—Dejame ver si entendí: Joel casi te atropella ayer, le prestaste un libro ayer, le mentiste acerca de tu nombre, fue a buscarte a tu casa mientras tu estabas dejando que Seung te diera un aventón, estuviste enviándote textos con Joel y quedaron de verse la próxima semana...¡¿Y dices que no hiciste nada importante ayer?!, tienes un serio problema de prioridades, Erick—me regaño Yoandri cruzándose de brazos.
Una sonrisa se filtro en mis labios inevitablemente. Me encogi de hombros sin poder ocultar la emoción de mi rostro—No se porque te emocionas tanto. No es como si Joel fuera a pedirme que volvamos a estar juntos.
—¡Claro que lo es!, Joel quiere estar contigo.
Yo mordí mi labio inferior para reprimir una sonrisa boba antes de echarme a caminar rumbo al pasillo de mi salón.
Ese dia estaba de un mortal buen humor, asi que ni siquiera me importo tener un monton de tarea para el dia siguiente. Era como si una envoltura de positivismo se hubiese apoderado de mi cuerpo en un abrir y cerrar de ojos.
"Buscare a Ivan. Te veo en la cafetería." me envio un texto Yoyo.
Yo sonreí y me dirigi a la cafetería a paso veloz para apartar una mesa para los tres.
Pedi un burrito y un refresco de cola. Cuando mi comida estuvo lista, me dispuse a sentarme en nuestra mesa habitual y saque mis audífonos y mi reproductor junto a el libro que había comprado hacia un par de semanas. Leer con música suave era algo que disfrutaba demasiado, asi que no me costo trabajo el sumergirme en la historia; olvidándome del mundo entero.
Mi audífono izquierdo fue arrancado de mi oreja con suavidad y alce la vista, esperando encontrarme con la mirada divertida de Yoyo, pero mi pulso se acelero al encontrarme de frente a un par de ojos cafes adornados por unas largas y rizadas pestañas fijos en mi. Mi corazón comenzó a palpitar mas rápido que de costumbre dentro de mi caja torácica.
—Asi que...¿Sebastian?—pregunto Joel alzando ambas cejas con incredulidad.
Senti el rubor subir hasta mis mejillas y cerre los ojos con fuerza mientras sonreía suavemente—Creo que alguien ha leído un poco.
Joel se sento a mi lado dejando su mochila sobre la mesa—Casi lo termino—dijo encogiéndose de hombros. Una sonrisa bailaba por su rostro—¿Sebastian?—pregunto de nuevo.
Una risa nerviosa se apodero de mi y pude notar como su sonrisa se desvanecia mientras su ceño se fruncia ligeramente.
—¿Q-Que pasa?—pregunte con cautela.
Joel abrió la boca para responder, pero volvió a cerrarla mientras negaba energéticamente con la cabeza—Tu risa me parece familiar—dijo con la voz enronquecida.
Mi corazón golpeaba con fuerza dentro de mi pecho y sentí mis manos temblar. ¿Me había reconocido?, ¿En ese momento?, ¿Con mi cabello hecho desastre y la ropa mas horrible que pude haber encontrado en mi closet?
—¿Ah si?—dije intentando sonar despreocupado.
Joel se inclino hacia mi un poco y su aroma me invadio por completo, haciéndome perder el aliento un par de segundos.
—¿Cómo te llamas?—inquirio en voz baja, mirándome directo a los ojos.
Mi corazón se acelero y abri la boca para responder. Sus ojos se posaron en mis labios y su mirada se oscurecio por completo. Yo mire los suyos. Recordaba perfectamente la sensación de sus labios sobre los mios. La presión de su boca,, la calidez de su aliento, el sabor de su lengua contra la mia..., por un segundo, crei que iba a besarlo.
—Y-Yo...—tartamudee.
"¡Vamos, Erick!, ¡Tu puedes decirle!, ¡Dilo de una buena vez!" me regañe mentalmente.
—¡Joey!, ¿No vienes?—la dulce voz de un chico, hizo que Joel se volviera hasta encontrara a la persona que lo llamaba.
Yo cerre los ojos y suspire fuertemente. Cuando los abri nuevamente, pude ver a Kwon Ji Jong, caminando directamente hacia nosotros.
—¡Hey, Ji!—saludo Joel, con una sonrisa en su rostro.
—Vamos a ir a desayunar al restaurante de Will, ¿no vienes?—dijo el sonriéndole con una pequeña sonrisa en su rostro.
Yo apreté los dientes para no gritar del coraje que estaba invadiéndome.
—Tengo clase en diez minutos, Ji. No podre acompañarlos.
Algo rugio en mi interior. La satisfacción de ver el rostro de Ji Jong decepcionarse casi me hizo sonreir.
—Esta bien, Joey, será la próxima—dijo acercándose a la mejilla de mi Joel para besarla—¡Hola!—chillo dirigiéndose a mi—¡Kwon Ji Jong!, mucho gusto..
Yo abri la boca buscando desesperadamente una forma de escapar de ella. No quería que, cuando Joe se enterara quien era, estuviera Ji Jong. Queria que estuviésemos solos. Queria ahorrarme la humillación y, ¿Por qué no?, en el fondo esperaba que estuviésemos solos para que me envolviera entre sus brazos y me besara.
—¡Mi pequeño ojitos!—una ronca voz conocida hizo que me girara en mi silla.
Seung caminaba con paso despreocupado en mi dirección. Sin decir una palabra, Seung tomo mi mano y me puso de pie de un tiron.—¿Les importa si me lo robo?
—Adelante—Ji Jong respondio.
Joel miro a Seung con el ceño fruncido antes de apretar los labios en un gesto contrariado. Seung tomo mis cosas con una velocidad impresionante y me guio de la mano hacia afuera de la cafetería.
—¡Gracias por sacarme de ahí!—exclame cuando estuvimos afuera.
Seung rio suavemente y apretó mi mano diciendo—Un placer, Er. La próxima vez, asegúrate de estar únicamente con Pimentel, para que puedas decirle quien eres.
—Lo tendre en cuenta—masculle.
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