Te Vi En Mis Sueños

2°Capítulo

Harry corrió detrás de mí.

-Leeexy- gritó- ¿Donde vas? Es domingo- dijo gracioso.

Me giré y lo mire con la boca abierta y sin saber porque empecé a reírme a carcajadas.

-Puto despertador-dije entre risas- cada día está más loco.

-Normal, si le das cada golpe..- dijo aguantando la risa.- Hoy viene el camión de la mudanza¿recuerdas? Por eso pusiste el despertador tan temprano, cabeza hueca.

-¿Qué mudanza?- dije estrechando los ojos.

-Volvemos a nuestro pueblo Lexy, te lo dije ayer,  claro, que con la borrachera que llevabas como para acordarte- dijo entre dientes.

-¿Y que vamos a hacer allí? ¿Se te ha perdido algo? -dije sarcástica- Y no me llames Lexy,  soy Trouble- añadí con la cara en alto.

-Sí sí,  como digas doña Trouble,  voy a seguir llamandote Lexy- rió y paró al ver mi cara de pocos amigos- ¿Acaso no viste que todas tus cosas están empaquetadas?

-¿Crees que con el mundo dándome vueltas voy a parar a ver mi habitacion?, si, Hazz,  claro- dije sacando a relucir mi sarcasmo.

-Pues te agradecería que bajarás las puñeteras cajas que tu hermano, osea yo, tuvo que empaquetar por ti porque estabas demasiado ocupada tirandote a medio barrio-sonrió hipócrita.

-Pues que las baje mi hermano, osea tu, porque tengo que ir a tirarme a la mitad que me queda- sonreí igual que él y me fui.

-Tú! Ven aquí a la de ya- gritaba mientras yo me alejaba de el andando tranquilamente, me giré y le saludé con la mano.

Ahora tenía que ir a despedirme de mis amigos, bueno, no eran mis amigos realmente, yo rulaba de grupo en grupo y nunca hacía amigos, no me gustaban, pero tenía que ir al menos a avisar de que me iba. Sin saber a donde me llevaban mis pies me encontré en casa de Liam y llamé a su puerta.

-Hola Trouble, ¿Qué hacés tan temprano aquí? - dijo provocativo.- ¿no te bastó lo de anoche?

-No me importaría repetir,  pero venía a avisar de que me iba- reí y me acerqué a el provocativa- pero tal vez nos de tiempo a algo ¿no? -mis dedos pasearon por su marcado abdomen desnudo hasta la cinturilla del pantalón de su pijama y  acerque mis labios a los suyos, pero cuando el fue a besarme me separé mirando mi reloj- no, que va, no hay tiempo para nada- dije despreocupada- y yo que tu bajaba eso de alguna forma- dije señalando su entre pierna y guiñandole un ojo- adiós guapo, hasta... ni idea- reí y me alejé lanzandole un beso, que el atrapó distraído y se lo acerco a los labios- eso es lo único que te va a quedar de mi, gilipollas-susurré riendo.

-Trouuuuuble- gritó una chica a mis espaldas- ¿tu tan temprano levantada?

-¿Qué tiene todo el mundo con eso?- dije riendo- Hola Mar, dile al club de deporte que me mudé ¿si?- exigí y ella asintió despreocupada.

-¿Donde?- dijo intentando cotillear.

-A mi antiguo pueblo, ni siquiera recuerdo como se llama- mentí- ya sabes, pasó de todo- reí falsamente y caminé un poco para quitarmela de encima, pero no sirvió, me seguía como la lapa del club de las porristas que era.

-Bueno, pues espero que te vaya bien allí y que - se pensó lo que iba a decir- no.. no cambies- sonrió, una sonrisa falsa y se escusa diciendo que tenía que irse a no se donde, pero ¿que me importa donde vaya? A mí, desde luego no.