Pese a que Draco tenía una gran fortuna, Hermione se negó a ir de viaje hasta que ella no pudiese aportar ingresos decentes. Por lo que su Luna de Miel consistió en una semana de citas en su nuevo hogar. Ciertamente, sus inicios no habían sido para nada normales, no se habían asemejado al estereotipo de pareja común. Antes del matrimonio todo había sido muy raro y rápido para ellos, nunca salieron a cenar, o a ver una película, nunca pudieron hablar sobre sus cosas en común. Pero por suerte para ellos, se querían de verdad y habían logrado salir adelante.
El primer día de Luna de Miel, lunes, salieron en sus escobas hasta la ciudad más cercana. Pasaron el día mirando escaparates, pensando en redecorar su casa y visitando distintas tiendas de ropa para tener algo más que un par de conjuntos en el armario. Comieron en un restaurante muy conocido y con muy buenas críticas y regresaron a casa. Esa noche fue la primera vez que lo mencionaron.
- Draco... He visto una cuna blanca preciosa que quedaría genial en la habitación vacía. La que tiene la vista a las montañas...
- ¿Una cuna? ¿Para que queremos eso ahora?
- He pensado... Que más adelante... Quizá te gustaría ser padre. Yo siempre he querido ser madre.
- Oh. Estamos hablando de eso. Em claro que me gustaría ser padre pero creo que todavía es pronto. Quiero decir, no llevamos aquí mucho tiempo, tú acabas de empezar en un empleo de verdad y todavía tenemos que hacer alguna otra cosa en la casa...
- Vale, lo entiendo. Tienes razón.
El martes tan solo salieron a disfrutar lo que el clima les ofrecía, nieve. Mucha nieve. Disfrutaron como niños lanzándose bolas, tirándose al suelo y deslizándose por el hielo. Para luego entrar en calor acurrucados frente a la chimenea saboreando una buena taza de chocolate con churros.
El miércoles Hermione despertó con anginas debido a la diversión del día anterior. Draco le preparó un rico caldo para comer y por la noche se sentaron juntos a ver una película.
- ¿Sabes? No cambiaría estos días por nada en el mundo. - dijo ella.
- Te quiero. - dijo él.
El jueves tomaron su primera decisión como pareja. Habían estado toda la mañana discutiendo. Que si uno suelta mucho pelo, que si lo estropea todo con las uñas, que si el otro tiene que salir a pasear más de una vez al día... Al final, Draco convenció a Hermione, tendrían un perro. Esa tarde visitaron el refugio animal local y quedaron prendidos por unos cachorros cruce de Pastor Alemán y Husky. Se quedaron un chico de tonos blanco, marrón y negro y lo llamaron Bailey.
El viernes, último día que habían declarado como luna de miel arrojaron cualquier tipo de pensamiento racional que se les viniese a la cabeza y fueron a por la descendencia.
- Tú madre estará contenta. - jadeó Hermione.
- No hables de mi madre mientras lo hacemos.
La semana siguiente Narcissa fue a visitarlos en cuanto recibió la noticia.
- Queríais tiempo pero veo que os habéis dado prisa. - sonrió a la pareja.
Preparaos porque se vienen bastantes actualizaciones de capítulos especiales referentes a la historia <3
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Te necesito, Malfoy [Dramione]
FanfictionHay una nueva ley en el mundo magico, una ley proclamada por el nuevo y odiado gobernante, Shaw. Las jovenes que hayan cumplido los 18 serán vendidas en distintos puestos, ya sean escuelas, tabernas, el mismo ministerio... Cada mago podrá adquirir...