—¿Dices que lanzo a tu hámster gritando Pikachu yo te elijo? —pequeñas lágrimas recorrían el rostro de Hoseok, sujetándose el estómago debido al dolor provocado por la risa, llamando la atención de los alumnos que se encontraban en las mesas continuas.
—Sí, entro a mi habitación borracho se me lanzó encima y como me asusto lo empuje, botándolo de la cama, entonces se enojó y al ver a mi mascotita quiso atacarme con ella, tirándomela encima —contó Jimin abriendo un paquete de galletas.
—Chim ya me disculpe por eso, además no le paso nada cayó encima de la cama.
—Pero Tae, el pobre se asustó —se quejó formando un puchero.
—Jimin tan solo déjalo pasar, ya te acostumbraras —agrego Jhaemin, jugando con los palillos en la comida.
—No creí que harías algo así Tae, cuando me fui de la fiesta estabas en modo borracho melancólico maldiciendo a Yoongi, diciendo que odiabas a Jungkook y que no querías volver a verlo, ¿qué no recuerdas?
—Hobi la resaca me duro hasta el domingo por la tarde difícilmente recordaba mi nombre —respondió cubriendo su frente con la mano.
—Era normal que te durara tanto si te bebiste casi todo el minibar de Rosé —recrimino Jhaemin posando su vista en el castaño cabizbajo.
Taehyung suspiro pesadamente sin despegar la mirada de la mesa. ¿Qué se supone que estaba haciendo? ¿Por qué se comportó así?
Su mente se encontraba llena de cuestionamientos. Recuerda claramente como en medio de su enojo por lo sucedido con Jungkook concluyo que dejaría a un lado el hecho de ser destinados, todo sería como siempre fue, y él seguiría divirtiéndose sin tener que rendir cuentas a nadie, es por eso que asistió a dicha fiesta e incluso intento enredarse con una desconocida, pero al momento de la verdad su instinto se negó a consumar el acto, negándose a aceptar alguien que no sea el omega de cabellos azabache.
Alzo la vista justo en el instante que Jhaemin dejaba los palillos a un lado y en acuerdo común decidieron volver al aula, el receso terminaría pronto. Abrumado por las nuevas sensaciones que experimentaba, sonrió forzado siguiendo a sus amigos; algo se le ocurriría para arreglar todo este caos.
—¡Hey Tae! —Jimin jalo del brazo de Taehyung llamando su atención.
—¿Qué pasa, Chim?
—Mira es Jungkook ,esta solo podrías aprovechar para hablar con él.
—No Chim, decidí dejar las cosas como están, no lo obligare a estar conmigo solo por ser mi destinado —menciono con pesar. Jimin no podía creer lo escuchado.
—Dime Tae olvidaste acaso lo que me constaste cuando éramos niños. Oh mejor yo te refresco la memoria, dijiste que si llegabas a conocer a tu destinado nunca lo dejarías ir. Siempre quisiste encontrarlo y ahora que lo tienes cerca... ¿Lo dejaras ir tan fácilmente?
—Jimin teníamos ocho años, no sabía de lo que hablaba —dirigió fugazmente su mirada en dirección a Jungkook sintiendo un nudo en la garganta —Además eso fue antes de saber que estaba atado a un matrimonio por conveniencia.
—En serio, ¿esa será tu excusa? —enarco una ceja, inconforme con la respuesta —¿Recuerdas lo que hablamos cuando se te paso la borrachera? —Taehyung asintió —Entonces ve ahí y arregla las cosas —soltó al castaño empujándolo en dirección al azabache.
—¡¿Por qué tardan tanto?! ¡¿Acaso olvidaron el camino?! — llamo Jhaemin desde las escaleras junto a Hoseok.
—Anda, Tae. Yo te cubro con los demás —ánimo el pelirosa, guiñándole el ojo antes de correr en dirección contraria.
ESTÁS LEYENDO
Lazos Divididos | TaeKook |【OMEGAVERSE】
Hombres LoboJungkook nunca ha creído en cosas como el hilo rojo del destino, el amor a primera vista o esos tantos absurdos que la gente con tiempo de sobra inventa, para él simplemente son tonterías carentes de veracidad y raciocinio. Pero todo eso podría camb...