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Hermione intentaba forzosamente seguir el apresurado paso de Draco que no dejaba de dar vueltas a las esquinas, coger ascensores, atajos...

Se le veía muy seguro de todo lo que hacía pero ella dudaba de que supiese donde iba.

Tras unos 5 minutos de caminata Draco se detuvo frente a un portón negro. Se giró de medio lado para ver a Hermione y le preguntó:

- ¿Lista?

- Todavía no entiendo para qué pero como nl me queda otra....

- Me lo tomaré como un si.

Draco, abrió la puerta.

---

- Lucius Malfoy, ¿Te ha quedado clara cual es tú nueva postura en el mundo magico? - dijo el magistrado.

- Si.

- ¿Juras al ministerio y a la justica que no volverás a traicionar a los tuyos?

- Lo juro.

- ¿Aceptas, Narcissa, volver a acoger a Lucius en vuestra familia?

- Lo acepto.

- Con todo lo apalabrado, el ministro de seguridad, declara el juicio por conclui...

- ¡No ha acabado!

- ¡¿Draco!? - Exclamó Narcissa, provocando que Lucius buscara esperanzado con la mirada a su hijo.

- ¿Jóven Malfoy, que quiere decir con que todavia no ha acabado? ¿Desea añadir alguna otra cosa? - dijo el juez.

- Si, me gustaria añadir algo.

Narcissa se puso inmediatamente en pie. Lucius seguía intrigado.

- Draco no hagas ninguna tonteria... - susurró su madre.

Él no respondió, lo único que hizo fue alargar su brazo hacia las sombras de la puerta que había dejado entreabierta.

Todos miraban ansiosos esperando a que algo ocurriera. Y ocurrió.

Una bonita figura de mujer oculta bajo una capa y con el rostro inclinado hacia el suelo para no ser reconocida entro a la sala y tomó la mano del joven Malfoy.

Poco a poco fue alzando la mirada, solo miraba a Draco. Este, despacio, quitó con un suave movimiento la capucha que llevaba la misteriosa joven.

A continuación todo el estrado profirió un sonoro alarido de sorpresa.

Lucius Malfot parpadeaba perplejo y Narcissa se frotaba nerviosa las manos.

- Señorita Granger. - murmuró el hombre encargado del juicio.

Ella le miró fijamente sin decir una sola palabra.

- ¿Qué está pasando aquí? - preguntó Lucius. - ¿Qué pinta ella en mi juicio? ¿Narcissa tú sabías que iba a venir?

- Ella no sabía nada, padre. - habló de una vez Draco. - Yo la he traido.

- ¿Pero qué?

- Señor Malfoy callese, deje a su hijo explicarse. - dijo el juez.

- Magos, brujas. Madre, padre. He hecho venir a Hermione aquí, para declarar ante todos vosotros que he decidido cumplir con el normamento magico de pasar el resto de mi vida con una mujer, que no puede ser otra que ella. Por eso pido vuestro permiso, y padre, tú difícil aprobación, para pedir matrimonio a la bruja que abarca mi corazón.

La sala había pasado de ser un completo barullo a ser una sala definida por el silencio.

Todos miraban atónitos a Draco, su padre estaba sorprendido, con los ojos desorbitados. Narcissa, emocionada.

Pero él rubio solo tenía ojos para una joven, que nerviosa tampoco sabía reaccionar a lo que acababa de oir.

- Joven Malfoy, es muy educado y moral por su parte pedir permiso de matrimonio aquí, frente al estrado y en el juicio de su padre. Pero las leyes dicen que puede casarse y comprar a quien usted quiera asi que...

- Pero yo no estoy de acuerdo con esas leyes, yo he venido a anunciarlo como debería ser, a recibir la aprobación de mi familia y sobretodo, y si ella quiere, recibir también su aceptación.

- En ese caso... ¿Está la señorita dispuesta a contraer matrimonio con Draco Malfoy? - dijo el juez.

Capitulo 16.

Siento mucho la tardanza, pero ya está aqui el cap!! ❤

Te necesito, Malfoy [Dramione]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora