in your antique shop (pausada)

챕터 once

La semana paso de tal manera que no me di cuenta.
No habia tenido tanta tarea ni responsabilidades por esta semana, lo cual me dejaba la mente libre y con bastante tiempo para pensar, cosa que no era en lo absoluto bueno.

Pensé en decirle YoungMi que me habia enfermado o algo asi, pero no caería tan facilmente, teniendo en cuenta que era esa la excusa que ponía siempre para rechazar sus invitaciones.
Comenzaba a hacerme la idea de que tendria que ir a la maldita fiesta. Al menos sería en la casa de uno de los amigos de mi hermano. No estaria tan mal, tal vez por fin conoceria alguna de las cosas que YoungMi me mencionaba. Que estoy diciendo? No se que será lo siguiente, vender drogas, tal vez.
En fin, ya era viernes. Apenas llegaba a mi habitación y a mi teléfono no dejaban de llegar mensajes de YoungMi, pidiendo ver que me pondria. Faltaban 5 horas para la jodida fiesta, y ya comenzaba a molestar.
No puedo creer que me haya metido en este problema solo por Taehyung y por mis ganas de darle revancha. Más bien fue mi impulso. Este niño empezaba a traerme más complicaciones de las esperadas. Jinha siempre mencionaba cosas de el, pero se le olvido advertirme, en estos 8 años, lo imbécil que era.

Unas fuertes bocinas de coche, retumbaron en mis timpanos aún dormidos. Senti pesados mis párpados, por haber domirdo lo que parecía ser un largo rato.
Fuí descalza hasta el marco de la ventana, y me encontre con el auto de YoungMi.
Ella y Taehyung estaban apoyados en este, esperando. YoungMi traía consigo un bolso gigantezco, probablemente le serviria para llevarme en el, si me negaba a ir con ellos.
Levantó su rostro y me vio. En sus pequeños labios se dibujo una sonrisa y empezó a saltar con uno de sus delgados brazos agitandose.

- Que haces aquí. Las estúpidas bocinas siguen retumbando en mi cabeza, dejame dormir, maldita sea.- le grité, rodeando mis labios con mis manos, para crear más eco a mis palabras.

-ABREME YA JYNIU, NECESITO PREPARARTE!.- esta chica parecía no rendirse, seguía agitando su brazo y saltando.

Sólo camine por mi habitación hasta encontrar mis zapatos, me los coloque con prisa y baje.
No había nadie en casa. En el momento de abrir, YoungMi casi cae sobre mi, puesto que estaba apoyada en la puerta.
Vestía una linda y femenina falda blanca, con detalles en rosa. En su diminuta cintura, se posaba un cinturón de cuero y tenía una blusa que dejaba al descubierto sus notorias cláviculas.

-No diras nada?.- Dió una vuelta sobre sus pies, con la expectativa de que comentará algo sobre su ropa. Ladeo su cabeza, con cierta decepción por aún no conocer mi opinión.

-Nada?.- dije sin darle importancia. Solo me percate que estaba Taehyung y que justo en este momento, tenía un pijama lleno de ridiculos pandas, haciendo gestos aún más ridículos.
Mientras que el tenía una linda gorra al reves, sobre su cabeza. Una camisa negra que dejaba al descubierto sus flacos brazos, algunas pulseras de plata y un jean gris. No me senti avergonzada en lo absoluto, después de todo, le guardaba cierta confianza por ser hijo de mi tía.- Supongo que vienes a llenarme la puta cara de tu maquillaje y vestirme con tu ropa.

-Supones bien querida, entremos!.- parecía mucho más animada de lo normal.
Taehyung solo me observaba desde afuera, y cuando choco sus ojos con lo míos, se incomódo y desvio su mirada.