CAP 32

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Juana camino y camino y camino por todos lados.No sabia como enfrentar la realidad que le tocaba vivir. Pero en algun momento tenia que volver y hablar con Ricardo. 

Llegó a su casa, se preparó su preciado mate y se sentó a esperar a RIcardo. Preparo todos los papeles en la mesa, acomodo todo , tomo aire, se trago las lagrimas y cuando este llego y la vio esta no se aguanto y explotó en llanto mientras el la miraba sin entender nada. 

- ¡ Juana, amor ! ¡ Morocha mia! Por favor, Juana, mirame. - le decía este mientras buscaba el rostro de ella que estaba tapado por lágrimas- Juana, decime que te pasa por favor. - Le suplicaba y esta lo largo así nomás, sin anestesia. 

- ¡ TENGO CANCER DE UTERO! - Grito Juana entre sollozos y dolor- La doctora dice que voy a estar bien por que es de primer grado, pero me muero del miedo. No se si voy a poder con esto. Es probable que yo no pueda tener hijos. Pero eso no me preocupa. ¿ Y si no puedo? ¿ Y si me canso y no puedo con todo esto? ¡Estoy cansada de pelear, estoy harta de que todo me pase a mi, estoy re podrida de la vida y la verdad es que no se si quiero pelear.- Le dijo con cansancio y dolor. 

Ricardo la miraba , la abrazo con cariño, la miro a los ojos y le dijo- Vos vas a poder. Vos siempre podes con todo. Sos una especie de mujer maravilla, y no estas sola. Estoy yo, yo siempre voy a estar con vos - mientras le acariciaba los rulos y trataba de secar sus lagrimas- ¿ Cuando tenes que ir al medico otra vez? - Pregunto este con intriga. 

- Mañana ya tengo que ir al oncologo y ahi me dicen cuando comienzo con los tratamientos.- Le dijo está cansada. 

- Bueno, mañana te acompaño ¡ vamos negrita, vamos que vos podes!- Fue lo último que hablaron y dieron por finalizada la charla para así darle batalla a la situación tan trágica que estaban pasando. 

Juana siguió yendo al especialista, siguió los pasos al pie de la letra, Ricardo la acompañó en todo momento, pero él tenía que volver al pueblo de Juana a trabajar, entonces fue cuando Juana le pidió que llegara y hablara con su mamá y le explicara que es lo que sucedía, que no la asustara que no deje que se angustie, Y asÍ Ricardo lo hizo.

El dia que Ricardo llego a casa de Juana estaba su mamá con su hermana, hacían casi dos años que no veía a su hija, y así fue como se entero su mamá que Juana estaba muy enferma. Ricardo trató de consolarla pero nada fue suficiente, esa mujer estaba destruida. Pero por suerte estaba su amiga del alma, Laura, que en todo momento acompañó a la madre de Juana y la ayudó de cierta forma a afrontar el dolor de saber que su hija estaba enferma. 

Juana estaba viviendo sola, ya había conseguido un lugar para ella, pero estaba sola, nunca dejó de ir a trabajar, siguió haciendo su rutina como si nada, tres veces a la semana le hacían rayos y quimioterapia, Juana estaba perdiendo peso,y de a poco perdía el cabello, de repente se tuvo que pelar la cabeza entera , las ojeras se pronunciaron más , las cejas y pestañas se cayeron, los días que tenía quimio, iba a trabajar desganada, cansada el tratamiento la dejaba cansada, igual ella no quería demostrar debilidad y por eso  caminaba hasta su trabajo, sacaba fuerzas de cualquier lado. En el trabajo , hacia de cuenta q no pasaba nada, no querían hacerla sentir incómoda,  estaban convencidos de que esa era la mejor forma de ayudarla. Sus amigas estaban siempre preguntando como estaba, si necesitaba algo, si estaba bien, si estaba sola algunas veces la acompañaban a su casa, le ayudaban a subir las escaleras. Así pasaron los meses y Juana no bajó los brazos.

Una tarde Ricardo la llamó, este le dijo que estaba en camino a la ciudad, Juana lo espero, y cuando este llego hablaron y decidieron comenzar otra vez la relación, pero Juana le pidió que la ayudara porque  sola con todo ella no podía Ricardo entendió y le dijo a Juana que él la ayudaría.

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⏰ Última actualización: Oct 29, 2018 ⏰

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