummer, que éste tuvo que retroceder un paso intimidado por su expresión.

- Buenos días, Lord Arlington.- John Grummer lo miraba extrañado por su actitud belicosa.-

- ¿Qué hace aquí?.- Le dijo tratando de calmarse. Era un doctor y su esposa estaba en la cama. Era más que evidente lo que podía estar haciendo.-

A Damon le costó desviar la vista para fijarla en Liseth y entonces dejó de prestar atención a lo que él hombre pudiera decir.

Estaba tan pálida que parecía tallada en mármol. Gotas de sudor perlaban su frente pero ella parecía no notarlo porque su cuerpo se mantenía totalmente inmóvil.

Se inclinó para rozarle la mejilla con el dorso de la mano. Se veía tan desvalida, tan desamparada. Toda la energía que poseía se había evaporado por completo dejando solo su cuerpo allí tumbado en aquella cama, como si de un envase vacío se tratara.

- ¿Qué le sucede?.- Preguntó en un susurro para evitar molestarla.-

El doctor Grummer comenzó a guardar sus utensilios en el maletín mientras le contestaba.

- Es simplemente gripe, milord. Pero parece que Liseth es propensa a padecer de fiebres. Siempre ha sido así, y cada invierno tiende a pasar por ésto, según me contó ella misma. En estos momentos descansa tranquila, le he suministrado un poco de laúdano para que la fiebre no le agite demasiado y ya he dado las instrucciones que deben seguirse para tenerla de vuelta lo antes posible. No se preocupe Liseth es fuerte y no tardará en recuperarse.-

Damon sostenía una de sus manos entre las suyas. Quería que lo sintiera, que supiera que estaba allí con ella a pesar de que lo más probable es que no fuera consciente ni de dónde se encontraba en esos momentos.

Le molesto que Grummer llamara a su esposa por su nombre, pero cuando lo hizo la segunda vez no pudo evitar ponerse en pie y mirarlo fijamente.

- Lady Arlington.- Afirmó sin dar más explicaciones.-

- ¿Perdón?.- John dejó lo que estaba haciendo para prestarle atención.-

- Ella no es Liseth para usted, es Lady Arlington, mi esposa, y a pesar de que en Gloucester el trato que le prestaba no era importante para ella, aquí en Londres no voy a permitir que ningún hombre la llame por su nombre a no ser que sea yo..-

El doctor asintió con la cabeza. Era lo más normal, pero la costumbre había hecho que fuera descuidado ante el marido de la dama y ahora dudaba que volvieran a contar con sus servicios en un futuro.

Saga Londres 3 " Atrapado en ti "Donde viven las historias. Descúbrelo ahora