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Primero y lo que menos esperaba Jungkook ingresando al salón de clases fue llevarse todas las miradas de sus compañeros como si él fuese una especie de bicho raro.

Segundo, acaparar por completo la atención de su curioso compañero de asiento, Byun Baekhyun un omega de cabellos rubios y facciones infantiles, portador de un aura cálida contrastando con su traviesa personalidad; quien no dudo en llenarlo de preguntas, y es ahí donde se enteró porqué era el blanco de múltiples miradas, la respuesta: Kim Taehyung, quien no pasó desapercibido el día anterior cuando paso a recoger sus pertenencias.

Suspiro abrumado, recordando momentos en que Taehyung se veía envuelto con Jhaemin, como su primer día de clases y la mención del pelinegro en casa del alfa, y es que Baekhyun acababa de insinuar que estos dos sostenían una especie de relación más que amistosa, lo cual concordaba con sus escasas memorias y quizá eso no era lo peor, sino el hecho de saber la reputación que se cargaba el castaño.

No, en estos momentos no se encuentra del todo feliz, y se cuestiona así mismo porqué se sentía así.

—Kookie, ¿qué número artístico harás para el aniversario de la universidad? —pregunto Byun, trazando líneas en su libreta, ajeno a las emociones encontradas del azabache.

—No me he inscrito en ninguna, Baek no estoy interesado en participar —respondió con la mirada fija en la ventana, tratando de pasar desapercibido su malestar.

—Pero Kookie es obli... —enmudeció al encontrarse con Kim sonriente parado en la entrada del lugar —Kookie mira disimuladamente hacia la puerta —dijo dándole un codazo suave en las costillas para llamar su atención. Jungkook al oír el pedido, enfoco su mirada en dirección a la puerta topándose con la de Taehyung — ¿Qué parte de disimuladamente no entendiste, Kook? — recrimino el rubio apoyando la frente contra la palma de su mano, negando con la cabeza.

Jungkook quedó pasmado tratando de encontrar alguna razón para que el alfa se encontrase ahí, más no hallo ningún argumento lógico que lo involucrase con él. Taehyung no le quitaba la vista de encima e incluso ignoraba las palabras de la maestra que le hablaba en esos instantes.

Las mejillas del menor ardieron a rojo vivo por la vergüenza cuando el castaño le guiño el ojo antes de retirarse, acción que no pasó desapercibida para los fisgones atentos a ese par.

—¿Qué fue eso Kookie?

Sí, Baekhyun también noto la forma en que se miraban, pero no fue hasta ese momento que busco una explicación por lo sucedido.

—Nada Baek, será mejor guardar silencio la maestra ya entro y nos regañara si nos ve conversando.

Baekhyun asintió, percatándose del decaído ánimo del azabache.

Los medios pronosticaron un día lluvioso, por ende Jungkook esperaba no tener tan mala suerte como para que la tormenta de agua se desatase sobre su cabeza antes de llegar al trabajo, ya que una vez más ha olvidado traer el paraguas. Por otro lado y por suerte para él a logrado desempeñarse eficientemente en estos pocos meses que lleva trabajando en esa pequeña cafetería situada en el centro de Seúl, por lo que espera que su jefa tenga consideración por ello y no le recrimine por faltar el día anterior sin siquiera avisar, y es por eso mismo que hoy pretende asistir antes de su horario laboral, intentando de este modo aplacar un poco la culpa que sentía.

—Baek agradezco tus atenciones, pero entiende que estaré bien, no es necesario que vayas conmigo —pidió mirando a los ojos del rubio, sujetándolo por los hombros.

—Pero Kookie...

—Pero nada, ve con tú novio, Baek ya le he robado a su chico en el descanso, me odiara si lo hago en la salida también. Ve con él, ¿sí? —le sonrió. Byun paseo su vista entre su novio y su amigo, antes de terminar asintiendo yendo con él primero, no sin antes ofrecerle una dulce sonrisa al azabache.

Lazos Divididos | TaeKook |【OMEGAVERSE】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora