Jung Hoseok ›› j.hs

DIEZ;

Hoseok la miró sorprendido con los ojos como platos. Thalía ignoraba su mirada mientras bebía más. Mañana se levantaría con dolor de cabeza, pero le daba igual en ese momento.

–¿Yoongi? –Hoseok aún intentaba procesar lo que acababa de decirle la morena. ¿Intentaría, en serio, tener algo aquella noche con Min Yoongi? ¿Su Min Yoongi?

"Se supone que tendría que haber dicho mi nombre, ¿no?" Pensó Hoseok. "Se supone que con quien está conectada y con quien de verdad querría tener algo soy yo, ¿por qué dice Yoongi?"

–Sí, Yoongi. –Se encogió de brazos. –Es bastante guapo, y me gustan sus labios.

–¿Pero ¿qué dices? –Hoseok frunció el ceño. –Yoongi es mi mejor amigo.

–Ya lo sé, Sherlock.

–Pero... ¿Yoongi, de verdad? –Volvió a preguntar. No quería admitirlo, pero le molestaba que no hubiese pensado en él, que no quisiese estar con él. ¿Y Yoongi le parecía más guapo? Eso acababa de hundir su orgullo.

–Que sí Hoseok, ¿tan raro te parece? Tu amigo es guapo. –Thalía se encogió de hombros. –¡Uy mira! –Señaló con el dedo a alguien entre la multitud. –¡Está ahí! –Thalía fue en su búsqueda, pero Hoseok la detuvo sujetándola por el brazo. Ella lo miró confusa. –¿Qué quieres?

–No puedes liarte con Yoongi.

–¿Qué? –Sonó desilusionada y se giró para quedar frente a Hoseok. –¿Por qué no?

–Porque Yoongi...–Trató pensar en una excusa rápida. Lo que menos quería ver era a su mejor amigo y a su supuesta alma gemela juntos besuqueándose. Qué asco. Antes de poder formular alguna estúpida escusa, Yoongi se acercó para saludarlos.

–Ey, hola. ¿Qué hacéis aquí? –Thalía se giró para saludarlo.

–¡Pues divertirnos un rato! –Yoongi posó su mirada en Hoseok; estaba seguro de que su amigo tenía que ver en el cambio repentino de actitud de la chica.

–¿Pero hoy? Mañana hay clase, ¿no?

–Pasamos de ir, ¿verdad, Hoseok? –El castaño estaba estático entre ambos. Thalía dio un paso hacia adelante para acercarse a Yoongi, apoyó la mano en el hombro del chico moreno y se acercó a su oído. –Estoy aquí para olvidarme de mis mierdas y... probar cosas nuevas. –Susurró en un tono sugerente. Yoongi abrió los ojos sorprendido y entreabrió su boca. Hoseok frunció el ceño molesto al ver su expresión y tomo de la muñeca a Thalía para separarla de su amigo. No había oído lo que la chica le había dicho, pero por la expresión de Yoongi dedujo que lo que se había tomado ya le había subido a la cabeza.

–Vale, vale, Thalía, te estás... columpiando un poquito, ¿no crees? –Thalía soltó una carcajada y se liberó del agarre de Hoseok.

–¡Pero quiero estar con Yoongi! –Volvió a acercarse al moreno y Hoseok abrió los ojos ofendido: su amigo se rio.

–¡Yo también quiero estar contigo, Thalía! –El chico pasó un brazo por los hombros de Thalía. Él también había tomado bastante.

–¡Yoongi! –Protestó Hoseok. Él sabía que Thalía era su "alma gemela", se lo había contado todo el mismo día que leyó en el brazo de la morena su nombre. ¿Por qué ahora actuaba así?

–¡Bah! ¡No te preocupes, Hobi! –Gritó Yoongi. –¡Seguro que el alma gemela de Thalía es algún cretino que no quiera saber nada del tema!

–¡Pero Yoongi! –Espetó el castaño enfadado. Su amigo se estaba yendo de la lengua. Thalía se reía igual de perdida que el moreno.

–¡Hobi! ¿Qué mierda de nombre es ese? –Siguió riéndose agarrada a Yoongi. –Entre eso y J–Hope, madre mía. ¡Qué apodos más monos, Hobi! – Hoseok bufó y se alejó de aquellos dos abriéndose paso entre la gente. –Ay, qué amargado. –Thalía se separó de Yoongi mirando cómo se alejaba el castaño.