[NNT] Unα vıdα juntos | Ban x Elaine

|10| Superheroína

—Ban... gracias, eres lo mejor que me ha pasado.

—Lo mismo digo —le sonrió honesta y tiernamente.

Ban se acostó, para después simplemente sujetar de las caderas por detrás a la chica y atraerla hacia el.

—Bueno, si así lo quieres por el momento solo hay que dormir. —los ojos se le caían, el sueño lo había apoderado de inmediato.

A Elaine no se le quitaba la idea de que aún no traían ropa, pero a Ban sin duda no parecía importarle la desnudez de algún cuerpo porque para el eso era totalmente normal.

Ambos se quedaron dormidos sin saber en que momento, había sido la noche mas linda que hubieran tenido, así como la más tensa y explícitamente madura por el momento.

A la mañana siguiente, la princesa hada se despertó con los rayos del alba en el rostro, atravesados por la pequeña ventana a lado de la puerta, pero no era sólo el sol lo que la había despertado, si no los toques de la puerta avisando que el desayuno ya tendría que ser servido.
Ban escuchó el sonido y salió del baño, ya que esté se encontraba ahí lavándose la boca con una toalla únicamente cubriendo de su cintura para abajo.
Elaine se sorprendió al verlo, la chica ni siquiera se había percatado que ella era la única que estaba en la cama, aún desnuda por cierto.

Ban abrió la puerta —¿Si? —este traía un cepillo de dientes colocado en la boca, y tornando una mirada mesurado simplemente preguntó —¿Ah es el desayuno? Se ve delicioso.

La mucama quien traía el alimento, se quedo perpleja al observar a semejante hombre. A pesar de ser una persona tan adusta no podía evitar quedar asombrada de presenciar la situación. Esta misma volteó su mirada a un lado de Ban y se sorprendió de golpe al notar a Elaine en la cama cubriéndose con vergüenza, sin duda mal interpretó la escena, pero seamos honestos quien no.

—¡Ah si! ¡Que lo disfruten! —la mucama se fue como rayo, dejando servido los alimentos y con una expresión un tanto embarazosa.

—Jm que extraña —dijo Ban mientras atraía el carro de desayuno, oliendo el aroma que este mismo emanaba.

—Creo que se comportó extraña porque el vernos así a ambos... —pensó un momento —ay malinterpretó todo —Elaine cubrió su rostro con su mano derecha mientras otra la sujetaba cubriendo su pecho, tenía algo de pena.

—Bueno, no es como si no quisiéramos hacerlo en realidad —el zorro se acercó de nuevo al baño y empezó a hacer gárgaras, con la pasta de dientes en su boca y un chorro de agua del lavabo.

—¿Que insinúas? No hicimos nada —su rostro yacía rojo.

—Pues estábamos a punto, ¿hasta cuando me tendrás esperando? No es que no respete tu sensibilidad pero —escupió el agua y miró con enfoque sus blancos colmillos en el espejo —entiendo como te sientas aunque mis instintos aveces son más fuertes y...

—¡Ban! —la pequeña lo cayó al gritar su nombre, sin duda no quería continuar con esa conversación.

—De acuerdo, de acuerdo, desayuna, yo solo me pondré mi ropa —el hombre salió del baño apagando la luz de este y cerrando la puerta.

—Claro, pero antes quiero tomar un baño también.

—¿Entonces empiezo sin ti? —replicó refiriéndose a el desayuno.

—Supongo —la rubia sujetó la cobija que yacía entre sus manos, mientras aún se cubría con ella comenzó a volar hacia el baño —oye... —volteó el gesto hacia el de cabellos celestes, y se puso a pensar —¿no crees que es un poco irónico que te acabas de lavar la boca y comenzarás a comer? —lo miró confusa.